Mohamed Ali Radjai (1933-1981): El breve pero significativo legado de un presidente iraní
Mohamed Ali Radjai fue un político
iraní que ocupó la presidencia de la República de Irán durante un corto
pero crucial periodo, desde el 24 de julio hasta su trágica muerte el
30 de agosto de 1981. Su vida, marcada por la lucha política y la
dedicación a la revolución islámica, fue un reflejo del turbulento
contexto histórico que vivió Irán en ese entonces. A lo largo de su
carrera, Radjai se destacó por su firmeza en su ideología islámica,
enfrentándose a las fuerzas laicas y moderadas dentro del país,
especialmente tras la caída del shah. Su vida se truncó de forma
dramática en un magnicidio que dejó una huella profunda en la historia
contemporánea de Irán.
Orígenes y contexto histórico
Mohamed Ali Radjai nació en 1933 en
Qazvin, una ciudad ubicada en la provincia de Gilan, Irán. Desde
temprana edad, mostró un interés en la aviación, lo que lo llevó a
unirse a la Fuerza Aérea iraní a los quince años, después de haber
completado su educación primaria. Su interés por la educación y el
conocimiento lo llevó a estudiar Ciencias en Teherán, donde más tarde
comenzó a dar clases en varios centros educativos, tanto en la capital
como en su ciudad natal.
Sin embargo, su carrera política
comenzó a despegar en 1963, cuando se unió al clandestino Movimiento de
Liberación Nacional de Irán (MLNI), un grupo que luchaba por la
autonomía política del país frente al régimen autoritario del sha
Mohamed Reza Pahlevi. Esta participación lo llevó a ser detenido
brevemente por las autoridades del shah, lo que marcó el inicio de su
implicación en la política de oposición al régimen.
En 1974, Radjai fue arrestado
nuevamente por la policía política imperial, la SAVAK, y pasó varios
años en prisión. Durante este tiempo, su ideología se fue perfilando
con mayor firmeza, orientándose hacia el islamismo radical, lo que lo
llevó a organizar, en 1978, un movimiento de profesores islámicos con
el fin de reformar el sistema educativo iraní en función de los valores
islámicos.
Logros y contribuciones
El giro definitivo en la vida
política de Mohamed Ali Radjai ocurrió con la Revolución Islámica de
1979, que derrocó al régimen del shah. Tras el triunfo de la
revolución, Radjai fue elegido diputado para formar parte de la
Asamblea encargada de redactar la nueva Constitución de la República
Islámica de Irán. Su ascendente trayectoria política continuó en
septiembre de ese mismo año, cuando fue nombrado ministro de Educación
en el gobierno de M. Bazargan.
Sin embargo, este gobierno fue
efímero. En noviembre de 1979, M. Bazargan dimitió, y Radjai asumió la
presidencia del país en agosto de 1980. Este ascenso al poder fue
interpretado como un triunfo de los sectores islámicos más radicales,
aunque Radjai no pertenecía al clero, en contraposición a las fuerzas
laicas y moderadas que habían colaborado en la caída del sha y cuyo
principal exponente era el presidente de la República, Abolhassan
Banisadr.
Con el respaldo del clero chií y
del Partido de la República Islámica (PRI), Radjai fue elegido
presidente el 24 de julio de 1981, obteniendo un impresionante 88% de
los votos. En ese mismo periodo, el Majlis (Parlamento) eligió a su
antiguo compañero en la lucha contra el shah, Mohammad Javad Bahonar,
como su primer ministro.
Momentos clave
La presidencia de Radjai estuvo
marcada por momentos decisivos que marcaron la historia contemporánea
de Irán. Uno de los momentos más significativos fue el atentado que
acabó con su vida. El 30 de agosto de 1981, apenas un mes después de
asumir la presidencia, un artefacto explotó en la oficina de Bahonar,
matando a Radjai, Bahonar y al jefe de la Policía. Este magnicidio fue
uno de los más espectaculares en la historia contemporánea de Irán y
marcó el final abrupto de la presidencia de Radjai.
El atentado fue atribuido a los
Mujahidines del Pueblo, un grupo de izquierda que se oponía al régimen
islámico, pero no logró colapsar al régimen. Aunque el presidente y el
primer ministro fueron asesinados, el poder real continuaba
residenciado en la jerarquía religiosa. La muerte de Radjai llevó al
ascenso de Sayed Alí Jamenei como su sucesor.
Relevancia actual
El legado de Mohamed Ali Radjai
sigue siendo significativo en la historia de Irán, especialmente dentro
del contexto de la Revolución Islámica. Su ascenso al poder, aunque
breve, simboliza el triunfo de los sectores islámicos radicales sobre
las fuerzas moderadas que habían participado en la caída del shah. La
revolución y sus sucesos no solo transformaron la estructura política
de Irán, sino que también tuvieron repercusiones en toda la región.
El impacto de su presidencia y su
trágica muerte sigue siendo un tema relevante para entender los eventos
que llevaron a la consolidación del poder de los clérigos chiíes en
Irán, con la figura de Ruhola Jomeini como líder máximo. A día de hoy,
la política iraní continúa estando profundamente influenciada por la
visión islámica radical que Radjai defendió durante su vida.
Su asesinato, aunque no logró
tumbar al régimen, supuso un golpe importante en la lucha interna por
el poder dentro de la Revolución Islámica, con los Mujahidines del
Pueblo intentando frenar la consolidación del régimen islamista. La
muerte de Radjai es vista por muchos como un punto culminante en la
lucha política que marcó la historia reciente de Irán.
Con el tiempo, Sayed Alí Jamenei,
quien asumió la presidencia tras la muerte de Radjai, seguiría
consolidando el poder de la República Islámica y desempeñaría un papel
crucial en la política iraní hasta la fecha.
MCN Biografías, 2025. "Mohamed Ali Radjai (1933-1981): El breve pero significativo legado de un presidente iraní". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/radjai-mohamed-ali [consulta: 29 de septiembre de 2025].