Calderón Serra, Sila María (1942-VVVV). La primera mujer gobernadora de Puerto Rico

Calderón Serra

Sila María Calderón Serra (1942-VVVV) es una de las figuras más representativas de la política puertorriqueña, destacando como la primera mujer en ser elegida gobernadora de Puerto Rico. Nacida en San Juan el 23 de septiembre de 1942, su carrera se ha caracterizado por una notable capacidad de liderazgo, tanto en el sector público como en el privado. A lo largo de su vida política, ha luchado por la defensa de la identidad nacional puertorriqueña y por el bienestar económico y social de la isla, convirtiéndose en un referente para futuras generaciones de mujeres líderes.

Orígenes y contexto histórico

Sila Calderón creció en un Puerto Rico convulsionado por cambios políticos y sociales. Su formación académica comenzó en el Colegio Sagrado Corazón de Las Madres en Santurce, donde dio sus primeros pasos en la educación. Luego, se trasladó a Nueva York, donde se graduó en Ciencias Políticas en el Manhattanville College de Purchase, en un momento en que Puerto Rico atravesaba una serie de debates sobre su estatus político. Tras completar sus estudios, regresó a la isla, donde continuó su formación académica con estudios de posgrado en la Escuela de Administración Pública de la Universidad del Estado de Puerto Rico.

El contexto histórico en el que creció Sila Calderón fue crucial para su posterior desempeño político. Durante su juventud, Puerto Rico estaba atravesando intensos debates sobre su relación con Estados Unidos, con sectores a favor de la independencia y otros que defendían el Estado Libre Asociado (ELA) o la anexión plena como estado de la nación norteamericana.

Logros y contribuciones

Sila Calderón inició su carrera profesional en el sector público en 1973, cuando comenzó a trabajar como ayudante ejecutiva del secretario de Trabajo, cargo que ocupó en la administración del entonces gobernador popular Hernández Colón. Desde sus primeros pasos en la política, Calderón se inclinó por el Partido Popular Democrático (PPD), que defendía el ELA, un estatus intermedio entre la independencia y la plena integración a Estados Unidos.

Cuando el Partido Nuevo Progresista (PNP) y su candidato Romero Barceló ganaron las elecciones en 1976, Calderón decidió dejar la administración pública para incorporarse al sector privado. Allí ocupó posiciones de relevancia, como la dirección ejecutiva del área de Desarrollo de Negocios en Citibank y la presidencia de Commonwealth Investment Company. A pesar de esta etapa en el ámbito privado, su lealtad y compromiso con el PPD nunca se desvanecieron.

En 1984, el PPD recuperó el poder, y Hernández Colón convocó a Calderón para formar parte de su equipo de trabajo. Durante los años siguientes, desempeñó una serie de importantes cargos, como coordinadora de Programas de Gobierno y secretaria de la Gobernación. Su impacto dentro de la administración pública fue notable, y su capacidad de gestión se evidenció en su participación en varios proyectos clave, como el Comité de Inversiones de la Compañía de Fomento Industrial y la Junta Directiva del Centro de Estudios Especializados en Gerencia de Gobierno.

Su carrera continuó en el sector privado, donde se desempeñó en varias instituciones financieras de Puerto Rico. En 1995, tomó una de las decisiones más importantes de su carrera: dejó el sector privado para preparar su candidatura a la alcaldía de San Juan.

Momentos clave

El momento clave en la carrera política de Sila Calderón llegó en 1996, cuando ganó las primarias del PPD para optar al cargo de alcaldesa de San Juan. Su victoria fue histórica, ya que devolvía el poder capitalino al PPD después de 28 años de dominio del PNP. En las elecciones generales de ese año, Calderón se impuso con el 51% de los votos, lo que marcó un cambio significativo en la política de la isla.

Aunque a nivel estatal el PNP mantuvo el poder bajo el liderazgo de Pedro Rosselló, Calderón se destacó como una firme defensora del ELA y de la identidad nacional puertorriqueña. Su liderazgo en la campaña electoral de 1996 ayudó a consolidar la presencia del PPD, y su postura en defensa de la soberanía de Puerto Rico la colocó como una de las figuras más influyentes del momento.

El 31 de mayo de 1999, Sila Calderón ganó las primarias del PPD para ser candidata a la gobernación, lo que significó un paso más hacia la histórica victoria en las elecciones generales de 2000. En esos comicios, Calderón logró una victoria ajustada con el 48,5% de los votos frente a su máximo rival, el candidato del PNP, Carlos Pesquera, quien obtuvo un 45,7%.

Relevancia actual

El 2 de enero de 2001, Sila Calderón asumió oficialmente el cargo de gobernadora de Puerto Rico, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar la jefatura del Ejecutivo puertorriqueño. Durante su mandato, una de sus principales preocupaciones fue la cuestión de las maniobras militares de la Marina de los Estados Unidos en Vieques. En 2003, tras años de protestas y luchas, el gobierno de Calderón celebró la decisión del Pentágono de retirar sus tropas de la isla.

Además de su postura firme sobre la defensa del ELA, Calderón también impulsó políticas de desarrollo económico y de justicia social. A pesar de los retos políticos y económicos que enfrentó durante su mandato, su legado es recordado por su compromiso con la mejora de la calidad de vida de los puertorriqueños.

El legado de Sila Calderón no solo se mide por sus logros políticos, sino también por los importantes reconocimientos que recibió a lo largo de su carrera. En 1987, el gobierno de España le otorgó la Orden de Isabel la Católica, y en 1997 recibió el doctorado honoris causa en Artes y Humanidades por el Manhattanville College de Nueva York. Estos premios reflejan el impacto positivo que tuvo su gestión en la isla y el reconocimiento internacional a su trabajo.

Contribuciones y legado

A lo largo de su vida política, Sila Calderón ha jugado un papel crucial en la construcción de una Puerto Rico más equitativa y justa. Desde sus primeras experiencias en la administración pública hasta su etapa como gobernadora, su capacidad de liderazgo ha dejado una huella imborrable. Algunos de los aspectos más destacados de su legado incluyen:

  • Defensa del ELA: Como firme defensora del Estado Libre Asociado, Calderón fue una de las principales voces en contra de la anexión de Puerto Rico a los Estados Unidos.

  • Primera mujer gobernadora: Su victoria en 2000 rompió una barrera histórica al convertirse en la primera mujer en asumir la gobernación de Puerto Rico.

  • Liderazgo en la rehabilitación de Vieques: Su lucha por la retirada de las tropas estadounidenses de Vieques es uno de los logros más importantes de su gestión.

  • Compromiso social: Durante su mandato, Calderón también trabajó en proyectos que buscaron mejorar la calidad de vida de los puertorriqueños más vulnerables.

En la actualidad, Sila Calderón sigue siendo una figura emblemática en la historia política de Puerto Rico, y su legado continúa siendo fuente de inspiración para nuevas generaciones de puertorriqueños, especialmente mujeres que aspiran a alcanzar puestos de liderazgo en la política y otros campos.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Calderón Serra, Sila María (1942-VVVV). La primera mujer gobernadora de Puerto Rico". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/calderon-serra-sila-maria [consulta: 28 de septiembre de 2025].