Serna y Martínez de Hinojosa, José de la (1770-1832): Un virrey entre la independencia y el absolutismo
Serna y Martínez de Hinojosa, José de la (1770-1832): Un virrey entre la independencia y el absolutismo
José de la Serna y Martínez de Hinojosa, nacido en Jerez de la Frontera en 1770 y fallecido en Sevilla el 6 de julio de 1832, fue una de las figuras más complejas de la historia colonial española. Militar y administrador colonial, desempeñó un papel crucial durante los años de la lucha por la independencia de América Latina, destacándose principalmente como el cuadragésimo virrey del Perú, cargo que ocupó desde 1821 hasta 1824. A lo largo de su vida, estuvo envuelto en situaciones que reflejan el delicado equilibrio entre el absolutismo y el movimiento independentista que marcó la época.
Orígenes y contexto histórico
José de la Serna nació en el seno de una familia noble en Jerez de la Frontera, hijo de Álvaro de la Serna y Figueroa y Nicolasa Martínez de Hinojosa. A la edad de quince años, inició su carrera militar al ingresar en los Reales Ejércitos, donde comenzó su formación en el Colegio de Artillería de Segovia. Esta formación le permitió forjarse una sólida carrera como oficial militar, participando en diversos conflictos y demostrando su valía en el campo de batalla.
Su carrera comenzó con la campaña en Cataluña contra las fuerzas revolucionarias francesas, donde tuvo su primer contacto con el campo de batalla. Posteriormente, formó parte de la escuadra comandada por José de Mazarredo, la cual llevó a cabo la segunda expedición naval contra Inglaterra en 1789. En 1791, participó en la defensa de Ceuta y más tarde luchó en la Guerra de Independencia contra las tropas de Napoleón Bonaparte. Fue capturado durante el sitio de Zaragoza, pero logró escapar de su prisión en Francia, buscando refugio en Suiza y Grecia antes de regresar a España.
Logros y contribuciones
A lo largo de su carrera, La Serna fue ascendido progresivamente en los rangos militares. En 1814, fue ascendido a brigadier y asumió el mando del Tercer Regimiento de Artillería. Al año siguiente, fue condecorado con la Orden Militar de San Hermenegildo y ascendido al grado de mariscal de campo. En reconocimiento a su valía durante el sitio de Zaragoza, fue declarado Benemérito de la Patria en grado heroico.
La relación con el poder político de la época fue crucial para su ascenso. Fue nombrado por el virrey Joaquín de la Pezuela para asumir el mando del ejército en el Alto Perú, tras la renuncia del mariscal de campo Sánchez Salvador. Este nombramiento ocurrió en un contexto de tensiones crecientes entre los realistas y los patriotas que luchaban por la independencia del continente.
En 1816, La Serna zarpó de Cádiz y llegó a Arica el 7 de septiembre, junto al general Jerónimo Valdés y otros oficiales, con la intención de frenar el avance de los patriotas. Fue designado para comandar el ejército del Alto Perú y obtuvo victorias importantes, como la que logró contra la expedición rioplatense del general Martín Güemes. Sin embargo, las tensiones con el virrey Pezuela se hicieron evidentes al no lograr impedir el avance del general San Martín hacia Chile, lo que desencadenó una serie de conflictos internos dentro del ejército realista.
Momentos clave de su mandato
Uno de los momentos más decisivos en la vida de La Serna ocurrió en 1821, cuando tras renunciar a su mando en el Alto Perú debido a sus diferencias con Pezuela, se trasladó a Lima con la intención de regresar a España. No obstante, la situación política en el Perú estaba cambiando rápidamente. La creciente influencia de los patriotas y la expedición libertadora de San Martín llevaron a La Serna a tramar una conspiración para deponer al virrey. Este golpe de Estado culminó en el motín de Aznapuquio el 29 de enero de 1821, donde La Serna se proclamó virrey del Perú en sustitución de Pezuela, decisión que fue aceptada por la Corona española.
Aunque su posición era ahora la de virrey, La Serna enfrentaba enormes desafíos. Intentó negociar con el general San Martín en la hacienda Punchauca, pero sus esfuerzos fueron infructuosos. La situación empeoró cuando los patriotas sitiaron Lima, lo que obligó a La Serna y su ejército a abandonar la ciudad en julio de 1821, aunque dejaron una guarnición de dos mil soldados en el fuerte Real Felipe de El Callao para resistir.
A pesar de estos esfuerzos, el poder de los realistas en el Perú comenzó a decaer. El 28 de julio de 1821, San Martín declaró la independencia del Perú y asumió la presidencia del Protectorado. Las fuerzas realistas, lideradas por el general José Canterac, intentaron recuperar Lima, pero la situación continuaba siendo insostenible para los realistas.
La situación dio un giro radical en 1823 cuando Simón Bolívar envió el poderoso ejército colombiano para consolidar la independencia de Perú. En este contexto, La Serna unió sus fuerzas con las de Pedro Antonio de Olañeta, un líder realista del Alto Perú, y se dirigieron a Ayacucho para librar una batalla decisiva. La batalla de Ayacucho, librada el 9 de diciembre de 1824, resultó en una derrota aplastante para los realistas. La Serna fue hecho prisionero y, como consecuencia de la capitulación de Ayacucho, tuvo que reconocer la independencia del Perú.
Relevancia actual
La Serna, después de su derrota en Ayacucho, fue embarcado en la fragata francesa Ernestina hacia España. Su regreso a la metrópoli estuvo marcado por la indiferencia de la corte de Fernando VII, que lo marginó durante varios años. Sin embargo, en 1831, fue rehabilitado y nombrado capitán general de Granada, pero su vida terminó en Sevilla el 6 de julio de 1832, dejando un legado que permanece en la historia de las luchas por la independencia de América Latina.
Su figura es un claro reflejo de las tensiones entre los ideales del absolutismo y los movimientos de independencia que dominaron la primera mitad del siglo XIX en América. La Serna fue un virrey que intentó mantener el dominio español en el Perú, pero sus esfuerzos se vieron frustrados por la creciente ola de movimientos patriotas y el avance de las ideas liberales. Su carrera y sus decisiones políticas siguen siendo objeto de análisis, especialmente por el rol fundamental que jugó en los últimos años del dominio español en Sudamérica.
Bibliografía
MILLA BATRES, Carlos (ed.). Compendio Histórico del Perú. La Independencia y la República (siglo XIX). (Lima: 1993).
TAURO, Alberto (ed.). Enciclopedia ilustrada del Perú. (Lima: 1987).
MCN Biografías, 2025. "Serna y Martínez de Hinojosa, José de la (1770-1832): Un virrey entre la independencia y el absolutismo". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/serna-e-hinojosa-jose-de-la [consulta: 19 de octubre de 2025].