Regato, José Manuel del (ca. 1789-?).
Médico español, nacido en Madrid hacia 1789 ó 1790, cuya fecha de muerte se desconoce.
Vida
Hijo de José del Regato Hoyo y de María Aquilina López, de origen santanderino, hizo la carrera de medicina y trabajó luego en periodismo, como colaborador de La Abeja madrileña; en 1815 fue condenado a muerte en rebeldía por sus escritos en este periódico, así que un año después emigró a Bayona (Francia), donde parece ser que fue secretario del conde de Toreno.
Conspirador en favor de la libertad, se le atribuye el proyecto de Renovales de sublevar las provincias vascongadas en 1816 y en 1818. Se marcha luego a Inglaterra, y en los corrillos de la época se le cita como agente de Renovales entre este país y España. Aunque está estrechamente vigilado, hace en esta época frecuentes viajes; de hecho, en marzo de 1819 hace visar su pasaporte para Burdeos pues, según Miñano, en octubre de ese año pasó al servicio del embajador español, el Duque de Fernán Núñez.
Llega a Toulouse en 1819 y a Perpiñán en 1820. Dos días después entra en España pero, casi inmediatamente, vuelve a Perpiñán para recoger a su mujer, afectando ostensiblemente su liberalismo. En el mes de abril se encuentra de nuevo en Barcelona. Es uno de los que intentan proclamar la Constitución en la comarca murciana.
Fue oficial de la Secretaría de Hacienda y del departamento de Ultramar entre 1820 y 1823, aunque se dijo que había dimitido en 1821, al ser nombrado ministro Angel Vallejo. Se sabe que trabajó como agente secreto a favor del absolutismo, aunque no está nada claro el momento en que se inició en estas tareas, pues bien pudiera ser 1819, 1820 o incluso 1817. Por estas mismas fechas vieron la luz sus escritos Fragmentos de la Abeja madrileña acomodados a las circunstancias presentes (1820), y de Representación que hace al Rey (1821).
Su nombre masónico era «Lanuza», según la lista del Archivo General de Palacio. Fue uno de los fundadores de la Comunería en enero de 1821. Formó parte del grupo que se reunía en Sevilla en el Café del Turco en 1821, donde al parecer fingía ser ultraliberal para desautorizar el movimiento urbano. Sus servicios a la causa de la libertad, no obstante, son reconocidos públicamente por las Cortes el 1 junio 1822, ya que dos meses después firma como ministro de la Gobernación del Ministerio fantasma de Fernando VII un ataque a los liberales, lo cual no le impide, siguiendo el doble juego, dirigir una carta al Espectador, en la que dice no tener nada que ver con Zurriagos y Tercerolas.
No aparece su nombre entre los contrarrevolucionarios cuando la escisión de los comuneros en 1823; a comienzos de este año pierde su destino por liberal, y aun se le hace salir de Sevilla en el término de 24 horas. A pesar de las protestas de su esposa, el expediente se pasa a la comisión de infracciones de las Cortes. Se dice que intervino en la rendición de Ballesteros, quien le nombró comisario ordenador y le confió delicadas misiones en Cartagena, y vuelta a Priego (Córdoba) con pasaporte de las autoridades militares francesas.
En seguida empiezan sus memorias a Fernando VII, y también los premios en metálico que le da el rey. En 1824 se marcha a Cádiz, y avisa de la inminente expedición de Valdés. El mismo año, en un cuaderno que se conserva manuscrito, aconseja moderación a Fernando VII y le recomienda que imite a Luis XVIII, a fin de ganar para la causa realista a los seducidos por el liberalismo; además, recomienda al Rey que desconfíe de las sociedades secretas, que están reconstituyéndose en la clandestinidad.
Escribe Breve repaso del primer tomo de la Historia de la revolución de España de 1820 a 1823 escrita en francés por un español testigo ocular (1825), obra que no se le permite publicar, posiblemente debido a la existencia de dos tendencias, la de los ex-josefinos y la del antiguo partido realista, que se combaten los unos a los otros. Regato es absolutista puro y, por tanto, enemigo del partido moderado en formación; además, llegó a tener gran influencia con el rey, de quien fue «agente personalísimo» desde 1828 hasta, por lo menos, 1831.
Entre otras cosas, hizo un proyecto de reforma de la policía en 1830. En 1832 fue desterrado de nuevo a Ibiza, de donde intentó evadirse en 1835. Ese mismo año se le acusa de haber organizado una sedición de tipo carlista y es condenado a ocho años de confinamiento en Filipinas, adonde llega oficialmente en 1837 y su expediente se une al de Grimarest, que se toma como ejemplo para saber cuánto hay que abonarle para vivir. Las numerosas representaciones de Regato a Isabel II no tuvieron éxito, y fueron recogidas en Representaciones dirigidas al Gobierno de Doña Isabel II, en Noviembre de 1840 (Madrid, 1843). También es importante el Cuaderno sin título, que se encuentra manuscrito en el Archivo Histórico de Palacio (Estado, Leg.3060).
Bibliografía
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Archivo General Militar de Segovia.
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Archivo General de Palacio (Papeles Reservados, 87, Causas,V, 192, 246, 367).
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GIL NOVALES, Alberto. Las Sociedades patrióticas (Madrid: Tecnos, 1975).
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MORANGE, Claude. «José Manuel Regato (Notes sur la police secrète de Ferdinand VII)», en Bulletin Hispanique, 34 (1977), (pp. 421-535)
A. Gil Novales.