Juan III, Papa (561-574).
Elegido en el año 561 como sucesor de Pelagio I, ocupó el solio hasta el 574. Por haber aprobado el concilio de Constantinopla, que condenó los Tres Capítulos, tuvo que hacer frente al cisma de Aquilea. Durante su pontificado se celebraron dos concilios en la ciudad de Braga en los que se condenaron las herejías de los priscilianistas. Restauró las catacumbas de los Santos Mártires y dispuso que sólo se permitiese el acceso a aquellos fieles que llegaran allí para honrar a los cuerpos de los mártires. Consiguió restablecer la unidad de la iglesia de África con la sede de Roma. Gobernó sabiamente la Iglesia durante trece años y se preocupó por mantener su patrimonio artístico. Su sucesor fue Benedicto I.