Aguilar Barquero, Francisco (1857-1924).


Político costarricense nacido el 21 de mayo de 1857 y muerto en San José el 11 de octubre de 1924. Fue presidente de la República entre 1919 y 1920.

Realizó sus estudios en el colegio San Luis Gonzaga. Estudió derecho y se graduó como abogado, profesión que ejerció durante la mayor parte de su vida. Su carrera política se inició como gobernador de Cartago. Abandonó este cargo para hacerse cargo de la Secretaría de Guerra y Marina en el gobierno de Bernardo Soto. Posteriormente regresó a la abogacía y fue nombrado presidente del Colegio de Abogados. Durante un tiempo se dedicó a la enseñanza del derecho, para posteriormente regresar a la vida política como regidor municipal de San José. Ocupó el cargo de magistrado interino de la Corte Suprema de Justicia y diputado en el Congreso Constitucional. Posteriormente fue vicepresidente del Congreso.

Tras desempeñar durante el mandato de Alfredo González Flores el cargo de tercer designado a la presidencia, al año siguiente de expirar dicho mandato, 1918, fue nombrado presidente de la República, cargo que ocupó entre 1919 y 1920. Su elección estuvo marcada por la polémica, ya que se cuestionaba la legalidad de la misma al haber sido designado del anterior gobierno, pero la difícil situación interna y externa de Costa Rica hizo posible su elección: en aquellos momentos, los Estados Unidos de América amenazaron a Costa Rica con intervenir militarmente en el país si el designado Juan Bautista Quirós era elegido presidente, por lo que el Congreso decidió nombrar para tal cargo a Francisco Aguilar.

Francisco Aguilar aceptó el poder como dictador y no como presidente. Esa fue su única condición para hacerse cargo de la presidencia. Dicha condición venía marcada por la conflictiva situación interna que hacía necesario, a ojos de Aguilar, que la presidencia tuviese amplios poderes con los que asegurar el orden interno.

Durante sus apenas ocho meses de gobierno fue un administrador justo, organizó la economía y frenó la creciente deuda de Costa Rica; buscó la paz interna y restableció las libertades ciudadanas; anuló todos los pagos realizados por el Estado que no estuviesen previamente presupuestados. En 1920, y pese a las presiones de su círculo de colaboradores, renunció a la presidencia y entregó el poder al Congreso para que se convocasen nuevas elecciones.

El 10 de marzo de 1923 fue nombrado Benemérito de la Patria. El día 11 de octubre del año siguiente falleció en San José.

JACJ.