Horthy de Nagybanya, Nicolás (1868-1957): El Regente que Forjó la Historia de Hungría

Nicolás Horthy de Nagybanya, nacido el 18 de junio de 1868 en Kenderes, Hungría, y fallecido el 9 de febrero de 1957 en Estoril, Portugal, es una de las figuras más complejas y controvertidas de la historia húngara. Marino de carrera y político, Horthy desempeñó un papel crucial en la Hungría del siglo XX. Fue regente de Hungría desde 1920 hasta 1944, ejerciendo un liderazgo autoritario que influyó en los destinos del país durante momentos clave, como la desmembración del Imperio Austrohúngaro, la crisis de los años 30 y la Segunda Guerra Mundial. A través de sus decisiones y sus acciones, Horthy dejó una huella profunda en la historia de Europa Central. Este artículo explora su vida, logros, momentos clave y la trascendencia de su figura.
Orígenes y Contexto Histórico
Nicolás Horthy nació en el seno de una familia aristocrática húngara, cuyo linaje se remontaba al siglo XIII. Proveniente de una familia protestante, recibió una educación que lo preparó para ser un terrateniente y líder de la élite húngara. Su formación académica comenzó en el colegio protestante de Debreczin y, a la edad de 14 años, ingresó a la Academia Naval de Fiume. Allí se destacó y, tras graduarse como capitán de corbeta, dominaba seis idiomas, lo que le otorgaba una ventaja significativa en su carrera naval.
Al estallar la Primera Guerra Mundial, Horthy estaba al servicio de la Armada Austrohúngara, donde rápidamente demostró sus habilidades como estratega naval. Fue ascendido a Almirante en 1918 por el emperador Carlos I, quien reconoció su destreza y valentía durante la contienda, particularmente al romper en varias ocasiones el bloqueo aliado del Adriático. Este reconocimiento a su capacidad le abrió las puertas a un futuro político significativo.
Logros y Contribuciones
Jefe de Estado de Hungría
Tras la Primera Guerra Mundial, Horthy se retiró brevemente a su hogar en Kenderes. Sin embargo, los turbulentos eventos de la Revolución Húngara de 1919 lo trajeron de vuelta a la arena política. Tras la caída del régimen comunista de Béla Kun, Horthy lideró un ejército contrarrevolucionario que derrotó a las fuerzas del gobierno comunista y ocupó Budapest en noviembre de 1919. Este golpe de estado lo posicionó como la figura central del gobierno húngaro, y el 1 de marzo de 1920 fue proclamado regente de Hungría.
Como regente, Horthy enfrentó varios desafíos, siendo uno de los más significativos la firma del Tratado de Trianón el 4 de junio de 1920, que desmembró gran parte del territorio húngaro y entregó vastas áreas a países vecinos. Esta situación generó un profundo resentimiento nacionalista en la población, lo que Horthy aprovechó para consolidar su poder. En ese contexto, la figura de Horthy se convirtió en un símbolo de la resistencia contra la humillación sufrida por Hungría.
Horthy también se destacó por su política autoritaria. Aunque dejó que el conde István Bethlen gobernara durante la década de los 20, fue él quien, desde las sombras, impulsó la instauración de un régimen nacionalista y conservador. En 1931, tras la creciente inestabilidad política, Horthy asumió el control total del Estado, concentrando el poder en sus manos. Su gobierno estuvo marcado por la represión de la oposición y la promoción de leyes antisemitas, que excluían a los judíos de varios aspectos de la vida pública.
Segunda Guerra Mundial
La política exterior de Horthy estuvo marcada por su búsqueda de una alianza con la Alemania nazi. A pesar de que el líder húngaro manifestaba un profundo desdén por Adolf Hitler, reconoció la conveniencia de aliarse con el régimen nazi, especialmente para recuperar los territorios perdidos tras el Tratado de Trianón. En 1939, Horthy firmó el pacto antikomintern, uniéndose oficialmente al bloque de potencias del Eje.
