Carrera Verdugo, José Miguel (1785-1821).
Político chileno nacido en Santiago de Chile el 15 de octubre de 1785 y muerto en Mendoza (Argentina) en 1821. Hijo del coronel de Milicias Reales Ignacio de la Carrera y Cuevas y doña Francisca de Paula Verdugo Fernández de Valdivieso y Herrera, fue el tercero de cuatro hermanos: Javiera, Juan José, y Luis.
Sus primeros estudios los realizó en el Colegio Carolino, y a los 9 años ingresó como cadete en el regimiento de Caballería del Príncipe. En 1797 alcanzó el grado de alférez y en 1805 el de teniente.
Por sus aventuras amorosas en Santiago y El Monte, su padre lo envió a Lima a cargo de un tío suyo. En la capital peruana protagonizó nuevos escándalos, por lo que fue arrestado en la fragata Castor, desde donde se fugó a Chile.
En 1806 viajó a España y se alistó en el ejército. Tomó parte en las campañas de 1808, 1809 y principios de 1810, en las que intervino en más de 20 hechos de armas; se destacó especialmente en la ocupación de la ciudad de Mora, en la retirada de Consuegra, en los combates de Yébenes y en las batallas de Talavera y de Ocaña, batalla esta última en la que fue herido el 19 de noviembre de 1809 y debió ser trasladado a Cádiz para su restablecimiento. Fue condecorado con la Cruz de Talavera y ascendido a sargento mayor del Regimiento de húsares de Galicia; se le encargó su mando y reorganización, lo que no alcanzó a realizar debido a su regreso a Chile con motivo de los acontecimientos que culminaron con la Primera Junta de Gobierno el 18 de septiembre de 1810. Trabó amistad con San Martín y participó en la Guerra de la Independencia Española.
El 25 de julio de 1811 regresó a Chile y el 4 de septiembre de ese mismo año tomó parte en el complot que llevó a la familia Larraín al gobierno. Posteriormente volvió a sublevarse, lo que le llevó a formar parte, como representante de la provincia de Santiago, de la nueva Junta de Gobierno. La disolución del Congreso el 2 de diciembre de 1811 lo enemistó con el representante de Concepción, Juan Martínez de Rozas. Este enfrentamiento estuvo a punto de desencadenar una guerra civil. La mediación de Bernardo O’Higgins Riquelme evitó el conflicto y José Miguel Carrera fue nombrado Presidente de Gobierno.
En Santiago participó, el 4 de septiembre de 1811, en un complot que aupó al gobierno a la familia Larraín, contra cuyos miembros realizó otro movimiento el 15 de noviembre que lo llevó a formar parte de la nueva Junta de Gobierno, en representación de la provincia de Santiago. La disolución del Congreso, el 2 de diciembre, lo enemistó con Juan Martínez de Rozas, representante de Concepción, por lo cual estuvo a punto de desencadenarse la guerra civil.
En su gobierno se autorizó, por el decreto del 16 de enero de 1812, la instalación de la prensa; nombró redactor del primer periódico del país, Aurora de Chile, a fray Camilo Henríquez; sancionó la primera Constitución Política de la República; creó la primera bandera nacional y el primer escudo de armas; dispuso la creación de escuelas en los monasterios y la mejora de los hospitales.
En marzo de 1813, ante el desembarco del brigadier Antonio Pareja, enviado por el virrey del Perú para sofocar la emancipación de Chile, asumió el mando del ejército como General en Jefe y combatió en Yerbas Buenas, San Carlos, Talcahuano y en el sitio de Chillán, desde donde se tuvo que retirar por no contar con los medios adecuados. El fracaso del sitio de esta ciudad, emprendido en los meses del invierno y sin los elementos adecuados, y la sorpresa de El Roble, que puso en primer plano al coronel Bernardo O’Higgins, movió a la Junta de Gobierno a sustituirlo del comando del ejército; fue sucedido en enero de 1814 por el brigadier O’Higgins. Una vez entregado el mando en Concepción, al dirigirse a Santiago fue hecho prisionero por los españoles, pero logró fugarse. El 23 de julio de 1814 encabezó una revuelta que depuso a Francisco de la Lastra.
