Otaño y Eguino, Nemesio (1880-1956). El compositor y musicólogo que renovó la música sagrada en España

Nemesio Otaño y Eguino (1880-1956) se erige como una de las figuras más influyentes en la música religiosa de España durante el siglo XX. Nacido en Azcoitia (Guipúzcoa) el 19 de diciembre de 1880, su legado como compositor y musicólogo ha trascendido generaciones. Fue el artífice de una auténtica reforma en la música sacra, un cambio esencial que dio nuevo aire a la música religiosa en el país. A lo largo de su vida, Otaño se dedicó no solo a la creación de obras musicales, sino también a la enseñanza y la organización de actividades que marcaron la evolución de la música sacra en España. Su influencia, tanto en el ámbito musical como en el educativo, sigue vigente.

Orígenes y contexto histórico

Otaño nació en una época en la que la música religiosa en España era tradicional y se encontraba, en muchos casos, estancada. En su juventud, comenzó a estudiar órgano en su tierra natal, Guipúzcoa. Más tarde, se trasladó a Valladolid, donde perfeccionó sus estudios en contrapunto y composición bajo la tutela de Vicente Goicoechea. Su formación y su inquietud por la renovación de la música sacra se vieron influenciadas por el contexto religioso y social de la época.

En 1896, Otaño ingresó en la Compañía de Jesús, una orden religiosa que jugaría un papel crucial en su vida y en su labor como compositor y pedagogo. Esta etapa en la Compañía de Jesús le permitió acceder a posiciones importantes dentro de la Iglesia, como el puesto de organista de la Basílica de Loyola, una de las más importantes de España. Este ambiente religioso fue clave en su carrera y lo impulsó a centrarse en la música sacra.

Logros y contribuciones

A lo largo de su carrera, Otaño logró convertir su pasión por la música religiosa en una auténtica revolución dentro del panorama musical español. En 1907, organizó en Valladolid el Primer Congreso Nacional de Música Sacra, un evento de gran importancia que marcaría el inicio de una serie de reformas que influyeron profundamente en la música religiosa en España. Además, ese mismo año fundó la revista Música sacra hispana, cuyo objetivo fue promover las reformas propuestas por el papa Pío X en su encíclica Motu Proprio de 1903. Este documento, que abogaba por una mayor pureza y simplicidad en la música religiosa, sirvió como base para el trabajo de Otaño.

En cuanto a su producción musical, Otaño destacó especialmente por sus composiciones religiosas. Obras como el Miserere a cinco voces, el Gran Himno a San Ignacio de Loyola y los Doce cánticos al Sagrado Corazón ocuparon un lugar central en su repertorio. Estas composiciones se distinguieron por su belleza melódica y su profundo sentido religioso, adaptándose perfectamente a las exigencias litúrgicas de la época. Además de estas piezas, Otaño también creó obras de carácter profano, como la Suite vasca, que mostró su capacidad para fusionar lo tradicional y lo moderno, manteniendo siempre un respeto por las raíces populares.

Momentos clave

La vida de Otaño estuvo marcada por una serie de momentos clave que contribuyeron a consolidar su reputación como uno de los compositores y musicólogos más importantes de su tiempo. Uno de los hitos más relevantes fue su nombramiento en 1911 como director del coro de la Universidad Pontificia de Comillas, una de las instituciones religiosas más prestigiosas de España. Bajo su dirección, el coro de Comillas se convirtió en un modelo de funcionamiento y calidad, sirviendo como ejemplo para otras agrupaciones corales religiosas en todo el país.

Otro de los grandes logros de Otaño fue su nombramiento como director del Conservatorio Superior de Música de Madrid en 1939. Este cargo le permitió aplicar sus ideas pedagógicas renovadoras y formar a generaciones de músicos comprometidos con la calidad y la pureza en la interpretación de la música religiosa. A través de su labor en el conservatorio, Otaño dejó una huella indeleble en la educación musical en España.

Relevancia actual

El impacto de Otaño en la música sacra y en la educación musical en España sigue siendo significativo. Su legado ha perdurado gracias a su compromiso con la reforma de la música religiosa y su enfoque innovador en la enseñanza. A pesar de que la música sacra ha evolucionado y cambiado a lo largo de los años, las bases sentadas por Otaño continúan influyendo en la forma en que se aborda la música religiosa en el país.

En la actualidad, las composiciones de Otaño siguen siendo interpretadas por coros y conjuntos musicales, tanto en el ámbito litúrgico como en conciertos. Su enfoque técnico y profundo en la estructura musical sigue siendo un modelo a seguir para los compositores contemporáneos que buscan una aproximación rigurosa a la música sacra. Además, su trabajo como pedagogo ha dejado una profunda impronta en las instituciones educativas dedicadas a la enseñanza de la música, especialmente en las que están enfocadas en la formación de músicos religiosos.

Obras destacadas de Otaño

A lo largo de su carrera, Otaño produjo una vasta cantidad de composiciones. Entre ellas, algunas de las más destacadas son:

  • Miserere a cinco voces

  • Gran Himno a San Ignacio de Loyola

  • Doce cánticos al Sagrado Corazón

  • Suite vasca

Estas obras son solo una pequeña muestra de su extenso catálogo, pero reflejan claramente el compromiso de Otaño con la música sacra y su habilidad para fusionar las tradiciones musicales españolas con las exigencias litúrgicas de su tiempo.

Escritos y publicaciones

Además de su producción compositiva, Otaño también destacó como ensayista y teórico musical. Entre sus escritos más importantes se encuentran:

  • La música religiosa y la legislación eclesiástica (Barcelona, 1912)

  • El canto popular montañés (Santander, 1915)

Estos escritos muestran su profundo interés por la relación entre la música y la liturgia, así como su preocupación por la preservación de las tradiciones musicales populares de España.

El trabajo de Otaño fue fundamental para la renovación de la música religiosa en España, y su influencia sigue siendo muy relevante en la actualidad. Sin lugar a dudas, su figura permanece como una de las más destacadas en la historia de la música sacra del país.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Otaño y Eguino, Nemesio (1880-1956). El compositor y musicólogo que renovó la música sagrada en España". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/otanno-y-eguino-nemesio [consulta: 20 de junio de 2025].