Johan Willem, barón de Ripperdá (1680-1737). El diplomático neerlandés que ascendió al poder en la corte española

Johan Willem, barón de Ripperdá, fue una figura tan controvertida como fascinante en el escenario político europeo del siglo XVIII. Su vida estuvo marcada por las ambiciones personales, los cambios de lealtades religiosas y políticas, y una inusual capacidad para insertarse en las intrigas de las grandes cortes europeas. Nacido en los Países Bajos, este noble neerlandés alcanzó las más altas esferas del poder en la monarquía española y dejó una huella indeleble en la historia diplomática del periodo.

Orígenes y contexto histórico

Johan Willem, barón de Ripperdá, nació en Oldehove, Groninga, en 1680, en el seno de una familia de tradición católica que, como muchos otros en la Europa del norte protestante, se convirtió al calvinismo para adaptarse a las exigencias sociales y profesionales del momento. Este tipo de conversión era común en una época en la que la religión no solo constituía una cuestión espiritual, sino también una herramienta de supervivencia política.

La Europa del siglo XVIII vivía un complejo entramado de alianzas, guerras sucesorias y rivalidades dinásticas, en especial entre las casas de Borbón y Habsburgo. El ascenso de Felipe V al trono español, tras la Guerra de Sucesión, marcó el inicio de una nueva etapa para el imperio español, cuya política exterior necesitaba un rediseño estratégico. Este escenario fue el campo de maniobra perfecto para figuras ambiciosas como Ripperdá.

Logros y contribuciones

La carrera política de Ripperdá comenzó en el ámbito diplomático. En 1715 fue enviado a Madrid como embajador, puesto desde el cual inició una sorprendente evolución política y personal. Solo tres años después, en 1718, entró al servicio de Felipe V, monarca al que ofreció su lealtad tras reconvertirse al catolicismo, en un giro que evidenciaba su capacidad para adaptarse a los contextos cambiantes.

Durante este periodo, trabajó bajo las órdenes de Alberoni, poderoso ministro de origen italiano que buscaba modernizar España mediante una serie de reformas industriales y administrativas. A Ripperdá se le encargó la dirección de la manufactura de tejidos de Guadalajara, una institución clave en la economía del país. Tras la caída de Alberoni en 1720, fue nombrado superintendente de fábricas, consolidando su influencia en la gestión económica del reino.

Sin embargo, el mayor hito diplomático de su carrera fue su papel como embajador secreto ante el Imperio en 1724, misión en la que negoció los Tratados de Viena de 1725. Estos tratados representaron un cambio radical en la política exterior española, ya que sellaron una sorprendente alianza entre Felipe V y su hasta entonces enemigo histórico, el emperador Carlos VI. Este éxito le valió un título nobiliario y su regreso triunfal a Madrid, donde fue nombrado Secretario de Estado y Despacho.

En ese cargo, Ripperdá concentró un poder sin precedentes, llegando a controlar simultáneamente las áreas de Política Exterior, Hacienda, Guerra y Marina. Intentó impulsar reformas ambiciosas y recuperar parte del prestigio perdido de la monarquía española, aunque su falta de experiencia y el rechazo de las élites acabaron minando su posición.

Momentos clave

A lo largo de su vida, Johan Willem de Ripperdá protagonizó varios episodios decisivos que marcaron su trayectoria:

  • 1715: Nombramiento como embajador en Madrid.

  • 1718: Entrada al servicio de Felipe V tras convertirse al catolicismo.

  • 1720: Asume la superintendencia de fábricas tras la caída de Alberoni.

  • 1724: Es designado embajador secreto ante el Imperio.

  • 1725: Negocia y firma los Tratados de Viena con Carlos VI.

  • 1726: Es exonerado de todos sus cargos en medio de escándalos y críticas.

  • 1726: Se refugia en la embajada británica y es arrestado por la fuerza.

  • 1728: Escapa a Portugal y luego se exilia en Gran Bretaña.

  • 1731: Se traslada a Marruecos y entra al servicio del sultán.

  • 1737: Fallece en Tetuán en condiciones de extrema pobreza.

Estos eventos reflejan el carácter oscilante de una carrera que alternó entre el éxito rotundo y el fracaso estrepitoso, entre el lujo de las cortes y la miseria final en tierras africanas.

Relevancia actual

La figura de Johan Willem, barón de Ripperdá, continúa siendo objeto de interés para los historiadores debido a su singular trayectoria. Representa el ejemplo paradigmático del aventurero ilustrado, capaz de navegar entre distintas religiones, lenguas, culturas y estructuras políticas para alcanzar el poder. Su historia encarna los dilemas de una Europa en transición, en la que los intereses personales y nacionales se entrelazaban de forma inextricable.

En el ámbito diplomático, sus acciones pusieron de manifiesto la fragilidad de las alianzas tradicionales y la necesidad de replantear las estrategias de poder. La firma de los Tratados de Viena de 1725 simboliza un momento de ruptura y realineamiento político que tendría consecuencias en toda Europa, especialmente en la evolución de las relaciones entre las casas de Borbón y Habsburgo.

Su caída en desgracia también ofrece lecciones sobre los límites del oportunismo político. Ripperdá, al acumular un poder excesivo en un corto período de tiempo, generó enemistades irreconciliables en la corte española. Su paso de ministro todopoderoso a prisionero en el alcázar de Segovia, y posteriormente a refugiado errante, muestra la volatilidad del poder en una época de cambios acelerados.

Su final en Marruecos, al servicio del sultán y sumido en la pobreza, es uno de los desenlaces más trágicos en la historia de los cortesanos europeos. Esta etapa africana añade un componente exótico y aventurero a su vida, convirtiéndolo en una figura que traspasa las fronteras nacionales y que prefigura el cosmopolitismo del siglo XVIII.

Ripperdá fue mucho más que un simple diplomático o un intrigante cortesano. Fue un personaje bisagra entre mundos: entre el protestantismo y el catolicismo, entre los Países Bajos y España, entre Europa y África. Su historia es testimonio de cómo, incluso en un entorno marcado por la rigidez de las jerarquías, era posible reinventarse —aunque con un alto coste personal—.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Johan Willem, barón de Ripperdá (1680-1737). El diplomático neerlandés que ascendió al poder en la corte española". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/ripperda-johan-willem-baron-de [consulta: 28 de septiembre de 2025].