Williams, Tony (1945-1997).
Músico estadounidense, batería y compositor, nacido en Chicago el 12 de diciembre de 1945 y fallecido en San Francisco el 22 de febrero de 1997, que formó parte del legendario quinteto de Miles Davis entre los años 1963 y 1969. Considerado uno de los grandes genios de la batería moderna de jazz, Williams obtuvo un Grammy en 1994. Fue un músico, esencialmente, técnico, innovador y creativo
De muy niño, su familia se traslada a Boston. Su periplo musical comenzó a los 8 años, cuando se interesa por lo tambores de la banda en la que su padre tocaba el saxo. Hacia 1949 dio clases con el famoso batería Alan Dawson, y comenzó muy pronto a tocar en locales, gracias a la ayuda que le prestó el saxofonista Sam Rivers. Su precocidad llamó la atención rápidamente en los circuitos de Boston, donde tocó fundamentalmente en jam sessions con grupos locales. Su gran oportunidad le llegó cuando el famoso saxofonista Jackie McLean -quien había abandonado a los Messengers de Blakey hace poco- le reclutó para tocar en el musical The Connection. También grabó Point of Departure, con Andrew Hills; y One Step Beyond, con Jackie McCleans.
El verdadero despegue en la carrera musical de Tony Williams llegó cuando Miles Davis también quedó perplejo de su precocidad y le fichó para su legendario quinteto en 1963, cuando Williams tenía tan sólo 17 años. Su debú se produjo con el disco Seven Steps To Heaven, una obra maestra en la que también participaron el saxofonista George Coleman, el pianista Herbie Hancock y el contrabajista Ron Carter. No obstante, el quinteto se dignificó con la incorporación del saxofonista Wayne Shorter y ganó empaque. De esta forma se consolidó como la sección jazzística más longeva e innovadora de los años sesenta. A partir de aquí llegaron obras maestras del genio de Miles, como E.S.P. (1965), Nefertiti (1966), Sorcerer (1967), Miles Smiles (1966), Miles in the Sky (1968), más el directo Miles Davis Highlights From the Plugged Nickel, una obra maestra grabada en 1966, que contenía standars como “So What”, “Stela By Starlight” o “Round About Midnight”, pasados por las originales interpretaciones del quinteto de Miles. Cabe reseñar la estancia de Williams en el prodigioso grupo de Miles como providencial. Su labor -junto al contrabajista Ron Carter- en este grupo fue calificada como “motor”, “ciclón”, “huracán” rítmicos, por la fuerza y dinamismo con que el batería acometía las piezas. Miles afirmó, cuando contrató a Williams, que se trataba de uno de los mejores baterías que ha dado el jazz. Un batería inspirado, polirrítmico y exuberante en su planteamiento escénico. Es por ello que pueden escucharse algunos temas grabados por el quinteto -como “Nefertiti”, “Pinoccio”, “Footprints” o “Price of Darness”- y advertir que estamos ante uno de los intérpretes más volubles, inspirados y portentosos de la historia del jazz. Además, no se limitó a intervenir en el quinteto de Miles únicamente como intérprete, también compuso algunas piezas de los discos antes mencionados, como “Hand Jive”, “Pee Wee” o “Black Comedy”.
Tony Williams permaneció en el grupo hasta su disolución en 1969, cuando el quinteto de Miles viraba hacia una progresiva formación de bandas supletorias formadas por cantidades ingentes de músicos; podían llegar a intervenir tres baterías, cuatro pianistas, dos contrabajistas, etc.). Fueron los discos Filles de Kilimanjaro, Water Babies, Circle In The Round, grabados en 1968; y In a Silent Way, grabado en 1969.
Mientras tocaba con Miles, Tony Williams fue desarrollando una importante carrera en solitario y de sideman. En 1965 debutó como líder de los grupos de jazz de vanguardia Spring y Lifetime con la grabación de sendos discos. No obstante, pronto orientó su producción hacia el jazz eléctrico, tan en boga a finales de los sesenta gracias a los elepés del maestro Miles. Spring es un disco magnífico en el que colaboraron amigos suyos, como Wayne Shorter, Herbie Hancock o Gary Peacock, que venía de tocar con Bill Evans.
Sin embargo, su carrera como sideman adquirió mayor proyección, si cabe, que como solista. En 1964 grabó un disco mítico, Out To Lunch, con Eric Dolphy , una de las estrellas del free jazz. Aquí se le escucha tocar a sus anchas, con mayor libertad que cuando formaba parte del quinteto de Miles Davis, y además junto a músicos de la talla de Freddie Hubbard, Bobby Hutcherson o Richard Davis. Out To Lunch fue uno de los discos clave para la evolución del jazz a principios de los sesenta. Cómo no, allí se encontraba Freddie Hubbard, pero también Toni Williams.
