Inocencio XIII, Papa (1655-1724).


Llamado Miguel Ángel Conti, este papa fue el sucesor de Clemente XI, y nació en Roma -en el seno de una familia que ya había dado varios papas a la Iglesia- en 1655 y murió en 1724. Fue elegido en 1721, después de haber sido arzobispo de Tarso, nuncio en Lisboa y obispo de Viterbo. Tomó su nombre en memoria de Inocencio III, que había sido pariente suyo.

Concedió al emperador Carlos VI la investidura del reino de Nápoles. En cambio, protestó, aunque inútilmente, cuando este emperador dio al infante de España Parma y Piacenza, feudos de la Santa Sede desde tiempo inmemorial. Prestó su apoyo a Jacobo III, que había decidido amparar al catolicismo, y también se unió a la causa contra los turcos. Si su ánimo se inclinó contra la Compañía de Jesús, parecer ser que fue afín a los jansenistas. Con todo, hizo que el Santo Oficio condenase la carta de siete obispos franceses en que le pedían la revocación de la Bula Unigenitus.

Murió el 7 de marzo de 1724, al decir de muchos a causa de un envenenemiento. Su sucesor fue Benedicto XIII, Antipapa.