Agüero Ereño, Martín (1902-1977): El matador de toros que dejó su huella en la historia taurina

Agüero Ereño

Agüero Ereño, Martín (1902-1977): El matador de toros que dejó su huella en la historia taurina

Martín Agüero Ereño (1902-1977) es recordado como uno de los grandes matadores de toros españoles de su tiempo, cuya vida estuvo marcada tanto por sus triunfos en el ruedo como por los retos personales que enfrentó a lo largo de su carrera. Nacido en Bilbao el 3 de febrero de 1902, Agüero Ereño vivió una trayectoria taurina repleta de momentos de gloria y de tragedia, que culminaron en una de las vidas más singulares y admiradas dentro del mundo de la tauromaquia.

Orígenes y contexto histórico

El matador de toros Martín Agüero Ereño nació en una época en la que el toreo era una de las principales formas de entretenimiento en España, especialmente en el País Vasco, su tierra natal. Desde joven, mostró una notable habilidad para la tauromaquia, lo que le permitió entrar rápidamente en el círculo de los novilleros de la época, una categoría muy disputada por los aspirantes a matadores de toros.

El contexto social y político de su tiempo no fue fácil. España atravesaba grandes cambios durante las primeras décadas del siglo XX, con el surgimiento de nuevas corrientes políticas y sociales que repercutirían en todos los ámbitos de la vida, incluido el mundo taurino. Durante los años de juventud de Agüero Ereño, las corridas de toros eran más que un espectáculo: eran una muestra de la cultura popular española, y los matadores eran figuras admiradas por su valentía y destreza.

Logros y contribuciones

La carrera de Agüero Ereño despegó a una temprana edad, alcanzando notoriedad en la década de 1920. Después de realizar una exitosa campaña como novillero, un grado en el que hizo su debut en Madrid el 24 de julio de 1923, Agüero Ereño se ganó el reconocimiento como un joven prometedor en el mundo de la tauromaquia. Su gran oportunidad llegó el 31 de agosto de 1924, cuando tomó la alternativa en la plaza de toros de Málaga, un paso fundamental en su carrera, en el que recibió el reconocimiento oficial como matador de toros. En esta histórica fecha, fue Manuel Jiménez Moreno, conocido como «Chicuelo», quien le cedió un toro de la ganadería de don Pablo Romero.

Un año después, el 7 de julio de 1925, Agüero Ereño confirmó su alternativa en Madrid, una de las plazas más prestigiosas para cualquier torero. En este acontecimiento, lidiaba toros de la ganadería de don Antonio Pérez, con la presencia de dos grandes figuras del momento: Ricardo Anlló Orrio, conocido como «Nacional», y «Gitanillo de Ricla», que actuó como testigo. Fue en estos primeros años donde Agüero Ereño demostró su maestría en el ruedo, captando la atención de los aficionados más exigentes.

A lo largo de su carrera, se consolidó como un torero valiente y seguro, especialmente conocido por su habilidad en la faena con los toros de lidia de más temperamento. A lo largo de las distintas temporadas en las que actuó, Agüero Ereño se ganó una reputación de gran torero, con actuaciones memorables en distintas plazas de España.

Momentos clave

Aunque su carrera fue destacada por su habilidad en el ruedo, la vida de Martín Agüero Ereño estuvo marcada por momentos difíciles que pusieron a prueba su fortaleza. En 1928, sufrió una grave cornada que casi le cuesta la vida. Aunque logró sobrevivir, las consecuencias de esta herida fueron devastadoras, ya que quedó con secuelas físicas permanentes. Esta lesión marcaría su futuro dentro de la tauromaquia, aunque no lo detuvo.

Sin embargo, la tragedia no se limitó a este incidente. En 1949, una complicación derivada de esta cornada le obligó a perder su pierna izquierda, lo que fue un golpe durísimo para el torero, pero también una prueba de su carácter y determinación. A pesar de este duro revés, Agüero Ereño siguió luchando por mantenerse cerca de su pasión, la tauromaquia. Sin embargo, los años no perdonaron y, en 1973, sufrió la amputación de su otra pierna, una tragedia que le hizo retirarse finalmente de la vida pública. El 10 de junio de 1977, Agüero Ereño falleció en su ciudad natal de Bilbao, dejando un legado indeleble en el mundo de los toros.

A lo largo de su carrera, Agüero Ereño estuvo involucrado en varios momentos decisivos que dejaron huella en la historia de la tauromaquia. Fue testigo de la evolución de la fiesta taurina durante los primeros años del siglo XX, y su estilo siguió la tradición de otros grandes toreros de su tiempo. Su valentía, su arte y su capacidad para superar las adversidades lo convirtieron en una figura admirada y respetada.

Relevancia actual

A pesar de las dificultades físicas que sufrió a lo largo de su vida, la figura de Martín Agüero Ereño sigue siendo un referente en la historia del toreo. Su trayectoria es recordada no solo por sus éxitos en el ruedo, sino también por la manera en la que supo enfrentarse a la adversidad. Su capacidad para seguir adelante a pesar de las tragedias personales que lo marcaron le ha ganado el respeto y la admiración de todos los aficionados y profesionales del mundo taurino.

En la actualidad, su legado se mantiene vivo a través de los relatos y memorias de aquellos que compartieron momentos de gloria con él en las plazas de toros. La valentía y la técnica de Agüero Ereño siguen siendo objeto de estudio y admiración para las nuevas generaciones de toreros, que lo consideran una figura fundamental en la evolución del toreo en España.

Momentos clave en la carrera de Martín Agüero Ereño:

  1. 24 de julio de 1923: Debut como novillero en Madrid.

  2. 31 de agosto de 1924: Toma de alternativa en la plaza de toros de Málaga.

  3. 7 de julio de 1925: Confirmación de la alternativa en Madrid, lidiando toros de la ganadería de don Antonio Pérez.

  4. 1949: Pérdida de su pierna izquierda debido a complicaciones derivadas de una grave cornada sufrida en 1928.

  5. 1973: Amputación de su otra pierna.

  6. 10 de junio de 1977: Fallecimiento en Bilbao.

Martín Agüero Ereño fue un hombre cuyo nombre perdurará siempre en los anales de la historia taurina de España, no solo por sus hazañas en el ruedo, sino también por su valentía al enfrentarse a las tragedias personales que marcaron su vida.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Agüero Ereño, Martín (1902-1977): El matador de toros que dejó su huella en la historia taurina". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/aguero-erenno-martin [consulta: 19 de octubre de 2025].