Francesco del Cossa (1436-1478). El maestro del Renacimiento en la escuela de Ferrara

Francesco del Cossa, nacido en Ferrara en 1436 y fallecido en Bolonia en 1478 a causa de la peste, es uno de los nombres fundamentales del Renacimiento italiano, particularmente como representante destacado de la escuela de Ferrara. Su obra combina una exquisita sensibilidad estética con una técnica precisa que refleja las influencias de algunos de los grandes maestros de su época, entre ellos Tura, Mantegna, Piero della Francesca y Donatello. Su legado, aunque menos conocido que el de otros contemporáneos, es esencial para comprender la evolución del arte en el norte de Italia durante el siglo XV.

Orígenes y contexto histórico

Francesco del Cossa nació en una ciudad próspera, Ferrara, gobernada entonces por la poderosa familia Este. Durante el siglo XV, Ferrara se convirtió en un importante centro cultural y artístico del Renacimiento, gracias al mecenazgo de los duques de Este, quienes promovieron la actividad de artistas, escritores y filósofos. En este contexto vibrante y humanista se formó Del Cossa, desarrollando un estilo que combina el rigor del dibujo con la delicadeza del color.

Desde muy joven, Del Cossa se sintió atraído por los modelos de los artistas más representativos de la época. En sus primeras obras se detectan claras influencias de Tura, compañero en la escuela de Ferrara, y de Mantegna, con quien compartía un gusto por la perspectiva rigurosa y la representación escultórica del cuerpo humano. La influencia de los toscanos también marcó su formación, especialmente tras entrar en contacto con la obra de Piero della Francesca, cuyas composiciones geométricas y uso de la luz dejaron una huella profunda en su estilo.

Logros y contribuciones

Uno de los aportes más destacados de Francesco del Cossa al arte renacentista fue su participación en la decoración del Palacio Schifanoia, situado en Ferrara. Esta obra monumental, comisionada por la familia Este, tenía como propósito exaltar el poder y el refinamiento de los duques a través de un complejo programa iconográfico. Del Cossa se encargó de ilustrar varios meses del año en el famoso ciclo alegórico del Salone dei Mesi, considerado uno de los más impresionantes ciclos profanos del Renacimiento italiano.

Su trabajo en el Palacio Schifanoia destaca por la combinación de simbolismo astrológico, escenas de la vida cotidiana y representaciones mitológicas, todo ello estructurado con gran maestría en composiciones dinámicas y equilibradas. A diferencia de otros ciclos contemporáneos más centrados en lo sagrado, el de Schifanoia ofrece una visión profana del mundo, lo que lo convierte en una pieza única dentro del arte del Quattrocento.

Además de sus obras en Ferrara, Del Cossa amplió su actividad artística a otras ciudades italianas. En Padua, quedó profundamente impresionado por las esculturas de Donatello, cuyas formas sólidas y expresivas influyeron en la solidez compositiva de sus figuras. También absorbió los recursos dramáticos y el tratamiento espacial de Mantegna, especialmente visibles en sus altares posteriores.

En Bolonia, donde residió en los últimos años de su vida, Francesco del Cossa consolidó su madurez artística realizando diversas obras sacras de gran formato.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Francesco del Cossa (1436-1478). El maestro del Renacimiento en la escuela de Ferrara". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/cossa-francesco-del [consulta: 29 de septiembre de 2025].