Asimismo, en 1964, el batería de Chicago inició su colaboración con los discos en solitario del pianista Herbie Hancock, el otro joven genio del quinteto de Miles. Grabó en junio Empyrean Islas, un disco delicioso que contenía verdaderos himnos de la época, como “One Finger Snap” o “Cantaloupe Island”. También participó en la banda de Hancock en el vinilo Maiden Voyage, si cabe, más exitoso que el anterior y con una formación similar al quinteto de Miles del disco Seven Steps to Heaven (con George Coleman, H. Hancock, Ron Carter) pero con Freddie Hubbard en vez de Miles. También participó en sendos discos de Wayne Shorter (The Soothsayer,1964) y de Grachan Moncur (Some Other Stuff,1964).
Por otro lado, su gran proyecto se llamaba Lifetime, y en él irá a depositar todas su energías, aunque todo hay que decirlo, sin demasiada fortuna. El trío Lifetime estaba formado por el guitarrista John McLaughlin, uno de los músicos más innovadores del momento, y el organista Larry Young. Juntos grabaron Emergency (1969) y Turn It Over (1970), en el que también participó el bajista eléctrico Jack Bruce, por entonces en la línea jazz-rock. Nacía pues Lifetime con la pretensión de unirse a los mejores grupos de jazz-rock que hacia los años setenta se multiplicaron en la geografía musical: Return to Forever, Mahavishnu Orchestra, The Headhunters o Weather Report. El estilo de Lifetime variaba entre el jazz-rock más disciplinado y ecléctico y el rock básico de Cream o Jimi Hendrix Experience (véase Jimi Hendrix), cuyas formaciones eran también tríos. Más tarde, hacia 1975, la nueva banda se llamó The New Tony Williams Lifetime, sumiendo al grupo en una nueva “vuelta de tuerca” hacia la modernidad que pretendía. Toni Williams grabó entonces algunos vinilos para Columbia, el sello en aquel momento de Miles Davis. Además, en este año, 1975, Tony Williams colaboraba en el primer disco en solitario de Stanley Clarke, cuyo título era Stanley Clarke, un magnífico álbum en el que también participaron Bill Connors y Jam Hammer.
En verano de 1976, Herbie Hancock formó V.S.O.P., intentando rememorar el antiguo quinteto de Miles Davis y reelaborando una fórmula acústica de grupo, ya algo olvidada tras las experiencias eléctricas por las que pasaron todos estos músicos siguiendo la moda de Miles. Para ello contó con la presencia de Tony Williams, Wayne Shorter y Ron Carter, más el concurso de Freddie Hubbard. El grupo se presentó en el Festival de Newport, y el éxito fue inmediato. De aquí salió un buen vinilo titulado V.S.O.P., con piezas del propio Hancock (“Maiden Voyage”) o de Wayne Shorter, ya interpretadas por el grupo de Miles (“Nefertiti”). De todas formas, los compromisos individuales de sus miembros hacían inviables posibles colaboraciones durante la temporada, por lo que los cuatro músicos tan sólo se reunían los veranos. El grupo grabó en julio de 1977 los vinilos V.S.O.P: The Quintet, más elaborado que el anterior; y V.S.O.P.: Tempest in the Colisseum, grabado durante una gira por Japón y, desde luego, menos interesante. De nuevo, hacia 1979, la formación volvió a reunirse para realizar una gira por Europa y Japón. Precisamente, en este país grabaron Live Under the Sky, donde llegaron a incluir algunos standars como “Stella by Starlight” o “On Green Dolphin Street”, que indicaba a las claras, que los músicos ya renunciaban al aspecto vanguardista que tanto les preocupó antaño.
A finales de los años setenta, Tony Williams volvió a componer, iniciando así una nueva etapa que lo alejaba momentáneamente de su labor como sideman para, al mismo tiempo, convertirse en director de sus propios proyectos. En 1977 se trasladó a San Francisco y se entregó casi por completo a la composición, de la mano de Robert Greenberg y Robert Stine, ambos de la Universidad de California, en Berkeley. Después grabó con Gil Evans -quien seleccionó su composición “There Comes A Time”-, participó en el primer disco de Wynton Marsalis y, en 1990, escribió una composición clásica para cuarteto de cuerda, piano y batería, que interpretó junto a Herbie Hancock, cuyo título fue “Rituals”. La pieza se estrenó en el Herbst Teatro de San Francisco y fue ejecutada por el cuarteto Kronos Quartet. De toda esta experiencia, también surgió algo importante, como fue su curso impartido en el Mozart Conservatory de Salzburg.
