Mateo García Pumacahua (1740–1815): Líder Indígena que Desafió la Autoridad Colonial

Mateo García Pumacahua (1740–1815): Líder Indígena que Desafió la Autoridad Colonial

Introducción a la vida de Mateo García Pumacahua

Mateo García Pumacahua, nacido en 1740 en Chinchero, en la región de Cuzco, fue uno de los principales caudillos indígenas durante las primeras etapas de los movimientos insurgentes en el Perú colonial. A lo largo de su vida, se destacó no solo por su liderazgo en la defensa de los intereses de su comunidad, sino también por su rol en la Revolución Cuzqueña de 1814, que marcó un hito importante en la historia de la independencia del Perú. Su vida y legado revelan la complejidad de la lucha por la autonomía y el reconocimiento de los pueblos indígenas en un contexto dominado por las fuerzas coloniales españolas.

Orígenes y primeros años

Familia y primeros años en Chinchero

Mateo García Pumacahua nació el 21 de septiembre de 1740, hijo de Francisco Pumacahua y Agustina Chihuantito. Su familia pertenecía a la élite indígena de la región del Cuzco, una zona de gran importancia política y cultural en el virreinato del Perú. Su padre, Francisco, fue un cacique de la región de Chinchero, lo que permitió a Mateo acceder a una educación y a un estatus que pocos indígenas de su tiempo pudieron alcanzar.

Chinchero, conocida por su riqueza cultural e histórica, se encontraba en una región estratégica en los Andes, lo que fortaleció el vínculo de Mateo con las comunidades indígenas cercanas. Desde temprana edad, Pumacahua fue testigo de las tensiones entre las autoridades coloniales y los pueblos indígenas, lo que influiría profundamente en su futura carrera política y militar.

Su ascenso al liderazgo

La muerte de su padre y la herencia del cacicazgo

En octubre de 1770, tras la muerte de su padre, Mateo García Pumacahua asumió el liderazgo de Chinchero y las comunidades circundantes, que incluían Maras, Guayllabamba, Umasbamba y Sequecancha. A partir de ese momento, Pumacahua no solo heredó un cacicazgo, sino también una responsabilidad significativa, ya que su figura debía unir a las comunidades indígenas que se encontraban en constante lucha por su autonomía frente a las imposiciones coloniales.

Además de su liderazgo como cacique, Pumacahua fue nombrado capitán de la Compañía de Indios Nobles de Chinchero, una unidad militar que tenía como objetivo defender las autoridades españolas de posibles rebeliones indígenas, pero también mantener el orden dentro de las propias comunidades indígenas.

Primeros logros y su vinculación con la corona española

En este contexto, la figura de Pumacahua comenzó a consolidarse como un intermediario entre los intereses de los colonos españoles y los de los indígenas. Aunque en un principio se alineó con los realistas, defendiendo la causa de la corona, las circunstancias políticas cambiarían radicalmente durante los años siguientes.

Participación en la defensa de la causa realista

Alianzas con otros caciques y defensa de Cuzco

En noviembre de 1780, cuando estalló la rebelión de Tupac Amaru II en el Cuzco, Pumacahua se posicionó como defensor de la causa realista. A pesar de las tensiones entre los pueblos indígenas y las autoridades coloniales, Pumacahua decidió aliarse con los colonos españoles, lo que implicaba movilizar a su comunidad y formar un ejército indígena que combatiera junto a las fuerzas realistas. Esta decisión lo llevó a participar activamente en la lucha contra los rebeldes de Tupac Amaru II, quien había iniciado una insurrección masiva contra la explotación colonial.

Junto con otros caciques, Pumacahua participó en la defensa de la ciudad del Cuzco, que fue sitiada por Tupac Amaru desde el 28 de diciembre de 1780. Además, se encargó de la fundición de baterías y armas, contribuyendo al refuerzo de las tropas realistas en las batallas de Urcos y Yucay. Su participación fue clave en la estrategia que permitió a los realistas mantener el control de Cuzco durante esos meses de conflicto.

