Wright, Richard (1908-1960).
Novelista, narrador, crítico social y comentarista afroamericano, nacido cerca de Natchez (Mississippi) el 4 de septiembre de 1908 y fallecido en París el 28 de noviembre de 1960. No tuvo la posibilidad de recibir una educación formal, pues su juventud transcurrió en la pobreza, pero se formó de una manera autodidacta. Wright viajó por todo el país, trabajó aquí y allá para ganarse la vida, hasta que se instaló en Memphis (Tennessee), donde vivió algún tiempo. En 1934, Wright se trasladó a vivir a Chicago, donde desempeñó diversos trabajos y donde poco después comenzó a escribir y a colaborar en el Federal Writers’ Project.
A principios de los años treinta engrosó las filas del Partido Comunista, aunque descontento con la marcha del partido decidió abandonarlo en 1942. Los motivos de su decisión quedaron expuestos en un perspicaz ensayo titulado I tried to be a communist (1942, He intentado ser comunista); el ensayo se recogía junto a cinco de otros tantos antiguos miembros del partido en el libro El Dios que fracasó. Se trasladó a Nueva York en 1937 para editar el Daily Worker, pero Wright se sentía cada vez más obligado a encerrarse y recluirse para no dejarse influir por la propaganda anticomunista que se estaba llevando a cabo en los Estados Unidos. Por ello, abandonó el país y, durante los primeros años 40, vivió principalmente en Méjico, para trasladarse en 1947 a París, donde permaneció hasta su muerte en 1960.
En París, Wright conoció a la elite de los intelectuales franceses, particularmente a J. P. Sartre y los existencialistas (véase existencialismo), así como a los líderes de los movimientos independentistas africanos. Wright padeció las fuertes críticas de los escritores negros más jóvenes, que veían en él a un ya superado escritor de protesta. También sufrió los ataques de los valedores del maccarthismo; sin embargo, Wright defendió su radical pensamiento hasta su muerte.
Prácticamente la totalidad de la producción literaria de Wright es una pregunta sobre el lugar que ocupa el hombre negro en un mundo dominado por los blancos y los problemas derivados de esta circunstancia; por ello, su obra literaria explora la opresión sufrida por los negros americanos y su situación en América. Wright se dio a conocer como escritor en 1938 con la publicación de una colección de relatos titulada irónicamente Uncle Tom’s children (edición aumentada en 1940, Los hijos del tío Tom; que fue traducida por Floreal Mazía en 1946); la finalidad de este conjunto de relatos se centraba en describir por medio de un estilo naturalista la barbaridad sudista y el prejuicio racial existente en América.
A estos cuentos les siguió una novela que le proporcionó a Wright bastante popularidad: la obra titulada Native Son (1940, Hijo nativo; traducida por Pedro Lecuona en 1944 como Sangre negra). En ella se describe la dramática historia del protagonista, un muchacho negro llamado Bigger Thomas, criado en los suburbios de Chicago; Bigger es el fruto de la violenta sociedad contemporánea dominada por el hombre blanco: se ha sometido a tal presión psicológica y social al protagonista que éste llega a responder cruelmente a esta violencia con violencia, es su peculiar manera de contestar al odio y la incomprensión; para Bigger, la única forma de descubrir su propia identidad y exigir sus derechos humanos es a través de la violencia, en la que encuentra un primer estado de autoconsciencia. La novela tiene una gran fuerza y posee una organización característica de las novelas policíacas, en la que se sitúan distintos niveles de alusiones; pero realmente su importancia e interés radican en la temprana creación por parte de Wright de un personaje existencial, a través del cual se impone al lector una visión muy particular del mundo, la del propio protagonista, con la que se pretende que el lector pueda llegar a comprender la sociedad en la que se halla inmerso.
A pesar de haber sido injustamente calificada como una tardía novela del naturalismo americano, Hijo nativo está escrita en torno al determinismo social y la filosofía existencial. En ella Wright fraguó uno de los primeros retratos de héroe existencial de la literatura contemporánea. Después de Hijo nativo, Wright escribió la novela autobiográfica Black boy (1945, Muchacho negro), donde contó la historia de su vocación literaria, en la que encontraba una forma de escapar de la opresión psíquica y física que le producía el gueto durante su juventud. Esta obra tuvo continuidad en su siguiente novela, también autobiográfica, titulada American hunger (1977, Hambre americana; traducida por B. Noguer en 1978). Aunque la novela fue publicada póstuma, la escribió al mismo tiempo que Black boy; sin embargo, no fue publicada en su totalidad hasta 1991 por la crudeza de los temas que trata: sexo, religión y política.
Wright redundó de nuevo en los problemas concretos que asedian la vida de un negro en América bajo el título de The long dream (1948, El largo sueño). Otra de las novelas importantes de Wright fue The outsider (1953, El marginal; traducida por León Mirlas en 1954 como El extraño); se trata de una novela de ideas, centrada en la búsqueda del sentido de la vida y de la identidad por parte de un intelectual negro, pero de una manera mucho más consciente a los protagonistas anteriores; sin embargo, la historia no resulta convincente debido al lenguaje empleado para describir los problemas sociales y políticos derivados de esta búsqueda. Wright retomó nuevamente el tema del análisis psicológico de los personajes, sin aportar nada nuevo, en la novela Savage Holidays (1954, Vacaciones salvajes).
Influido por el movimiento africano de liberación y preocupado por las culturas de los países del Tercer Mundo, Wright escribió dos obras, en las que plasmó sus impresiones de sus viajes por África: Black Power (1954, Poder negro), en la que expresa su desfavorable opinión sobre Ghana; y The color curtain (1956, El telón de color), un informe sobre la Conferencia de Bandung celebrada en Indonesia. La primera obra que escribió Wright se tituló Lawd today (1963, Hoy se juzga) y, aunque fue escrita con anterioridad a Native son, apareció póstuma. Es en cierta manera un documento histórico de la vida en el Side South de Chicago durante la Depresión; en ella, su protagonista, Jake Jackson, sufre los problemas del clásico negro americano. Con la publicación de esta obra se reavivó la eterna polémica acerca del papel que Wright jugó en la narrativa afroamericana, debatiéndose si fue o no el primero en considerar en sus obras la subsistencia del negro americano en un mundo de blancos.
En la restante obra de Wright cabe destacar Pagan Spain (1951, La España pagana), en la que se critica fuertemente la España de Franco; Whiteman, Listen! (1957, ¡Escucha, hombre blanco!), con la que abunda en el tema de las injusticias raciales; Eight Men (1961, Ocho hombres), una magnífica colección de relatos cortos; etc. Wright escribió también un breve texto titulado 12 Million Black Voices (1941, Doce millones de voces negras). La importancia de Wright como escritor afroamericano es indiscutible, pues él fue el primer escritor negro de América que consiguió un rotundo éxito de ventas con su novela Hijo nativo. Tal fue el éxito de la obra que en 1941 fue llevada al teatro por Orson Welles, adaptada por Paul Green y por el mismo Wright; además, se representó en el New York’s St. James Theater con Canada Lee en el papel protagonista y tuvo nada menos que 114 representaciones.