Inés Pérez de Castro (ca. 1320-1355): La trágica amante que conquistó Portugal

Inés Pérez de Castro fue una
aristócrata española nacida en Galicia hacia 1320, cuya vida estuvo
marcada por una historia de amor prohibido, tragedia y reconocimiento
póstumo. Amante y posteriormente esposa del rey Pedro I de Portugal, su
vida se desarrolló en un contexto de poderosas luchas dinásticas y
turbulentas pasiones. Su trágico final y el posterior reconocimiento
oficial la convierten en uno de los personajes más misteriosos y
fascinantes de la historia medieval ibérica.

Orígenes y contexto histórico

Inés Pérez de Castro pertenecía a
una de las familias más poderosas de Galicia, siendo hija de Pedro
Fernández de Castro y Beatriz, hija del príncipe Alfonso de Portugal.
Nació en un periodo en el que la nobleza europea se encontraba inmersa
en luchas de poder, tanto internas como externas, que definieron el
curso de muchos reinos.

En aquellos tiempos, las mujeres de
la nobleza recibían una educación que no estaba al alcance de la
mayoría. Inés no fue la excepción, siendo instruida por los mejores
maestros de la época. Esta educación avanzada le permitió dominar
varios idiomas, incluyendo el latín, el hebreo, el portugués y el
francés. Su formación, poco común para las mujeres de su tiempo, le
permitió desempeñar un papel destacado en la corte y, más tarde, en la
historia de Portugal.

La figura de Inés Pérez de Castro
es interesante no solo por su valía personal, sino también por el
contexto de su vida, marcado por las tensiones dinásticas en Portugal.
En 1340, se celebró el matrimonio entre su prima, la princesa
Constanza, y el infante don Pedro de Portugal, heredero del trono
portugués. Inés acompañó a su prima en este viaje a Portugal, donde las
bases de su relación con don Pedro I se sentaron.

Logros y contribuciones

Aunque Inés no tuvo un papel
político oficial, su influencia en la corte portuguesa fue innegable.
Su relación con el infante Pedro, que más tarde sería conocido como
Pedro I de Portugal, fue una de las más escandalosas y, al mismo
tiempo, una de las más célebres de la historia portuguesa. Tras la
muerte de Constanza en 1345, Inés y Pedro continuaron su relación, la
cual fue mal vista por la corte portuguesa debido a su carácter ilícito.

A pesar de las adversidades, la
pasión entre Inés y Pedro fue tan fuerte que ambos decidieron casarse
en secreto en 1354, poco antes de la muerte de Inés. De esta unión
nacieron cuatro hijos: Alfonso, Juan, Dionís y Leonor. La llegada de
estos descendientes fue vista con recelo por el rey Alfonso IV, padre
de Pedro I, quien temía que los hijos de Inés pudieran poner en peligro
la sucesión al trono.

El miedo de Alfonso IV se
materializó en un trágico acto: ordenó la muerte de Inés y sus hijos.
Este asesinato, llevado a cabo por los asesinos Álvaro González y Pedro
Coello, tuvo lugar junto a la Fonte das Lágrimas en el palacio real de
Coimbra, en 1355. La muerte de Inés fue un golpe durísimo para Pedro I,
quien no dudó en levantarse contra su propio padre, iniciando una
rebelión que culminó con la ascensión de Pedro al trono portugués en
1357.

Momentos clave

  • 1340:
    El matrimonio de la princesa Constanza con don Pedro de Portugal. Inés
    Pérez de Castro acompaña a su prima en su traslado a Portugal.

  • 1345: Muerte de Constanza, lo que permitió el inicio de la relación ilícita entre Inés y Pedro I.

  • 1354: Casamiento secreto entre Inés y Pedro I de Portugal.

  • 1355:
    El asesinato de Inés Pérez de Castro junto a la Fonte das Lágrimas, en
    el palacio real de Coimbra, por orden del rey Alfonso IV.

  • 1357:
    Pedro I sube al trono portugués tras la muerte de su padre. Inicia una
    rebelión contra su familia y hace castigar severamente a los
    responsables de la muerte de su esposa.

  • 1357:
    Dos años después de su muerte, Inés fue coronada reina póstumamente y
    su cuerpo fue desenterrado, embellecido con ricos ropajes y joyas. La
    nobleza de Portugal la reconoció oficialmente como reina.

Relevancia actual

La figura de Inés Pérez de Castro
sigue siendo relevante en la historia de Portugal, no solo por su
trágica muerte, sino por el simbolismo de su vida y su coronación
póstuma. El asesinato de Inés y las subsecuentes acciones de Pedro I
marcaron un cambio significativo en la política portuguesa,
especialmente en lo que respecta a la dinastía real.

En la actualidad, Inés es
recordada como una figura mítica y trágica de la historia medieval
portuguesa. Su historia ha sido retratada en diversos relatos
literarios, canciones y obras de arte, lo que contribuye a su
permanencia en el imaginario colectivo de Portugal y Galicia.

Su tumba en el monasterio de
Alcobaça es uno de los puntos turísticos más importantes de Portugal,
donde visitantes de todo el mundo rinden homenaje a la que fue coronada
como reina después de su muerte. A través de su tumba, que contiene
representaciones de la vida de Jesús, la Resurrección y el Juicio
Final, se simboliza no solo su rol como esposa de Pedro I, sino también
como un emblema de amor, sacrificio y venganza.

La trágica historia de Inés Pérez
de Castro continúa sirviendo de inspiración para quienes estudian la
historia medieval de la península ibérica, destacándose como un ejemplo
de los intensos conflictos familiares, las pasiones desbordadas y los
sacrificios personales que definieron la política de la época.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Inés Pérez de Castro (ca. 1320-1355): La trágica amante que conquistó Portugal". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/perez-de-castro-ines [consulta: 29 de septiembre de 2025].