No obstante, en los ochenta formó un quinteto, con el que volvía la vista hacia atrás y regresaba al estilo hard bop. El grupo funcionó al estilo de los Messengers de Blakey y entre sus distintas formaciones pasaron jóvenes promesas como Donald Harrison, Mulgrew Miller o Billy Pierce. Es su etapa con Blue Note, con quienes grabó con magníficos elepés: Foireingn Intrigue (1985), Civilization (1986), Angel Street (1988), Native Heart (1989) y The Story of Neptune (1991), más el directo Tokio Live (1992), donde quedó expresa la fuerza del grupo y la habilidad y modernidad del baterista. La banda más relevante que secundó estos discos fue la formada por Wallace Roney (trompeta), Bill Pierce (saxo tenor), Mulgrew Miller (piano) y Charnett Moffet o Ira Coleman (bajo). De todos ellos, era Wallace Roney uno de los músicos jóvenes que pronto iban a ser llamados por la crítica como «el trompetista más cercano a las maneras de Miles Davis”, y por tanto su heredero natural, quizá junto a otros como Terence Blanchard o Wynton Marsalis, integrantes todos ellos del nuevo jazz conocido como “neobob”.
Al margen de esta experiencia en solitario, Tony Williams prestó sus golpes en algunos buenos discos. Por ejemplo participó en un álbum de amigos, cuya cabeza de serie era el saxo Sadao Watanabe, proyecto en el que también estaban involucrados el pianista Hank Jones, el contrabajista Ron Carter y el propio Williams. Con este grupo, el cuarteto realizó una gira por Europa y Japón en 1978. En este último país, precisamente, grabaron el disco Carnaval, que incluía algunas piezas sorprendentes, como las versiones de Parker, “Confirmation” (absolutamente excelente), y de Luiz Bonfa, “Manha de Carnaval” (tocada doblada con el ritmo, algo que desde entonces se hizo usual en la interpretación de la pieza).
En 1992, se reunieron los antiguos colaboradores del quinteto de Miles, y en tributo al genial trompetista, que había fallecido ese año, iniciaron una gira de conciertos. Para cubrir la plaza de Davis, eligieron al jovencísimo Wallace Roney, uno de lo más talentosos músicos que había dado la escena jazzística y cultivado en los Messengers de Art Blakey. El quinteto publicó un disco que en 1994, se alzaba con un premio Grammy como mejor disco de jazz del año.
Otro disco significativo de su carrera en solitario, a la vez que una digna apuesta, fue Unmasked, el cual significaba una vuelta de tuerca hacia 1993. Su formación quedó en trío, grabando para el sello Ark 21.
Wilderness, de nuevo, implicó un giro en el estilo de este fenomenal baterista. En esta grabación, que a la postre sería su última sesión en estudio que sus oídos escucharon en disco, participaron algunos músicos míticos próximos al estilo y trayectoria de Williams, tales como Herbie Hancock, Pat Metheny, Michael Brecker y Stanley Clarke. El álbum es una mezcla de jazz progresivo y música clásica, estilos que entremezcla con gran maestría. Un CD realizado en estado creativo puro y no suficientemente reconocido por la crítica y público. En la grabación, Williams se hizo acompañar por 30 músicos de orquesta.
Young and Heart (1997) fue el último trabajo grabado en vida por el baterista, aunque fue publicado un año después de su muerte (1998). El 23 de febrero de 1997, Tony Williams moría inesperadamente de un ataque al corazón a la edad de 51 años. Miles solía decir de Williams que un batería como él, sólo surgía una vez cada treinta años. Con su temprana muerte desaparecía una de las voces más versátiles del panorama jazzístico.
Su obra póstuma ha sido servida en dos magníficos recopilatorios: The Best of Tony Williams (en Blue Note) y Tony Williams Lifetime-Spectrum: The Antology (Verve), los cuales magnifican el proyecto que el baterista intentó llevar a cabo desde la ruptura del quinteto de Miles.
Tony Williams, un auténtico músico de jazz a la altura de los mejores, sigue una evolución trazada por sus mayores. Su línea, básicamente, sigue el hilo de las grandes baquetas del jazz: Kenny Clarke, Max Roach, Art Blakey, Philly Joe Jones, Elvin Jones o Jimmy Cobb, y su nombre no desmerece de la mayoría de los anteriores, sino acaso, todo lo contrario. Virtuoso de la batería, Tony Williams se ha hecho un hueco en el mundo del jazz como un músico eminentemente innovador, quizá por estar muy próximo de muy joven a talentos como Miles Davis o Herbie Hancock. Su estilo se acerca, por un lado, a la batería que impuso a principios de los sesenta Elvin Jones, el baterista de Coltrane, cuyas polirritmias desarrollaban un ritmo frenético, cercano al free, pero controlado, en lo que vino a llamarse «libertad controlada». Por otro lado, y precisamente cercano a un free más vivo, Williams toma mucho de los baterías que surgieron del tótem del free, Ornette Coleman, esto es, Billy Higgins, Ed Blackwell y, sobre todo, Charles Moffett. En este sentido, Williams supo liberarse del mecanicismo hard-bop para llevar la batería hasta lugares poco explorados por sus contemporáneos.
