Segall Lasar (1891-1957). El pintor que unió expresionismo y modernismo en Brasil

Segall Lasar (1891-1957), de origen lituano y nacionalizado brasileño, fue un pintor, grabador y escultor que destacó por su estilo personal, que combinaba el futurismo, cubismo y expresionismo, con una marcada influencia de sus orígenes judíos. Nacido el 21 de julio de 1891 en Vilna, capital de Lituania, en una comunidad judía bajo el dominio ruso, Segall se convirtió en una de las figuras más relevantes del modernismo brasileño. A lo largo de su vida, fusionó su arte con los sentimientos de solidaridad hacia el sufrimiento humano, reflejando en sus obras el dolor de la emigración, las guerras y la pobreza.

Orígenes y contexto histórico

Lasar Segall nació en un momento crucial en la historia de Europa. Vilna, su ciudad natal, estaba bajo el dominio del Imperio Ruso, y Segall creció en medio de la agitación y las tensiones sociales propias de este periodo. Desde joven, mostró interés por el arte y fue influenciado por su entorno. A los 15 años, comenzó a recibir lecciones de dibujo del artista Markus Antokolski, quien jugó un papel clave en su desarrollo inicial. Antokolski fue un gran mentor para Segall, impulsándolo a continuar su formación en Alemania, un centro de vanguardia artística en ese entonces.

En 1906, Segall se trasladó a Berlín para estudiar en la Escuela de Bellas Artes de Berlín, donde estuvo entre 1907 y 1910. Durante este tiempo, participó en la Muestra de la Berliner Sezession en 1909, una de las exposiciones más importantes de la época. Fue en Berlín donde las ideas del impresionismo, el futurismo y el cubismo comenzaron a influir profundamente en su obra. Además, Segall tuvo la oportunidad de ser influenciado por el trabajo de artistas como Max Liebermann, quien lo ayudó a afinar su estilo y a consolidar sus influencias vanguardistas.

Logros y contribuciones

Lasar Segall no solo fue un artista comprometido con el modernismo, sino también un exponente de la lucha por dar visibilidad al sufrimiento humano. A lo largo de su carrera, sus obras estuvieron marcadas por su profundo sentido social y político. El arte de Segall no solo reflejaba las tensiones de la época, sino también sus propias vivencias como inmigrante y judío, lo que le permitió conectarse de manera profunda con el sufrimiento humano y plasmarlo en sus pinturas, grabados y esculturas.

Uno de los hitos más significativos de Segall fue su participación en la creación de la Sociedad Pro-Arte Moderna en Brasil. Esta organización se constituyó como un centro de promoción del modernismo brasileño, y Segall jugó un papel esencial como cofundador y animador del movimiento. En 1923, Segall regresó a Brasil, donde comenzó a profundizar en su conexión con el país que le otorgó la nacionalidad en 1927. El contacto con Brasil marcó un punto de inflexión en su obra, ya que sus influencias alemanas se fusionaron con las raíces de su nuevo entorno, produciendo una obra única y vibrante.

Momentos clave

A lo largo de su vida, Segall vivió una serie de eventos cruciales que influyeron en su carrera artística. En 1912, luego de su primer paso por Brasil, regresó a Alemania, donde comenzó la Primera Guerra Mundial. Durante este periodo, fue expulsado de la Academia de Bellas Artes de Dresde y confinado en Meissen. Este acontecimiento marcó un giro en su carrera y lo obligó a reorientarse hacia nuevas formas de expresión.

En 1919, después del final de la guerra, Segall regresó a Dresde y fundó, junto con Otto Dix, el grupo de la «Secesión de Dresde», una agrupación que fue esencial para la consolidación de las vanguardias alemanas. Sin embargo, en la década de 1920, tras haber recorrido diversas ciudades europeas y haber realizado exposiciones individuales y colectivas, Segall decidió asentarse en Brasil definitivamente en 1923. A partir de ahí, su obra se vio marcada por una profunda identificación con Brasil, tanto en el plano artístico como cultural.

El arte de Segall también estuvo marcado por su relación con el sufrimiento humano. Entre sus obras más destacadas, encontramos títulos como Eternos errantes, Visiones de guerra (1940-1943), Mujeres del Mangue, Campo de concentración, Barcos de emigrantes y Los condenados, entre otras. En estas piezas, Segall reflejó la dureza de la vida de los inmigrantes y las víctimas de las guerras, especialmente aquellos que se vieron obligados a emigrar o vivir en condiciones de marginación.

Relevancia actual

La relevancia de Segall Lasar perdura hasta el día de hoy. Su capacidad para capturar la complejidad emocional y social de su tiempo le ha asegurado un lugar destacado en la historia del arte moderno, tanto en Brasil como a nivel internacional. Las obras de Segall continúan siendo objeto de estudio y admiración en el ámbito artístico, y su influencia en el modernismo brasileño sigue siendo indiscutible.

Hoy en día, el legado de Segall está presente en el Museo Segall, ubicado en su antigua casa y taller en São Paulo, Brasil. Este museo alberga una gran cantidad de sus obras, permitiendo a las nuevas generaciones conocer su arte y su historia. La trascendencia de su trabajo también se refleja en su presencia en varias exposiciones internacionales, y su arte sigue siendo una fuente de inspiración para muchos artistas contemporáneos.

Algunas de sus obras más significativas

  • Eternos errantes.

  • Visiones de guerra (1940-1943).

  • Mujeres del Mangue.

  • Campo de concentración.

  • Barcos de emigrantes.

  • Los condenados.

  • Bubu (1921), álbum con 8 litografías.

  • Recordación de Vilna en 1917 (1922).

  • Maasse-Bichl (1922), ilustración con 17 grabados.

  • Bananal (1927).

  • Paisagems de Campos do Jordão.

  • Retratos de Luci.

  • Pogrom.

  • Navío de emigrantes.

  • Arame farpado.

La obra de Segall sigue siendo un fiel testimonio de su profunda preocupación por los problemas sociales de su tiempo y un recordatorio de las tensiones políticas y culturales que marcaron el siglo XX. Su arte, en especial sus grabados y pinturas, sigue siendo considerado un referente clave en la historia del arte modernista, y su influencia sobre el modernismo brasileño es incuestionable.

Además de su obra pictórica, su contribución al arte brasileño a través de su trabajo como escultor sigue siendo reconocida. Aunque comenzó a trabajar en escultura más tarde en su vida, especialmente durante su estancia en París, Segall demostró ser un artista polifacético y comprometido con el arte en todas sus formas.

Su vida y su obra nos recuerdan la importancia del arte como medio para expresar la solidaridad y el compromiso con las realidades sociales, un legado que sigue vivo en sus creaciones y en el impacto que dejó en la historia del arte moderno.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Segall Lasar (1891-1957). El pintor que unió expresionismo y modernismo en Brasil". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/segall-lasar [consulta: 30 de septiembre de 2025].