Copons y Navia, Francisco. Conde de Tarifa (ca. 1769-1842).


General español nacido en Málaga hacia el 1769 y muerto en 1842.

Estudió Matemáticas y otras ciencias en la Academia Militar del Puerto de Santa María, ingresando en el ejército como cadete el 16 de junio de 1784. Ya como teniente participó en la guerra del Rosellón, y después tomó parte en la Guerra de la Independencia, hallándose en Bailén y en otras batallas y campañas. Ascendió a brigadier, el 12 de agosto de 1809, y a mariscal de campo, el 16 de marzo de 1810.

El 9 de junio de 1810 escribe desde el cuartel general de Castillejos una carta al duque de Arenberg, en la que le habla de la legítima causa española y del honor, que aparece en el Diario Mercantil de Cádiz, del 8 de julio de 1810. Dos oficios, del 16 y 17 agosto 1810, a la Junta de Ayamonte, se hallan en Conciso, número 3, de 28 de agosto de 1810 (el segundo contiene otro del marqués de la Romana). Una carta al general Remond, firmada en Castillejos a 18 de enero de 1811, en la que le censura por haber matado a un prisionero español, se publica en el Diario Mercantil de Cádiz, del 28 de enero de 1811. Y un parte firmado en Trigueros a 20 de enero de 1811, sobre sus combates con el mismo general, en Conciso, número 14, de 28 de enero de 1811.Publica además Carta al editor del Semanario patriótico, fechada en Ayamonte a 16 de enero de 1811 (Cádiz, 1811), en la que hace valer su pericia militar. Su parte a la Junta de Sevilla, en Trigueros a 20 de enero de 1811, y Visos de Niebla, 21 de enero de 1811, en Gaceta extraordinaria de Cádiz, número 4, de 9 de febrero de 1811, y el de Tarifa, de 13 de diciembre de 1811, en Conciso, 17 de diciembre de 1811.El Redactor, número 213, de 13 de enero de 1812, publica su contestación al general Leval, que le había intimado la rendición, en Tarifa, a 30 de diciembre de 1811, (texto reproducido en las Memorias) y su Proclama a los soldados de la guarnición, de la misma fecha, y Proclama a los habitantes, en Tarifa a 5 de enero de 1812.

Presidió la comisión superior de gobierno del Reino de Valencia, desde el año 1812 hasta su disolución por la Regencia. Su proclama Habitantes del reino de Valencia, en Alicante a 23 de abril de 1812, se publica en Redactor, número 341, 20 de mayo de 1812. La ejecución del guerrillero Vicente Bonmatí le inspira una proclama, Alicante 4 de junio de 1812, en la que promete que si se repiten acciones de esa índole mandará fusilar veinte prisioneros por cada uno español, y si no hubiese bastantes se traerán de la isla de Cabrera (publicada, sin título, en Diario Mercamtil de Cádiz, números 13 y 14, 13 y 14 de julio de 1812).

A finales de noviembre de 1812 fue enviado de aventurero al IV ejército, para integrarse en el primero. Un bando, firmado en Vich el 2 de marzo de 1814, sobre la purificación de los afrancesados, aparece en la Gaceta de Cataluña, número 23, 3 de marzo de 1814. Su Representación a la Regencia, Vic 3 de marzo de 1813, se publica en Redactor, número 701, de 16 de mayo de 1813.El 30 de noviembre de 1813 fue condecorado con la Gran cruz de San Fernando y de San Hermenegildo y de Carlos III. Perteneció también a la Asamblea suprema de la orden de San Fernando.

La «Proclama del General en Jefe del primer Ejército» y la «Circular del mismo Jefe a los Gobernadores militares de los distritos del Principado de Cataluña», en TPE, número 45 de abril de 1813, «Militares del primer ejército», Vich 13 de enero de 1814, en Gaceta de Cataluña, n. 5, 13 de enero de 1814.Ascendido a teniente general, el 16 de febrero de 1814. Un bando firmado en Gerona a 18 de marzo de 1814, sobre expulsión de franceses, italianos, o naturales de países aliados de Francia, y afrancesados, se halla en Gaceta de Cataluña, n. 30, 24 de marzo de 1814. Como capitán General de Cataluña, dirige una «Proclama a las tropas de su mando», Gerona a 21 de marzo de 1814, que aparece en el Redactor General de España, número 157, 6 de abril de 1814.

El 24 de marzo de 1814 recibió a Fernando VII, que volvía de Francia, en el río Fluviá, en cuya ocasión cumplió escrupulosamente con su obligación, lo mismo que en las visitas que anteriormente había recibido de parte del Rey; pero no se manifestó contrario a la Constitución, que había jurado en Valencia, e incluso aconsejó al Duque de San Carlos que, cuando el Rey recobrase la corona, quitase de su lado a cuantos le habían aconsejado el viaje a Bayona. En la Gaceta Extraordinaria de la Regencia del Martes 29 de Marzo de 1814, Cádiz 1814, se publica un parte de Copons, en el que cuenta el recibimiento dado al Rey a su entrada en España. Este fue el comienzo de sus desgracias.De nada sirvió que el 30 de mayo de 1814 ordenase que fuese paseado por Barcelona el retrato de Fernando VII. En efecto, al volver éste a España, le concedió en Gerona la gran cruz de Carlos III, pero poco después de acompañarlo hasta Zaragoza se recibieron dos órdenes: por la primera debía dejar el mando a su segundo el barón de Eroles; la segunda, reservada, dirigida a Eroles, prescribía su detención, que tuvo lugar en la noche del 4 al 5 junio 1814 y su confinamiento en Sigüenza y unos meses después se le instruyó causa criminal. Acaso por obra de una representación suya, el 9 abril 1816 se le levantó el confinamiento, pudiendo trasladarse a Madrid. Los perseguidores en esta primera etapa habían sido Escoiquiz y Eroles, dato inquietante para el futuro.

