Oersted, Hans Christian (1777-1851). El pionero en la conexión entre la electricidad y el magnetismo
Hans Christian Ørsted (1777-1851) fue un físico danés cuya contribución al campo de la ciencia marcó un hito importante en la historia de la física moderna. Nacido en Rudkoebing, Dinamarca, Ørsted es recordado principalmente por descubrir la acción magnética de las corrientes eléctricas, lo que estableció la base para el posterior desarrollo del electromagnetismo. Este descubrimiento abrió nuevas posibilidades en el estudio de los fenómenos eléctricos y magnéticos, siendo fundamental para el desarrollo de teorías y tecnologías que hoy forman parte de la vida cotidiana.
Orígenes y contexto histórico
Ørsted nació en una familia danesa en 1777. Desde joven, mostró un interés profundo por la ciencia, lo que le llevó a estudiar Física y Farmacia en la Universidad de Copenhague. Su formación académica le permitió adentrarse en la investigación científica, lo que lo impulsó a buscar respuestas a preguntas fundamentales sobre la naturaleza. A pesar de su origen en la farmacología, su vocación por la ciencia física fue más fuerte, y sus investigaciones lo posicionaron como uno de los grandes científicos de su época.
En 1794, Ørsted terminó sus estudios y fue nombrado adjunto de la Facultad de Medicina, donde comenzó a desempeñar un papel activo en el mundo académico. Durante los años 1801 a 1803, Ørsted viajó por Holanda, Alemania y Francia, dando conferencias que le permitieron conectar con otros científicos europeos. Estos viajes ampliaron sus horizontes y lo impulsaron a seguir investigando de manera más profunda los fenómenos naturales.
En 1806, fue nombrado profesor de Física en la Universidad de Copenhague, y más tarde asumió el cargo de director del Instituto Politécnico de la ciudad. Durante este periodo, Ørsted se dedicó a la enseñanza y la investigación, trabajando en diversas áreas de la física, como la termodinámica y la electromagnetismo.
Logros y contribuciones
La mayor contribución de Ørsted a la ciencia fue su descubrimiento de la interacción entre la electricidad y el magnetismo. En 1820, mientras realizaba experimentos sobre la electricidad utilizando una pila similar a la construida por A. Volta, Ørsted notó un fenómeno inesperado que cambiaría la historia de la ciencia. Mientras pasaba una corriente eléctrica a través de un hilo conductor, observó que una brújula cercana se desviaba. Este descubrimiento fue fundamental, ya que mostró por primera vez la relación entre los fenómenos eléctricos y magnéticos.
Ørsted repitió incansablemente estos experimentos con pilas más potentes, lo que le permitió observar que la aguja de la brújula se desplazaba hasta formar un ángulo recto con el hilo conductor. Este fenómeno no solo confirmaba la conexión entre electricidad y magnetismo, sino que también indicaba que la dirección de la corriente eléctrica afectaba el comportamiento magnético de los materiales. Si se invertía la dirección de la corriente, el sentido de la aguja de la brújula también cambiaba, lo que permitió a Ørsted deducir que existía una fuerza magnética generada por el paso de una corriente eléctrica a través de un conductor.
Además, Ørsted demostró que este efecto era simétrico, lo que significaba que no solo un cable recorrido por una corriente eléctrica ejercía fuerzas sobre un imán, sino que también un imán podía generar una fuerza sobre un conductor por donde circulaba una corriente eléctrica. Esta observación fue un avance fundamental en la comprensión de la relación entre los campos eléctricos y magnéticos, que más tarde sería clave para el desarrollo de la teoría del electromagnetismo.
Momentos clave
El descubrimiento de Ørsted fue presentado en público en 1820, cuando publicó un folleto titulado Experimenta circa effectum conflictus electri inacum magneticam, que fue rápidamente difundido entre las academias científicas de Europa. La noticia fue comunicada al Instituto de Francia por Arago el 11 de septiembre de 1820. Entre la audiencia se encontraba Ampère, quien poco después desarrollaría una teoría que se considera la base del electromagnetismo.
El impacto del trabajo de Ørsted fue inmediato. Su descubrimiento sirvió de inspiración para científicos como Ampère, quien formuló las primeras leyes cuantitativas del electromagnetismo. A partir de allí, las investigaciones sobre la relación entre la electricidad y el magnetismo se multiplicaron, y los avances en este campo marcaron el camino hacia el desarrollo de tecnologías tan fundamentales como el motor eléctrico y el generador eléctrico.
Además de este descubrimiento clave, Ørsted realizó importantes contribuciones en otros campos de la ciencia. En 1822, obtuvo el primer valor fiable de la compresibilidad del agua, un trabajo que resultó de gran relevancia para la ciencia de la época. En 1825, Ørsted consiguió aislar el aluminio elemental utilizando corrientes eléctricas, un logro que abrió las puertas al estudio de los metales y sus propiedades.
Relevancia actual
El legado de Ørsted sigue siendo relevante en la ciencia y la tecnología moderna. Su descubrimiento sobre la relación entre la electricidad y el magnetismo no solo marcó un hito en la física, sino que también fue la base de la creación de tecnologías que impulsaron la Revolución Industrial y continúan siendo esenciales en la vida diaria.
El electromagnetismo, un campo de estudio que Ørsted contribuyó a fundar, es fundamental para el funcionamiento de una vasta cantidad de dispositivos eléctricos modernos, como motores, generadores, transformadores, y sistemas de comunicaciones. La comprensión de los principios que Ørsted descubrió permite a los ingenieros y científicos diseñar y mejorar tecnologías que son parte integral de la vida contemporánea.
Además, Ørsted dejó un importante legado académico. Fundó una sociedad para la difusión de la ciencia y continuó su trabajo como conferencista. Su pasión por la ciencia y su dedicación al avance del conocimiento le permitió influir en generaciones de científicos. Entre sus obras más destacadas se encuentran Tentamen nomenclaturae chemicae (1814) y Dissertato de forma metaphysices elementaris naturae externae (1799), así como numerosas publicaciones en revistas científicas, como Tidskrift for naturu den skaberne, de la cual fue uno de los principales redactores.
En reconocimiento a su labor científica, Ørsted recibió la Gran Cruz de Dannebrog, la más alta distinción que Dinamarca otorga a sus ciudadanos.
Obras destacadas de Hans Christian Ørsted
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Tentamen nomenclaturae chemicae (1814)
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Dissertato de forma metaphysices elementaris naturae externae (1799)
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Diversos trabajos y publicaciones en Tidskrift for naturu den skaberne, revista científica de la cual Ørsted fue uno de los principales redactores.
Gracias a sus investigaciones y logros, Hans Christian Ørsted sigue siendo una figura central en la historia de la ciencia. Su descubrimiento de la interacción entre electricidad y magnetismo continúa siendo un pilar fundamental en el desarrollo de nuevas tecnologías y teorías científicas.
MCN Biografías, 2025. "Oersted, Hans Christian (1777-1851). El pionero en la conexión entre la electricidad y el magnetismo". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/oersted-hans-christian [consulta: 22 de junio de 2025].