Reconocimiento y ascensos militares

El reconocimiento de sus méritos

Tras la derrota de Tupac Amaru II y la posterior pacificación de la región, el 23 de agosto de 1783, el virrey Agustín de Jáuregui le concedió a Pumacahua el grado de coronel de milicias, en reconocimiento a sus valiosas contribuciones a la causa realista. Este ascenso le otorgó un mayor poder e influencia, lo que lo consolidó como uno de los principales líderes indígenas del sur del Perú.

Este ascenso fue un reflejo del respeto que le otorgaban tanto los colonos españoles como otros líderes indígenas, pues Pumacahua sabía cómo moverse entre ambos mundos, a menudo favoreciendo la estabilidad de la región bajo el control de la corona.

La pacificación de Puno y la expansión de su influencia

El éxito de Pumacahua en las batallas y la pacificación de la provincia de Puno consolidó aún más su poder. En 1794, fue ascendido a coronel de infantería, y en 1802, a alférez real del Cuzco, cargo que lo mantenía como una pieza clave en el esquema militar del virreinato.

Sin embargo, la influencia de Pumacahua no solo se limitaba al ámbito militar. A medida que el Cuzco experimentaba tensiones políticas entre los realistas y los movimientos constitucionalistas, él se fue convirtiendo en una figura política central, que representaba a las comunidades indígenas frente a las autoridades coloniales y las crecientes demandas de los criollos.

El impacto de la Revolución de 1814 en su carrera

El cambio de lealtades y la influencia del constitucionalismo

En la primera década del siglo XIX, los movimientos constitucionalistas en Europa y las noticias sobre las revueltas en América Latina comenzaron a impactar el ámbito político del virreinato del Perú. En 1810, la Constitución de Cádiz, que establecía una serie de reformas liberales para las colonias, fue adoptada en España, lo que generó un debate intenso en los territorios americanos. Pumacahua, inicialmente leal al régimen realista, comenzó a mostrar signos de cambio de postura ante las presiones sociales y políticas que se vivían en Cuzco.

A medida que se profundizaban las tensiones, Pumacahua se vio atrapado entre dos frentes: los criollos que demandaban mayores derechos para las colonias y las autoridades realistas que exigían lealtad absoluta a la corona española. Fue durante este período que su postura frente a la Constitución de Cádiz se volvió ambigua. Aunque inicialmente no juró lealtad a la constitución, la presión creciente por parte de los criollos y otros sectores de la sociedad peruana lo llevó a reconsiderar sus posiciones.

Su relación con la Constitución de Cádiz y las tensiones con el Cabildo

En diciembre de 1812, Pumacahua fue llamado a jurar la Constitución de Cádiz, pero su actitud vacilante frente a este acto provocó un levantamiento de los criollos del Cuzco. El Cabildo constitucional, liderado por criollos que apoyaban la Constitución, presionó al gobernador interino para que finalmente realizara la ceremonia de jura. A pesar de que la ceremonia fue programada para enero de 1813, las corporaciones locales se negaron a asistir como señal de protesta contra la actitud de Pumacahua.

Este conflicto reflejaba la creciente polarización política en Cuzco, donde Pumacahua representaba la fidelidad a la corona, mientras que el Cabildo luchaba por una mayor autonomía bajo el marco de la nueva constitución. A pesar de la tensión, Pumacahua continuó ejerciendo su poder, incluso mientras los sectores liberales cuestionaban su autoridad.

Su rol en la Revolución Cuzqueña de 1814

La formación de un nuevo gobierno rebelde

En agosto de 1814, la situación política en el Cuzco llegó a un punto crítico. Un grupo de insurgentes liderados por José Angulo y apoyados por Pumacahua, se alzaron en rebelión, impulsados por un deseo de obtener la plena implementación de la Constitución de Cádiz y la abolición del tributo indígena. La rebelión no solo fue un enfrentamiento contra las autoridades realistas, sino también una lucha por los derechos de los pueblos indígenas y su participación en el proceso de reforma política que se estaba gestando en España.

