Kubala Steck, Ladislao (1927-2002). El Futbolista Legendario que Unió Tres Selecciones Nacionales

Ladislao Kubala Steck, nacido el 10 de junio de 1927 en Budapest, Hungría, y fallecido el 17 de mayo de 2002 en Barcelona, España, es considerado uno de los futbolistas más emblemáticos de la historia del fútbol mundial. Su carrera deportiva estuvo marcada por una habilidad excepcional, una versatilidad única y un legado imborrable, destacándose por ser el único jugador en la historia que defendió los colores de tres selecciones nacionales: Hungría, Checoslovaquia y España. En este artículo, repasaremos los momentos más relevantes de su vida, sus logros y su impacto en el fútbol, tanto a nivel de club como internacional.

Orígenes y Contexto Histórico

Ladislao Kubala nació en una época turbulenta para Europa, con las secuelas de la Segunda Guerra Mundial marcando la vida de muchas personas. Hijo de un inmigrante húngaro y una madre de origen austriaco, Kubala creció en Budapest, donde su afición por el fútbol lo llevó a comenzar su carrera en la Escuela de la Federación Húngara. Durante su adolescencia, su talento se destacó en los equipos locales, y con solo 17 años, debutó en la Primera División con el Ferencvaros, uno de los clubes más importantes de Hungría. Sin embargo, la situación política y social de la Europa de la posguerra afectó su carrera, llevándolo a vivir situaciones complejas que lo obligaron a emigrar en busca de estabilidad.

En 1944, tras haber debutado con el Ferencvaros, Kubala fue llamado a formar parte de la selección húngara, iniciando así su carrera internacional. A pesar de sus éxitos en su país natal, los años siguientes estuvieron marcados por el exilio. En 1948, tras un periodo de incertidumbre política, Kubala abandonó Hungría y se trasladó a Suiza, donde continuó desarrollando su carrera, a pesar de los numerosos obstáculos impuestos por la situación de apátrida en la que se encontraba.

Logros y Contribuciones

La carrera de Kubala dio un giro decisivo cuando en 1951 llegó a España, donde fichó por el FC Barcelona gracias a la mediación de Samitier. Su llegada a Barcelona marcó el inicio de una etapa dorada tanto para él como para el club catalán. Desde su debut el 29 de abril de 1951 en un partido de Copa contra el Sevilla, Kubala demostró ser una pieza clave en el esquema del equipo, y rápidamente se convirtió en un ídolo de la afición culé.

A lo largo de su carrera en el Barcelona, Kubala disputó más de 300 partidos y anotó cerca de 250 goles. Su palmarés con el club es impresionante, destacándose cuatro títulos de La Liga (1952, 1953, 1959, 1960), dos Copas de Feria (1958, 1960), cinco Copas del Generalísimo (1951, 1952, 1953, 1957, 1959), dos Copas Eva Duarte y una Copa Latina. A pesar de que no logró conquistar la Copa de Europa durante su etapa como jugador, su influencia en el equipo fue trascendental, convirtiéndose en uno de los máximos goleadores de la historia del club.

La Selección Española

Uno de los hitos más notables de su carrera fue su contribución a la selección española. Kubala debutó con la Roja el 5 de julio de 1953 en un partido contra Argentina, y a lo largo de su carrera internacional, jugó 19 partidos con España, anotando 10 goles. Aunque no pudo disputar competiciones mayores con la selección, su aporte fue significativo durante una época en la que el fútbol español aún estaba buscando su identidad.

Entrenador y Director Técnico

Tras su retiro como futbolista en 1961, Kubala continuó vinculado al mundo del fútbol como entrenador. En 1962, se hizo cargo de la dirección técnica del primer equipo del FC Barcelona, y más tarde asumió otros roles en equipos como el Real Murcia, el Español, y en el extranjero, en lugares como Canadá y Arabia Saudí. En 1968, Kubala fue nombrado seleccionador nacional de España, cargo que ocupó hasta 1980. Durante su gestión, España logró una destacada actuación, logrando 31 victorias, 21 empates y 16 derrotas en los 68 partidos que dirigió.

Su experiencia internacional también lo llevó a entrenar la selección paraguaya de fútbol en 1995, aunque esta etapa fue breve debido a su regreso a España. A lo largo de su carrera como técnico, Kubala dejó una marca imborrable por su estilo de juego y su capacidad para liderar equipos con grandes talentos.

Momentos Clave de Su Carrera

  • 1951: Ficha por el FC Barcelona, donde inicia una de las carreras más brillantes de la historia del club.

  • 1953: Debut con la selección española, consolidándose como un jugador clave en la Roja.

  • 1959: Logra su cuarto título de La Liga con el Barcelona.

  • 1961: Se retira del fútbol profesional tras disputar la final de la Copa de Europa contra el Benfica.

  • 1968: Se convierte en seleccionador nacional de España, cargo que ocupa hasta 1980.

  • 1992: Es parte del equipo que logra la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Barcelona, como seleccionador adjunto.

Relevancia Actual

Ladislao Kubala sigue siendo una figura fundamental en la historia del fútbol, especialmente en España. Su legado no solo se refleja en sus logros como jugador y entrenador, sino también en el impacto que tuvo en el FC Barcelona, un club que sigue siendo uno de los más grandes del mundo. La influencia de Kubala trascendió el terreno de juego, ya que su capacidad para integrar jugadores de diferentes orígenes y culturas dentro de un equipo unido sigue siendo un ejemplo para futuras generaciones.

La relación de Kubala con el fútbol español se mantiene viva en el reconocimiento que el deporte le ha brindado a lo largo de los años. En 1993, el fútbol español le rindió homenaje en un partido en el estadio de Montjuic de Barcelona, donde se enfrentaron la selección de Cataluña y un combinado internacional en su honor.

Legado y Distinciones

El legado de Kubala es reconocido no solo en el ámbito deportivo, sino también en el social y cultural. Durante su vida, recibió numerosos premios y distinciones, entre los que destacan la Cruz de Caballero de la Real Orden de Isabel la Católica (1962), la Medalla de Oro de la Ciudad de Barcelona al Mérito Deportivo (1999), y la Gran Cruz de la Real Orden del Mérito Deportivo (2000). A título póstumo, la FIFA le concedió la Orden al Mérito, mientras que el Gobierno español le otorgó la medalla de oro al Mérito en el Trabajo, reconociendo su contribución tanto al fútbol como a la sociedad.

En 1999, la revista World Soccer incluyó a Kubala en su lista de los 100 mejores futbolistas del mundo, un testimonio del impacto que tuvo en el fútbol global. Su nombre sigue siendo sinónimo de excelencia y su legado perdura en la memoria colectiva de los aficionados al fútbol.

Conclusión

Ladislao Kubala fue mucho más que un futbolista excepcional. Su historia es una de superación, pasión y dedicación al deporte que amaba. Desde sus primeros días en Hungría hasta su carrera en el FC Barcelona y su etapa como seleccionador nacional, Kubala dejó una huella profunda en el fútbol. Hoy, su nombre sigue resonando no solo en las páginas de la historia, sino también en los corazones de millones de aficionados, quienes recuerdan a Kubala como una de las grandes leyendas del fútbol mundial.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Kubala Steck, Ladislao (1927-2002). El Futbolista Legendario que Unió Tres Selecciones Nacionales". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/kubala-steck-ladislao [consulta: 28 de septiembre de 2025].