En mayo de 1818 fue nombrado gobernador militar y político de Barcelona. Publicó entonces «Historia de España, época romana», en Diario de Barcelona, del 8 de febrero de 1820, artículo en el que veladamente manifestaba su escepticismo sobre la insurrección entonces en curso. Al estallar la revolución en la ciudad, fue destituído el 10 de marzo de 1820 y conducido preso unos días después a la Cartuja de Miraflores. Se le expulsó de Barcelona, y aunque Málaga como desagravio le pidió para capitán general, sólo se le empleó el 16 de enero de 1821, cuando fue nombrado vocal de la Junta Consultiva del Ministerio de la Guerra. El 9 de junio de 1821 fue nombrado jefe superior político de Madrid, y aunque dimitió, no se le aceptó la renuncia hasta el 7 de septiembre 1821.

Se introdujo en la Masonería con fines de espionaje, usando el nombre de Tarif, aunque sin llegar a hacer juramentos ni otras fórmulas. Buscaba información sobre la Sociedad masónica y sobre la Comunería, sin conseguirlo porque se sospechó de él – por lo menos así se dice en su expediente del Archivo General Militar de Segovia. Por estas razones acaso entre junio y septiembre de 1821, lejos de cerrar la Fontana y otras sociedades patrióticas, pactó con los oradores, y aun utilizó a veces este conducto y el de la prensa para revelar las medidas tortuosas del gobierno sobre influir en las elecciones, y otras semejantes. Esto produjo una situación de extrema enemistad entre él y el secretario de Gobernación, Feliu.Publicó dos folletos sin título, en 1821 y 1822, y El Jefe Superior Político a los habitantes de Madrid, 16 de junio de 1821, y El Jefe Superior Político a los Ciudadanos concurrentes a la reunión de la Fontana de Oro, 16 de julio de 1821. En un documento sin fecha del Archivo General de Palacio aparece como Venerable de la 8ª Torre de los comuneros de Madrid, en la calle de Francos, casa del Molino, 16, 2º.

De nuevo el 7 de agosto de 1822 fue nombrado capitán general de Castilla la Nueva, y aunque también renunció, estuvo en el cargo 21 días, los suficientes para influir sobre la Causa del 7 de Julio, y para ganarse nuevas animosidades. Autor también de Manifiesto que da al público el ciudadano general … contestando al Ministro de la Gobernación de la Península, sobre la imputación de la carta que dirigió a S.M. el año 1815, por cuya razón se le separó del mando político de Madrid, 1822 y Contestación que ofreció dar el General Copons en los papeles públicos del 26, Madrid 1822 (agosto).El 27 febrero 1823 se le nombró Jefe militar interino de Palacio, en el ejercicio de cuyo cargo tuvo que salir al paso de una intentona absolutista en Sevilla, el 1 de junio de 1823. El 1 de octubre de 1823, con la libertad del Rey, cesó Copons en su cargo, y en seguida comenzó la persecución que le ocasionó en 1824 la ceguera. Trató de justificar su conducta en Sevilla con un escrito sin título, fechado en Córdoba el 27 de diciembre de 1823, y publicado en la misma ciudad y año.

Declarado impurificado por sentencia del 9 de abril de 1827 hasta 1833, con María Cristina, no se le revalidó el empleo de teniente general, ni se le devolvieron sus condecoraciones y sueldo condigno. Su esposa, muy joven, murió desesperada. Así pagó Copons no el haber sido revolucionario, sino el haberlo parecido mediante el cumplimiento de su deber. Su hijo, el coronel Francisco de Copons Navia y Asprer, publicó las Memorias de los años de 1814 y 1820 al 24 (Madrid, 1858), obra de su padre, muy importante, aunque se nota la mano filial. En este libro se incluye un retrato de Copons, litografiado por E. Varela.

Bibliografía

  • Archivo General Militar de Segovia.

  • Archivo General de Palacio. Papeles Reservados 87.

  • «Barcelona recuperada, y entrada triunfante en ella del retrato de S.M. el Señor D. Fernando VII». En Gaceta de Murcia, n. 40, 18 de junio de 1814.

  • Conciso, n. 3, 28 de agosto de 1810; n. 14, 28 de enero de 1811 y número de 17 de diciembre de 1811.

  • Diario Mercantil de Cádiz, del 8 de julio de 1810; 28 de enero de 1811 y números 13 y 14, del 13 y 14 de julio de 1812.

  • GIL NOVALES, Alberto: Las Sociedades patrióticas. Madrid: Tecnos, 1975.

  • Redactor General de España, n. 213, 13 de enero de 1812; n. 341, 20 de mayo de 1812; n. 327, 537 y 542, 6 de mayo, 2 y 7 de diciembre de 1812; n. 701, 16 de mayo de 1813; n. 157, 6 de abril de 1814.

  • RIAÑO, Camilo: El Teniente General Don Antonio Nariño. Bogotá, 1973.

  • Tribuno, n. 58, 4 de junio de 1813.

A. GIL NOVALES.