Pumacahua, con su influencia sobre las comunidades indígenas, fue fundamental en la organización del levantamiento. La junta rebelde, liderada por él y los hermanos Angulo, tomó el control de Cuzco, instalando un gobierno interino con la promesa de cumplir con las reformas constitucionales. Esta victoria inicial mostró el potencial de la resistencia indígena, que, a pesar de su subordinación a las autoridades coloniales durante décadas, ahora se alzaba para exigir justicia.

Batallas clave y expansión de la rebelión

El levantamiento en Cuzco no solo se limitó a un conflicto urbano. Los rebeldes, bajo la dirección de Pumacahua y Angulo, organizaron varias expediciones militares para afianzar la posición de los insurgentes en otras regiones clave del virreinato. La primera de estas expediciones se dirigió a Huamanga, dirigida por José Gabriel Béjar y Manuel Hurtado de Mendoza. Otra avanzó hacia Puno y La Paz bajo el mando de Ildefonso Muñecas y Manuel Pinelo, mientras que la última, que fue la más crucial, tuvo como objetivo la ciudad de Arequipa.

La batalla de Apacheta, librada el 9 de noviembre de 1814, fue un punto culminante en la lucha. En esta batalla, las tropas de Pumacahua y Angulo derrotaron a las fuerzas realistas comandadas por José Gabriel Moscoso y Francisco Picoaga, lo que permitió la toma de Arequipa. Sin embargo, el avance de las tropas realistas en otras zonas, especialmente en la expedición hacia La Paz, terminó por desequilibrar el frente rebelde. La derrota de las fuerzas insurgentes en la región del Alto Perú, bajo el mando del general español Juan Ramírez, fue un golpe importante para los rebeldes.

La derrota en Umachiri y la huida hacia Sicuani

A medida que la situación se complicaba, Pumacahua y Angulo se vieron forzados a abandonar Arequipa ante la amenaza de las tropas realistas de Ramírez. El 30 de noviembre de 1814, ambos líderes decidieron evacuar la ciudad y retirarse hacia el Cuzco. Sin embargo, la lucha continuó, y el 11 de marzo de 1815 se libró la batalla de Umachiri, en la cual las fuerzas rebeldes fueron derrotadas de manera decisiva.

A pesar de la derrota, Pumacahua logró huir hacia Sicuani, donde intentó reorganizar sus fuerzas para continuar la lucha. Sin embargo, fue capturado poco tiempo después y llevado a juicio. Durante el juicio sumario, Pumacahua declaró haber sido engañado por los hermanos Angulo, quienes le habían hecho creer que el rey Fernando VII había muerto y que la junta insurgente era legítima.

La caída de la rebelión y la captura de Pumacahua

Pumacahua fue decapitado el 17 de marzo de 1815 en Sicuani. Con su muerte, la Revolución Cuzqueña perdió uno de sus más importantes líderes, aunque su figura y su lucha continuaron siendo un símbolo de resistencia para las generaciones futuras. Con la caída de la rebelión en el sur del Perú, el Cuzco y sus alrededores quedaron bajo el control de las fuerzas realistas, lo que marcó el fin de una de las últimas grandes insurgencias contra el dominio español en la región andina.

Reflexión final sobre su legado

La figura de Pumacahua en la historia de Perú

Mateo García Pumacahua dejó un legado significativo en la historia de Perú. Su vida, marcada por su lucha constante por los derechos de su pueblo, su participación en la Revolución Cuzqueña y su habilidad para movilizar a las comunidades indígenas en un contexto de opresión colonial, lo convierten en una de las figuras más complejas de la historia pre-republicana de Perú.

A lo largo de su vida, Pumacahua osciló entre ser un defensor de la autoridad colonial y un líder que desafiaba las estructuras de poder. Su figura ha sido reivindicada por muchos como un símbolo de la lucha indígena por la autonomía y los derechos en el proceso de independencia de América Latina. Aunque su rebelión no logró sus objetivos inmediatos, la memoria de su resistencia sigue viva como un testimonio de la capacidad de los pueblos originarios para movilizarse y exigir cambios frente a las injusticias sociales y políticas del colonialismo.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Mateo García Pumacahua (1740–1815): Líder Indígena que Desafió la Autoridad Colonial". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/pumacahua-mateo-garcia [consulta: 18 de octubre de 2025].