El pulso de este baterista es lo más llamativo: golpes de negras marcando lo compases (cuatro por compás) y no dos, como la mayoría. Esto revolucionó el ritmo en las canciones, en el sentido que lo hace también tanto Elvin Jones como Jack DeJohnette, pero no se pierde en la vaguedad abstracta de los baterías free. En definitiva, pulso y corazón, son los dos atributos más significativos de este baterista fallecido a los 50 años, cuando, tal vez, aún le quedaba mucho por investigar en la batería de jazz.
La escuela de Tony Williams ha podido seguirse en muchos y variados bateristas en los sesenta y setenta. Desde la batería avanzada y técnica, casi free, de Jack DeJohnette, a la batería precisa, casi rock, de Steve Gadd. En ambos casos tenemos una evolución clara de los patrones rítmicos desarrollados por Tony Williams desde que integró el quinteto de Miles a principios de los sesenta.
Discografía
Colaboraciones:
Out To Lunch (con Eric Dolphy), Blue Note, 1964.Point of Departure (con Andrew Hill), Blue Note, 1964.Some Other Stuff (con Grachan Moncur III), Blue Note, 1964.Empyrean Isles (con Herbie Hancock), Blue Note, 1964.The Soothsayer (con Wayne Shorter), Blue Note, 1965.Maiden Voyage (con Herbie Hancock), Blue Note , 1965.Stanley Clarke (con Stanley Clarke), Atlantic, 1975.V.S.O.P. (con H. Hancock), Columbia, 1977.V.S.O.P.: The Quintet (con H. Hancock), Columbia, 1977.Wynton Marsalis (con Wynton Marsalis), Columbia, 1984.Carnaval (con Sadao Watanabe), Hispavox, 1983.Sound-System ( con H. Hancock), Columbia, 1984.Dianne Reeves (con Diane Reeves), Blue Note, 1987.
Con Miles Davis:E.S.P., Columbia, 1965.Miles Smiles, Columbia, 1966.Sorcerer, Columbia, 1967.Nefertiti, Columbia, 1967.Miles in the Sky, Columbia, 1968.Filles de Kilimanjaro, Columbia, 1969.In a Silent Way, Columbia, 1969.Live Evil, Columbia, 1971.Bitches Brew, Columbia, 1972.Water Babies, Columbia, 1977.Circle in the Round, Columbia, 1980.Big Fun, Columbia, 1980.Directions, Columbia, 1981.Cookin’ at the Plugged Nickel, Columbia Jazz Masterpieces, 1987.Live at the Plugged Nickel, Columbia, 1982.The Columbia Years, 1955-1985, Columbia, 198The Complete Plugged Nickel Sessions, Mosaic, 199?The Complete Studio Recordings of the Miles Davis Quintet 1965-junio 1968, Mosaic, 1998.The Complete Bitches Brew Sessions, Mosaic, 1999.
En solitario:Live, Blue Note, 1964.Lifetime, Blue Note, 1964.Spring, Blue Note, 1965.Emergency!, Blue Note, 1969.Spectrum: The Antology, Blue Note, 1969.Ego, Blue Note, 1970.Turn It Over, Columbia, 1970.Once in a Lifetime, Columbia, 1972.The Old Bum’s Rush, Columbia, 1972.Believe It, Columbia, 1975.Lifetime: The Collection, Columbia, 1975.Million Dollar Legs, Columbia, 1976.Joy of Flying, Blue Note, 1978.Foreign Intrigue, Blue Note, 1985.Civilization, Blue Note, 1986.Third Palne, Blue Note, 1987.Angel Street, Blue Note, 1988.Native Heart, Blue Note, 1989.The Story of Neptune, Blue Note, 1991.Tokyo Live, Blue Note, 1992.Unmasked, Ark 21, 1993.Wilderness, Ark 21, 1996.Young at Heart, Blue Note, 1998.Ultimate Tony Williams, Blue Note, 1999.The Best of Tony Williams, Blue Note, 2000.Tony Williams Lifetime-Spectrum: The Anthology, Verve, 2001.
Ricardo P. Virtanen