Desconocido como jefe del Gobierno por las fuerzas del ejército que se encontraban en Talca, hubo de enfrentar un movimiento en su contra dirigido por O’Higgins, que terminó con la victoria de Tres Acequias. En ese momento la presencia de un emisario del nuevo jefe realista enviado por el virrey, el coronel Mariano Osorio, aunó los esfuerzos de los patriotas; Carrera y O’Higgins se unieron en la defensa del país, pero la falta de tiempo para organizar las fuerzas y la escasez de material de guerra hizo que sucumbieran en la batalla de Rancagualas fuerzas patriotas y Carrera debió emigrar con los restos del ejército a Mendoza
Con motivo de lo acontecido en Rancagua, Carrera tuvo que salir del país y refugiarse en Mendoza (Argentina) con lo que quedaba de su ejército. Allí entró en conflicto con el gobernador, por lo que fue hecho prisionero y enviado a Buenos Aires. Desde allí viajó a EE.UU. en busca de ayuda para reconquistar Chile. En Estados Unidos se entrevistó con el presidente James Madison y otras muchas personalidades influyentes. Logró organizar una escuadrilla de cuatro buques, en los que transportó una considerable cantidad de armas, municiones y pertrechos, además de una serie de oficiales voluntarios. En enero de 1816 arribó a Buenos Aires, donde el Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata, Juan Martín de Pueyrredón, secuestró la expedición y encarceló a Carrera. Una vez más logró fugarse y se dirigió a Montevideo, donde recibió la protección del general portugués Carlos Federico Lecor. En Montevideo conoció la noticia del fusilamiento de sus hermanos en Mendoza.
En 1819, desde Montevideo llevó a cabo una campaña publicitaria en la que propició el estado federativo y denunció los intentos de José de San Martín y Juan Martín de Pueyrredón de establecer una monarquía. Por estas actividades fue expulsado de Montevideo. Se unió entonces a los caudillos de las provincias del norte de Buenos Aires, que vencieron a las fuerzas de Pueyrredón e instalaron en el poder a Manuel de Sarratea, el cual instauró el estado federativo. El fracaso del sitio de Buenos Aires en el mes de julio y la sorpresa de sus fuerzas por Dorrego el 2 de agosto de 1820 en San Nicolás, marcaron la declinación de su estrella; más tarde, el Tratado de Benegas, suscrito entre López y el gobernador de Buenos Aires, general Martín Rodríguez, lo obligó a huir hacia el sur y refugiarse con sus escasas fuerzas en las tolderías de los indios de Ranqueles, que lo nombraron Pichi Rey.
Dos meses estuvo en las tolderías de los Ranqueles y a comienzos de febrero de 1821 se puso en movimiento hacia San Luis, buscando el camino hacia Chile. Solicitó paso a los gobernadores de Córdoba y San Luis y éstos respondieron movilizándose contra él. Obligado a combatir, venció al gobernador de Córdoba, Juan Bautista Bustos, en Chajá, y al coronel Luis Videla con las fuerzas de San Luis en la Ensenada de las Pulgas; ocupó la capital de la provincia. Desde San Luis inició una nueva campaña para unirse al general Francisco Ramírez, que lo llamó a emprender una acción contra Buenos Aires. La campaña con Ramírez fracasó por la obstinada resistencia que opuso Córdoba; los caudillos se separaron después de Cruz Alta, en la que no pudieron tomar el campo atrincherado de Bustos. Carrera se retiró hacia el oeste y regresó a San Luis después de derrotar a las fuerzas de Mendoza, mandadas por el coronel Bruno Morón, en el sangriento combate de Río Cuarto. Morón murió en el campo de batalla y la alarma llegó hasta el solio del Director Supremo de Chile. O’Higgins, temeroso del peligro que para su gobierno suponía Carrera, envió medios para reforzar a sus opositores. El 21 de agosto de 1821 fue derrotado en El Médano y tuvo que retirarse a Jocolí, donde fue traicionado por el comandante Manuel Arias y fue una vez más apresado. En Mendoza fue procesado por un tribunal militar y condenado a muerte. El 4 de septiembre de 1821 fue fusilado en Mendoza.
Bibliografía
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COLLIER, S. «Chile», en Leslie Bethell Ed., Historia de América Latina, Vol. 6, Barcelona, 1991.
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LUCENA SALMORAL, Manuel, et al.: Historia de Iberoamérica. Historia Contemporánea, Madrid, 1988.
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VILLALOBOS, S. et al. Historia de Chile. Santiago, Editorial Universitaria, 1980.
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