Carrera, Rafael (1814-1865).
General y político guatemalteco nacido en Ciudad de Guatemala el 24 de octubre de 1814 y muerto el 14 de abril de 1865. Fue jefe de Estado de Guatemala entre los años 1844-1848 y 1851-1865.
Nacido en una humilde familia, José Rafael Carrera ingresó en el ejército federal de Centroamérica a la edad de 20 años, y ascendió rápidamente de rango durante la guerra civil de 1826-1829. El ejército, dominado por la élite conservadora de Guatemala, ejercía en sus militares una doctrina ideológica conservadora.
Después de que Francisco Morazán derrotara a este ejército en 1829, Carrera dejó la carrera militar durante unos años, y se estableció en Mataquescuintla, donde trabajó como porquero. El padre Francisco Aqueche influiría en él, y le ayudó a contraer matrimonio con Petrona García, la hija de un hacendado local.
Carrera emergió como un líder natural de los campesinos y terratenientes del este de Guatemala, en contra de las reformas liberales del gobernador de Guatemala, el doctor Mariano Gálvez. La población rural, incitada por el clero, se oponía al anticlericalismo del gobierno, las tasas, las reformas judiciales y las políticas sobre la tierra, el trabajo y la inmigración, las cuales favorecían a los extranjeros.
Con estas quejas, el gobierno de Gálvez tuvo que esforzarse en contener la epidemia de cólera que se declaró en 1837 y que terminó en sublevación sobre todo en el este de Guatemala. A pesar de que Carrera, que había aceptado un cargo como jefe del gobierno en las patrullas de cuarentena, no participó en un principio en la revuelta de 1834, los residentes locales consiguieron convencerle para que lo hiciera. En Santa Rosa, el 9 de junio de 1837, condujo a una banda de harapientos insurgentes a una sorprendente victoria, que hizo huir a las tropas del gobierno en huida hacia la capital.
Ayudado por las serias divisiones existentes entre Gálvez y José Francisco Barrundia, el ejército de campesinos de Carrera llegó a Ciudad de Guatemala el 1 de febrero de 1938 para acabar con el gobierno de Gálvez. Temporalmente se instaló en el gobierno el teniente Pedro Valenzuela, el cual convenció a Carrera para que dejara la capital a cambio de promesas de reformas y le asignó el mando militar del distrito de Mita.
De todas formas, la élite conservadora resurgió con fuerza en la capital, y después de que las medidas del gobierno de Valenzuela fallaran, de nuevo el país se sumió en la guerra en marzo de 1838. El presidente Morazán condujo las tropas federales desde El Salvador para la lucha, pero el 13 de abril de 1839, Carrera una vez más llegó a la capital, esta vez implantó un gobierno conservador con Mariano Rivera Paz.
En marzo de 1840 derrotó a Morazán en Ciudad de Guatemala y terminó definitivamente con el gobierno nacional de Centroamérica. Desde entonces hasta su muerte, salvo el período entre 1848 y 1849, Carrera fue el general en jefe de Guatemala y consolidó su poder en este ejército a principio de los años 40, especialmente gracias al Convenio de Guadalupe de 11 de marzo de 1844.
En diciembre de 1844 Carrera asumió la presidencia de Guatemala. Su política era conservadora, pero durante este período tuvo en el gobierno a algunos políticos moderados liberales, a pesar de la presión que ejercían las ideas conservadoras del clero y la élite económica de la ciudad. El 21 de marzo de 1847 Carrera completó el proceso de la secesión de Guatemala de la Federación Centroamericana, y estableció la República de Guatemala.
La oposición liberal, combinada con la continua actividad rebelde del este de Guatemala, llevó a Carrera al exilio a México en agosto de 1848. Este nuevo gobierno liberal no pudo conseguir sus propósitos de resolver los problemas del país, y Carrera volvió a Guatemala en marzo de 1849, como cabeza visible de un ejército compuesto por numerosos indígenas. Tomó Quetzaltenango, y firmó un acuerdo en junio en el cual se le hacía teniente general del ejército de Guatemala, hasta que en agosto recobró nuevamente la comandancia general de este ejército. Carrera consolidó este ejército al llevar a cabo continuas campañas contra los gobiernos liberales que tenían los países que formaban la Federación Centroamericana, El Salvador, Honduras y Nicaragua, y aseguró con estas campañas el dominio de los conservadores en Guatemala durante muchos años más.
Después de 1850, Carrera se alió con la élite conservadora y eclesiástica de la Ciudad de Guatemala. Su gobierno restauró las relaciones con España y firmó un acuerdo con el Vaticano, que garantizaba una mayor participación del clero en el gobierno. A pesar de que Carrera fue a menudo descrito como reaccionario por sus oponentes, Guatemala tuvo un considerable crecimiento económico durante los siguientes veinte años. Carrera volvió a ser de nuevo nombrado presidente de Guatemala el 6 de noviembre de 1851, y su cargo pasó a ser vitalicio el 21 de octubre de 1854.
Considerado el más poderoso caudillo de América Central en el siglo XIX, Carrera afectó al desarrollo de los estados vecinos, con frecuentes intervenciones para asegurar el papel conservador en el Salvador y en Honduras. Cuando el norteamericano William Walker, bajo contrato de los liberales, invadió Nicaragua con un pequeño ejército en 1855 y se nombró gobernante dictatorial del país, Carrera ayudó a la Federación Centroamericana a echarle del poder en 1857.
Al fallecer en 1865, había conseguido estabilidad y crecimiento económico para Guatemala, pero había establecido también una bochornosa política dictatorial que reservaba la mayoría de los beneficios a la pequeña élite de Ciudad de Guatemala. Sin embargo, también actuó positivamente con el colectivo indígena del país, por el incremento de las tierras de trabajo para este colectivo, además de sus intentos de situar indígenas y mestizos en posiciones políticas y militares. Quizás su mayor legado haya sido el establecimiento del ejército como institución política dominante en Guatemala.
SCG