Haile Selassie I, Emperador de Etiopía (1892-1975): La lucha por la modernización en un país ancestral

Haile Selassie I (1892-1975), uno de los monarcas más emblemáticos de África, gobernó Etiopía durante casi seis décadas con la intención de modernizar el país, pero a la vez manteniendo en su liderazgo estructuras tradicionales propias de la monarquía feudal. A pesar de sus esfuerzos por encauzar a su nación hacia la modernidad, las condiciones sociales, políticas y económicas de Etiopía en su época se vieron marcadas por la pobreza, la corrupción y la falta de desarrollo. Su legado es tan vasto como complejo, y su figura es reconocida no solo en Etiopía, sino en todo el continente africano, siendo un símbolo de la resistencia frente al colonialismo europeo.

Orígenes y contexto histórico

Haile Selassie I nació en 1892 en Lij Tafari, Harrar, una región en el este de Etiopía. Hijo de un general cercano al emperador Menelik II, su nombre natal era Tafari Makonnen. Desde su juventud, Selassie estuvo destinado a desempeñar un papel fundamental en la política etíope. A la edad de 16 años, fue nombrado gobernador de Sidamo, un título de gran importancia en la estructura del poder feudal etíope. A través de su destreza política y apoyo dentro de la familia real, se convirtió en uno de los hombres más poderosos del país.

En 1916, después de la deposición del emperador Iyasu I, Tafari Makonnen fue designado regente del emperador Hailé Selassie, lo que lo consolidó aún más como una figura clave en la política de Etiopía. En 1930, tras la muerte de la emperatriz Zeodita, ascendió al trono con el título de Negus Negaesti, o «Rey de Reyes», adoptando el nombre de Haile Selassie I.

La ascendencia de Haile Selassie, como descendiente de la reina de Saba y el rey Salomón, reforzaba su legitimidad como monarca en un país que valoraba profundamente las tradiciones y el linaje real. A lo largo de su reinado, Selassie no solo fue considerado un líder político, sino también una figura simbólica de la unidad de África y la independencia frente al imperialismo europeo.

Logros y contribuciones

Modernización y reformas

Uno de los principales objetivos de Haile Selassie I fue modernizar Etiopía, un país que en el siglo XX seguía teniendo estructuras profundamente feudales y atrasadas. En 1931, proclamó la primera constitución escrita del país, inspirada en modelos europeos. Esta constitución, aunque ambiciosa, establecía un marco legal para un sistema parlamentario, pero, debido a la falta de instituciones democráticas y la resistencia interna, sus efectos fueron limitados.

Haile Selassie también trabajó en la creación de un sistema educativo más moderno. En 1950, fundó el Colegio Universitario de Addis Abeba, el precursor de la futura Universidad de Addis Abeba, con el objetivo de formar una nueva generación de intelectuales y líderes que pudieran llevar a cabo las reformas necesarias para el desarrollo del país. Sin embargo, el analfabetismo y la falta de recursos dificultaron su implementación a gran escala.

La política exterior y la resistencia contra la invasión italiana

En el ámbito internacional, uno de los momentos más destacados del reinado de Haile Selassie fue su lucha contra la invasión italiana de 1935. Bajo el liderazgo de Benito Mussolini, Italia intentó colonizar Etiopía, lo que resultó en la Segunda Guerra Italo-Etíope. Haile Selassie, que entonces ya era emperador, tuvo que exiliarse a Inglaterra en 1936, pero nunca dejó de reivindicar la soberanía de su país ante la Sociedad de Naciones.

Durante su exilio, defendió su país en los foros internacionales, convirtiéndose en un símbolo de la resistencia africana ante el colonialismo europeo. Tras la derrota de Italia en la Segunda Guerra Mundial, Haile Selassie regresó a Etiopía en 1941, restaurando su gobierno y retomando sus planes de modernización.

Momentos clave de su reinado

A lo largo de su largo reinado, Haile Selassie vivió varios momentos de gran relevancia, tanto nacionales como internacionales. Entre los más destacados se encuentran:

  • 1931: La promulgación de la primera constitución escrita de Etiopía, una clara muestra de su compromiso con la modernización política.

  • 1936: La invasión de Etiopía por parte de Italia y la posterior huida de Haile Selassie al exilio.

  • 1941: El regreso a Etiopía tras la caída del régimen fascista italiano, recuperando el trono.

  • 1960: La sublevación encabezada por el príncipe heredero Asfa Wassan, que fue sofocada por el emperador.

  • 1963: La creación de la Organización para la Unidad Africana (OUA), que convocó su primera conferencia en Addis Abeba, consolidando su papel como líder continental en la lucha por la unidad de África.

La relevancia de Haile Selassie en la actualidad

Aunque el reinado de Haile Selassie terminó trágicamente con su derrocamiento en 1974, su influencia perdura hasta el día de hoy. Como defensor de la independencia africana y símbolo de la resistencia frente al colonialismo, Haile Selassie se convirtió en una figura central en el movimiento panafricanista.

En la Iglesia Rastafari, Haile Selassie fue considerado una figura divina, lo que le otorga un rol aún más trascendente. Los rastafaris lo veneran como la encarnación de la divinidad y lo asocian con el retorno de los descendientes de los antiguos israelitas, en línea con su supuesta descendencia de la reina de Saba y el rey Salomón. Esta interpretación religiosa ha ayudado a mantener su legado en la memoria colectiva, especialmente en el Caribe y otras regiones de la diáspora africana.

Aunque el país no alcanzó el nivel de desarrollo que Haile Selassie había proyectado, su papel como líder de un pueblo que luchaba por la modernización en medio de dificultades extremas sigue siendo reconocido y estudiado por historiadores, políticos y activistas de todo el mundo.

El derrocamiento y el fin de un reinado

A pesar de sus logros, el emperador no pudo evitar la crisis que azotó a Etiopía en la década de 1970. La pobreza generalizada, la corrupción y el descontento popular culminaron en un golpe de Estado en 1974, que resultó en el derrocamiento de Haile Selassie. En septiembre de ese mismo año, fue arrestado y encarcelado, y no volvió a aparecer en público hasta su fallecimiento en 1975 en Addis Abeba.

El fin de su reinado marcó el fin de una era para Etiopía, que pasó de ser una monarquía feudal a una república socialista bajo la Junta Militar de Mengistu Haile Mariam, quien asumió el poder después del golpe. El legado de Haile Selassie sigue siendo objeto de debate: mientras que algunos lo consideran un héroe nacional y un líder visionario, otros critican la falta de cambios estructurales reales en su gobierno y su incapacidad para erradicar los problemas más profundos del país.

Bibliografía:

  • «Haile Selassie I: Emperador de Etiopía». MCN Biografías.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Haile Selassie I, Emperador de Etiopía (1892-1975): La lucha por la modernización en un país ancestral". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/haile-selasie-i-emperador-de-etiopia [consulta: 13 de junio de 2025].