Catherwood, Frederick (1799-1854).
Dibujante, arquitecto y arqueólogo británico, nacido en Londres, Inglaterra, en 1799 y fallecido el 20 de septiembre de 1854. Vino al mundo en el seno de una familia acomodada que pudo costearle una excelente formación académica. Estudió arquitectura y pintura en la Royal Academy, así como arquitectura y escultura clásicas en Italia, Sicilia y Grecia, de forma que tuvo ocasión de visitar las ruinas de Taormina, Mesina, Siracusa, Atenas, etc. En 1815, cuando contaba dieciséis años, obtuvo su certificado de «perfecto gramático, buen orador y poeta, bien instruido en latín, griego y hebreo». Después de terminar sus estudios viajó por Oriente entregado a lo que era su verdadera vocación artística, y así pudo realizar dibujos a escala de numerosas antigüedades en Egipto, Arabia y Tierra Santa. En 1823 fue contratado como asesor para la restauración de las mezquitas de El Cairo, y más tarde, a finales de los años treinta, trabajaba otra vez como arquitecto en un despacho en Estados Unidos.
Fue por aquel entonces, en el momento en el que Catherwood se hallaba en Nueva York montando una exposición sobre sus primeras obras, cuando conoció a John L. Stephens, quien en 1839 le propuso un viaje a la zona de Yucatán y Centroamérica para explorar los vestigios arqueológicos de antiguas civilizaciones que habían estado asentadas por aquella zona. Stephens era ya conocido por sus libros de viajes, pero era la primera vez que se decidía a constatar por sí mismo el creciente número de informes existentes sobre las civilizaciones perdidas de las selvas yucatecas. El proyecto implicaba que, mientras Stephens escribía acerca de las ciudades antiguas que fueran encontrando, Catherwood las dibujaría. Éste último era ya entonces un dibujante maduro y consumado, que plasmaba en sus obras monumentos e inscripciones con gran fidelidad y captaba hasta los más pequeños detalles. De esta forma, ambos personajes formaron un equipo de cuyo trabajo resultó en 1841 un primer libro titulado Incidentes del viaje por Centroamérica, Chiapas y Yucatán, que se publicó en dos volúmenes. En él se recogían datos de los yacimientos arqueológicos de Copán (que Stephens compró por 50 dólares nada más llegar a ese núcleo), Quiriguá, Palenque y Uxmal. Durante su estancia en estos dos últimos lugares, Catherwood contrajo el paludismo, y en Uxmal concretamente sufrió un colapso que les hizo regresar a Nueva York antes de lo previsto. No obstante, ambos se embarcaron en un nuevo viaje en 1842, que les llevó a trabajar en Chichén Itzá, Cozumel, Tulum, Izamal y Aké. Después de siete meses de trabajo dibujando los monumentos de la cultura maya en las condiciones más adversas, Catherwood volvió a enfermar gravemente, y ambos exploradores tuvieron que volver a Nueva York, donde publicaron en 1843 el libro Incidentes del viaje por Yucatán, que contenía un total de 85 láminas diseñadas por Catherwood y que se convirtió en un auténtico best seller de su época.
El análisis de Catehrwood acerca de la técnica estructural de la arquitectura maya es valioso; estimó que el muralismo maya había de considerarse superior al romano de Pompeya y Herculano. Su precisión en el dibujo es tal que, en algunos casos, ha sido posible descifrar la fecha de una estela únicamente en base a los dibujos de jeroglíficos por él realizados.
Catherwood trabajó como ingeniero civil en los últimos años de su vida. Falleció víctima de un naufragio cerca de Terranova el 20 de septiembre de 1854.