Sallé. Marie (1707-1756).
Bailarina y coreógrafa francesa, nacida en 1707 y muerta en París el 27 de julio de 1756.
Descendiente de una familia de actores y bailarines, durante su niñez, Sallé recorrió Francia e Inglaterra con sus padres. Su debut tuvo lugar en 1716, en el Lincoln’s Inn Fields Theatre de Londres. Por fin se instaló en París, donde fue alumna de Françoise Prévost, Claude Balon y Michel Blondy; en esta ciudad hizo su primera aparición pública en l’Académie Royale de Musique en 1727 con Les Amours des Dieux. Sus posteriores apariciones en ballets tales como Bellérophon (1728), Les Amours del Déesses (1729) y Pastorale Héroïque (1730), la consagraron como una gran bailarina, sucesora directa de su maestra, Mademoiselle Prévost. El espaldarazo definitivo vino cuando, en 1729, bailó junto a Antoine Laval el paso a dos Les Caractères de la Danse, desprovistos de las tradicionales máscaras que cubrían el rostro de los bailarines, algo totalmente inusual para aquella época. Regresó a Londres en 1733, para poner en escena uno de sus más revolucionarios ballets, Pygmalion (1734), en el que aparecía con una túnica de muselina al estilo griego, en una danza llena de expresión y mímica, anticipo de los ballets d’action de Jean-Georges Noverre.
Entre sus amigos estuvieron Voltaire y Haendel, quien le dedicó sus óperas Oreste (1734), Ariodante (1735) y Alcina (1735). Volvió a París en 1735; ese mismo año coreografió junto a Michel Blondy el ballet Les Indes Galantes, con música de Rameau, además de lo cual estrenó Scanderberg con notable éxito, ballet al que siguieron Les Voyages de l’Amour (1736), Les Romans (1736), Les Génies (1736), Le Triomphe de l’Harmonie (1737), Castor et Pollux (1737), Les Caractères de l’Amour (1738), Le Ballet de la Paix (1738), Zaïde, Reine de Grenade (1739) y Dardanus (1739). Se retiró en 1740, si bien apareció todavía en alguna ocasión en los ballets de la corte de Versalles (1747) y Fontainebleau (1752).
C. Paris / J. Bayo