Bajo su liderazgo, Hungría se involucró activamente en la Segunda Guerra Mundial, enviando tropas al frente oriental junto a las fuerzas del Eje. Sin embargo, la participación de Hungría en la guerra trajo consigo enormes sacrificios, especialmente cuando las tropas húngaras fueron derrotadas en el frente soviético. En 1942, Horthy designó a su hijo Esteban como su sucesor, pero su hijo murió poco después en el frente de batalla, lo que agravó aún más la situación del país.
A medida que la guerra avanzaba, Horthy intentó equilibrar su relación con las potencias aliadas y el Tercer Reich. En 1943, comenzó a retirar las tropas húngaras del frente oriental y a explorar una posible paz separada con los aliados. Este giro fue interpretado como una traición por Hitler, quien obligó a Horthy a aceptar la entrada de tropas alemanas en Hungría en 1944. El mismo año, las tropas alemanas comenzaron a deportar a los judíos húngaros a los campos de concentración, un hecho que ensombrecería aún más el legado de Horthy.
El Final del Régimen y el Exilio
Con el avance de las tropas soviéticas en Hungría, la situación de Horthy se volvió insostenible. En septiembre de 1944, tras solicitar un armisticio con los aliados, Horthy fue depuesto por un golpe de estado dirigido por el gobierno títere fascista de Ferenc Szálasi, quien tomó el poder en su lugar. Horthy fue arrestado y deportado a Alemania, donde permaneció prisionero hasta su liberación por parte de las fuerzas aliadas en mayo de 1945.
Tras la guerra, Horthy se vio incapaz de enfrentarse a las acusaciones de colaboración con los nazis y de ser juzgado como criminal de guerra. Finalmente, se exilió en Portugal, donde pasó el resto de sus días en la ciudad de Estoril, sobreviviendo gracias a las ayudas de organizaciones húngaras en el exilio. Durante este tiempo, publicó sus memorias bajo el título Confidential Papers en 1965, un testimonio personal de su vida y su época.
Momentos Clave en la Vida de Nicolás Horthy
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1894: Graduación en la Academia Naval de Fiume.
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1909: Nombramiento como Ayuda de Campo del Emperador Francisco José.
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1914: Ascenso a capitán de navío en la Armada Austrohúngara.
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1918: Ascenso a Almirante y destacado papel en la Primera Guerra Mundial.
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1920: Nombramiento como regente de Hungría tras la Revolución Húngara.
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1921: Victoria sobre las tropas reales que aspiraban a restaurar la monarquía.
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1931: Consolidación del poder total como regente de Hungría.
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1939: Firma del pacto antikomintern con la Alemania nazi.
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1944: Depósito por un golpe de Estado y exilio en Portugal.
Relevancia Actual
La figura de Nicolás Horthy sigue siendo un tema de debate y reflexión. En la actualidad, muchos consideran que su régimen autoritario y su colaboración con el Tercer Reich lo convierten en una figura controvertida. Sin embargo, no se puede negar la importancia de su papel en la historia de Hungría, especialmente en lo que respecta a la recuperación de territorios perdidos tras la Primera Guerra Mundial y su capacidad para mantener la independencia de su nación durante un período turbulento.
El legado de Horthy es un tema complejo, pues, por un lado, fue un líder que representó los intereses nacionales de Hungría, pero, por otro, se le asocia con políticas represivas y colaboracionistas. Su vida y su carrera continúan siendo objeto de estudio y discusión, particularmente cuando se aborda la historia de Hungría en la primera mitad del siglo XX.
En cuanto a su influencia en la memoria histórica, Horthy sigue siendo una figura divisiva en Hungría y en otros países europeos. Mientras algunos lo consideran un símbolo de resistencia, otros lo ven como un colaborador del nazismo. Sin duda, su legado perdura como una pieza clave en la historia de Europa Central.
MCN Biografías, 2025. "Horthy de Nagybanya, Nicolás (1868-1957): El Regente que Forjó la Historia de Hungría". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/horthy-de-nagybanya-nicolas [consulta: 28 de septiembre de 2025].