Lamb, Charles (1775-1834).
Poeta, dramaturgo, ensayista, narrador y crítico literario inglés, nacido en Londres en 1775 y fallecido en 1834. Recordado sobre todo por sus adaptaciones de grandes obras de la literatura universal para el público infantil, fue también un célebre ensayista preocupado por las cosas cotidianas y un poeta romántico que, perteneciente a la primera generación de ellos, se acogió a los cánones de claridad y sencillez preconizados por la antigua tradición renacentista europea.
Cursó buena parte de su formación académica en la famosa institución caritativa Christ’s Hospital, donde compartió aulas con otra de las grandes figuras de las Letras inglesas, el poeta y ensayista Samuel Taylor Coleridge, quien gozó de la amistad de Lamb durante toda su vida y anduvo enamorado, en su primera juventud, de su hermana Mary Evans.
En 1792, al término de sus estudios, encontró trabajo en el departamento de contabilidad de la sede londinense de la Compañía Comercial de las Indias Orientales (East India House), empresa de la que dependió hasta el momento de su jubilación (1825). Afectado por graves desequilibrios psíquicos que eran frecuentes en su familia, en 1795 atravesó por una aguda crisis mental. Un año después, su hermana, víctima de una enajenación monomaniaca homicida, dio muerte a su propia madre (que estaba inválida), lo que obligó a Lamb a hacerse cargo de la tutela de la joven, para evitar su internado en una residencia psiquiátrica. A costa de sus ingresos, Charles Lamb pagó durante toda su vida a un guardián que se ocupaba de atender y vigilar a Mary Ann, y no se separó jamás de su hermana, con la que llegó a compartir aficiones y objetivos literarios.
En sus comienzos como escritor, Charles Lamb quedó adscrito a la escuela sentimental de Cumberland, corriente que pronto abandonaría para centrar su creación literaria en el reflejo de las formas de vida medievales, lo que convierte algunas de sus obras en un claro precedente de los modelos posteriormente consagrados por Walter Scott. Pronto se distinguió por su activa participación en tertulias y cenáculos literarios, en los que, al lado del susodicho Coleridge, se relacionó con otros destacados autores de su tiempo, como William Hazlitt, Leigh Hunt, Robert Southey y William Wordsworth. Gran conversador, ejerció -tanto en aquellos círculos privados como por medio de la difusión escrita- una constante crítica literaria caracterizada por su agudeza y su originalidad, pues estaba dotado de un extraordinario instinto para la construcción de personajes, y, en general, de una acusada sensibilidad artística que le permitía analizar con discreción y perspicacia cualquier género literario. Una buena parte de estas críticas quedó recogida en la correspondencia que mantuvo con algunos de los escritores recientemente citados.
Irrumpió en el panorama cultural inglés con algunos poemas y con una tragedia titulada John Woodvil (1802), obras que no pueden contarse entre lo más granado de su producción literaria. Pero en 1807, llevado de ese afán por divulgar las grandes obras de la literatura universal, adaptó, en colaboración con su hermana Mary Evans, varias piezas teatrales de Shakespeare, que tras pasar por su pluma quedaron convertidas en una serie de cuentos infantiles recopilados bajo el título de Tales from Shakespeare (Cuentos de Shakespeare, 1807). Ante el éxito cosechado por esta obra, al año siguiente publicó una versión en inglés de la Odisea, también destinada al público infantil y juvenil, titulada The Adventures of Ulysses (Las Aventuras de Ulises, 1808).
En aquel mismo año, la suma de su condición de crítico literario y su pasión por la literatura inglesa de la época isabelina arrojó como balance ensayístico la que está considerada como una de sus mejores obras, Specimens of English Dramatic Poets, who livet about the Time of Shakespeare (Poetas dramáticos ingleses que vivieron en la época de Shakespeare, 1808), obra que consagró definitivamente a Lamb como uno de los críticos literarios más brillantes de su tiempo.
A partir de entonces, Charles Lamb ocupó un papel preponderante en el panorama literario inglés, al que enriqueció considerablemente con una riquísima colección de ensayos que fue divulgando en diferentes publicaciones (sobre todo, en el London Magazine, donde colaboró con asiduidad entre 1820 y 1825, bajo el pseudónimo literario de «Elia»). Caracterizados por la sencillez e inmediatez de sus reflexiones -centradas en personajes conocidos y hechos consuetudinarios-, estos ensayos influyeron decisivamente en la orientación estética de los poetas lakistas. La mezcla de humor fantástico con algunas pinceladas de bien dosificado dramatismo identifica el paradigma del ensayo romántico con estos trabajos de Lamb, que vieron la luz en dos recopilaciones tituladas Ensayos de Elia (1823) y Más ensayos de Elia (1833).
Además de las obras citadas, Charles Lamb -que acabaría siendo objeto de las sátiras de Lord Byron– fue autor de otros títulos como El genio del hogar y Apuntes sobre Shakespeare.