Olgiati, Francesco (1886-1962).
Filósofo neoescolástico, sacerdote, profesor titular de historia de la filosofía y luego de filosofía en la universidad Católica del Sacro Cuore. Nació en Busto Arsizio (Varese) y murió en Milán. Puso todo su empeño, por una parte, en la afirmación de un tomismo puro, sin concesiones ni compromisos metafísicos, y por otra, en la demostración de la apertura de este sistema filosófico para asimilar los nuevos descubrimientos de la verdad llevados a cabo por las filosofías modernas. Ante todo afirma el primado de la metafísica, esto es, de la concepción de la realidad, pues todo filósofo, aunque niegue la metafísica, tiene su propio concepto de la realidad, que es el punto de partida al menos en el plano del valor. Es lo que él llama «alma inspiradora» dado que de ella se derivará la concepción de todo el sistema filosófico. Según él, a lo largo de la historia se han dado tres conceptos fundamentales de la realidad: Primero, el realismo, que lo entiende como ente (Sócrates, Platón, Aristóteles, Santo Tomás…); segundo, el que concibe la realidad como objeto que aparece, fenómeno, y el tercero, que interpreta la realidad como sujeto, (idealismo), la única metafísica válida es aquella que estudia la realidad como ente, y que , además, es la única capaz de absorber las aportaciones de verdad de otras corrientes filosóficas.
Sus obras principales son: La filosofia di E. Bergson (1914), L’anima di s. Tommaso (1923), L’anima dell’Umanesimo e del Rinascimento (1924), L’idealismo di G. Berkeley e il suo significato storico (1926), Cartesio (1933), I fondamenti della filosofia classica (1950), Benedetto Croce e lo storicismo (1953) y A. Rosmini e la filosofia classica (1955).