Gay, María (1879-1943).


Cantante mezzosoprano española nacida en Barcelona el 17 de junio de 1879 y fallecida en Nueva York el 29 de julio de 1943. Fue una contralto dotada de muy hermosa voz, con robusto centro y técnica depurada, que además tenía personalidad y temperamento llamativos. Su nombre ha permanecido ligado al de Carmen, de Bizet, personaje del que está considerada una de las más afortunadas intérpretes. Sus mayores triunfos en la escena se dieron justo en los años anteriores a la Gran Guerra, cuando la ópera y las artes en general vivían un momento brillante en Europa.

Desde muy joven estuvo introducida en el ambiente modernista que vivía la ciudad catalana a finales del siglo XIX; su hermano, Ramón Pichot, era pintor, y ella ingresó en el Orfeó Catalá. Sus cualidades para el canto la llevaron a ampliar sus estudios con el profesor Juan Gay, quien se convirtió en la persona fundamental en el inicio de su carrera. Contrajeron matrimonio en 1899; ella adoptó el apellido del marido en su nombre artístico y su primera actuación, en el célebre local «Els quatre gats» -punto de reunión de Picasso, Granados, Rusiñol, etc.-, fue auspiciada por él. Decidida a triunfar en la ópera, viajó a París, donde recibió las clases de Ada Adiny. En 1902 debutó con Carmen en el Teatro de la Moneda de Bruselas, pero enseguida regresó a París para continuar los estudios.

Tras varios años de perfeccionar la voz y la interpretación, y de algunas actuaciones menores, en 1906 se presenta con Carmen en la Ópera Cómica de París, y el mismo año en el Covent Garden londinense. Lanzada ya su carrera internacionalmente, fue llamada para actuar en los principales teatros del mundo, siempre con Carmen encabezando su repertorio. Debutó en la Scala y en 1907 lo hizo en el Teatro Colón de Buenos Aires; un año después actuaba en el Metropolitan de Nueva York y otras ciudades estadounidenses, y en el Teatro Real de Madrid en 1909. Obtuvo también éxitos con El Trovador, Sansón y Dalila, Cavalleria rusticana, Orfeo y Euridice y Aida, entre otras.

Separada de Juan Gay, se casó de nuevo en 1913 con el tenor Giovanni Zenatello. Su primera actuación juntos fue un Aida en Verona, pero la Guerra Mundial interrumpió gran parte de sus conciertos. Al finalizar la contienda, reanudó por todo el mundo la actividad artística con la incorporación de varios papeles wagnerianos: Brangania en Tristán e Isolda, Ostruda en Lohengrin y Erda en El oro del Rin. Se despidió del público madrileño en 1919 con El Avapiés, de Tomás Borrás, que se representó en el Teatro Real. La retirada definitiva de los escenarios se prolongó hasta 1927. Posteriormente abrió con su marido una academia de canto en Nueva York, ciudad en la que residió hasta su muerte.