Pawarma (795-770 a.C.): El príncipe libio de Farbeto en el delta egipcio

Pawarma fue un príncipe que vivió en la región del delta egipcio durante el reinado de Sheshonq III, faraón de la XXII dinastía. Aunque su figura no es tan conocida como la de otros monarcas egipcios, su relevancia histórica radica en su papel como líder de Farbeto y en el legado que dejó en la región. Documentado a través de un vaso ceremonial, Pawarma representa una figura importante dentro del contexto histórico de Egipto y Libia durante el periodo en el que vivió.

Orígenes y contexto histórico

Pawarma nació aproximadamente en el año 795 a.C. y pertenecía a una familia que jugó un papel destacado en el ámbito político y militar de la región del delta egipcio. Su nombre personal tiene origen libio, lo que señala la conexión entre los pueblos libios y egipcios en ese periodo histórico. Los libios, que habían mantenido una presencia en Egipto desde tiempos anteriores, ocupaban diversas regiones y ciudades del delta egipcio, como es el caso de Farbeto, donde Pawarma llegó a ser príncipe.

El periodo en el que Pawarma vivió estuvo marcado por un notable dinamismo político y militar. Durante el reinado de Sheshonq III, el faraón de la XXII dinastía, Egipto experimentaba cambios significativos, tanto en el gobierno central como en las relaciones con pueblos vecinos. Fue precisamente en este contexto de transición que Pawarma asumió el control de Farbeto, un enclave estratégico en el delta, donde se consolidó como líder local.

Logros y contribuciones

Pawarma es conocido principalmente por haber sucedido a Iufera en el control de Farbeto, lo que le permitió establecer su dominio sobre esta región del delta egipcio. Su liderazgo en Farbeto durante el reinado de Sheshonq III lo coloca en una posición clave para entender las interacciones entre las dinastías egipcias y las influencias externas, particularmente las libias, que tuvieron un gran impacto en las estructuras políticas y sociales del país.

Uno de los hallazgos más significativos que documentan la existencia de Pawarma es un vaso ceremonial que le fue regalado por sus dos hijos. Este vaso no solo es un testimonio de su vida, sino también una muestra de la tradición y costumbres de la época, en la que los objetos de prestigio y los obsequios familiares servían como una forma de perpetuar el recuerdo y la posición social de los individuos.

Aunque no existen grandes relatos sobre las políticas específicas de Pawarma o sus intervenciones en los conflictos de la región, su figura como príncipe libio refleja una importante característica de la época: la influencia de los pueblos libios en los asuntos de Egipto. Este fenómeno, que se incrementó a lo largo de las dinastías XXII y XXIII, fue un factor clave en la política egipcia de aquellos tiempos.

Momentos clave

A continuación, se presentan algunos momentos clave de la vida y el contexto histórico de Pawarma:

  • 795 a.C.: Nacimiento de Pawarma, en el contexto de las tensiones entre Egipto y las tribus libias.

  • Reinado de Sheshonq III: Durante el gobierno de este faraón, Pawarma asumió el control de Farbeto, sucediendo a Iufera como príncipe de la región.

  • 770 a.C.: Muerte de Pawarma, quien dejó un legado documentado principalmente por el vaso ceremonial recibido de sus hijos.

Estos momentos destacan no solo los hitos de la vida de Pawarma, sino también los de su época, marcada por la interacción entre Egipto y los pueblos libios.

Relevancia actual

A pesar de que la figura de Pawarma no es tan reconocida como la de otros líderes de la época, su historia ofrece una visión invaluable de las dinámicas políticas y sociales que caracterizaron a Egipto durante el periodo de la XXII dinastía. Su legado es fundamental para comprender la influencia libia en el delta egipcio y cómo los líderes locales desempeñaron un papel crucial en el equilibrio del poder durante este periodo.

En la actualidad, el estudio de figuras como Pawarma sigue siendo esencial para entender las complejidades de las relaciones entre Egipto y Libia, dos culturas que, aunque distintas, compartieron un largo periodo de interacción e influencia mutua. La documentación de su existencia, aunque limitada, resalta la importancia de los documentos y objetos arqueológicos como fuentes clave para reconstruir la historia de las épocas antiguas.

La conexión con Sheshonq III

La relación de Pawarma con el faraón Sheshonq III es fundamental para entender el contexto histórico en el que vivió. Sheshonq III, quien gobernó durante la misma época que Pawarma, es una figura de gran relevancia dentro de la XXII dinastía egipcia. Durante su reinado, Egipto atravesó momentos de crisis interna y externa, pero la presencia de líderes como Pawarma en regiones como el delta ayudó a mantener una cierta estabilidad en las fronteras y en las relaciones con las tribus libias.

El liderazgo de Pawarma en Farbeto refleja una faceta interesante del poder local en Egipto y cómo este se interrelacionaba con las autoridades egipcias más centralizadas. Las figuras como Pawarma, que surgieron en territorios periféricos como Farbeto, tuvieron un impacto significativo en el mantenimiento de la cohesión del imperio egipcio frente a las amenazas externas e internas.


Pawarma fue una figura histórica cuya relevancia, aunque limitada en los relatos escritos, refleja la complejidad y las interacciones entre los pueblos libios y egipcios en el periodo de la XXII dinastía. A través de documentos como el vaso ceremonial de sus hijos, podemos entender mejor las dinámicas sociales y políticas de la época y cómo el liderazgo local en regiones periféricas jugaba un papel crucial en la estabilidad del antiguo Egipto.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Pawarma (795-770 a.C.): El príncipe libio de Farbeto en el delta egipcio". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/pawarma [consulta: 20 de junio de 2025].