Haynes, Elwood (1857-1925).


Inventor estadounidense nacido en Portland (Indiana) el 14 de octubre de 1857 y fallecido en Kokoma (Indiana) el 13 de abril de 1925, célebre por la construcción de uno de los primeros automóviles y por descubrir diversas aleaciones de aplicación industrial.

Tras graduarse en 1876 en el Instituto de Ciencias Industriales de Worcester (Massachusetts), pasó a trabajar como director de la escuela secundaria de su ciudad natal. Ya por entonces comenzó a investigar en la obtención de metales resistentes a la corrosión, y en 1881 dio a conocer una aleación de tungsteno y hierro cromado. En 1884 se trasladó a la Universidad Johns Hopkins de Baltimore con el fin de ampliar estudios en las materias de química, biología y alemán. Regresó a Portland para trabajar como profesor en la Eastern Indiana Normal School. En 1886 fue contratado por la Compañía de Gas Natural de Indiana, y ese mismo año inventó un pequeño termostato de vapor. En 1890 fue nombrado superintendente de la compañía en Chicago, ciudad donde ideó un método para evitar la congelación de las tuberías, que consistía en la deshidratación del gas antes de su introducción en ellas.

En 1891 se interesó por la idea de un coche sin tracción animal y, al año siguiente, se trasladó a Kokomo, donde montó un taller en la Riverside Machine Shop; además, contrató a los hermanos Apperson (Elmer y Edgar), que después se convirtieron en sus socios, para que lo ayudaran en su construcción a cambio de un salario de 40 centavos la hora. Finalmente, el 4 de julio de 1894, condujo por primera vez el nuevo vehículo por las calles de Kokomo a una velocidad de entre 10 y 11 km/h; este primer prototipo iba equipado con un motor de gasolina de un cilindro y un caballo de potencia, y fue el primer automóvil construido en América. El éxito obtenido les llevó a crear en 1898 la Haynes-Apperton Automobile Company para la fabricación en serie, pero en 1902 la sociedad se rompió y Haynes fundó en 1905 su propia compañía, la Haynes Automobile Company. De su factoría llegaron a salir 8.000 vehículos en un año, con un precio que oscilaba entre 1.500 y 3.000 dólares (bastante más caros que el Ford A), y la producción duró hasta su muerte en 1925.

En 1895 introdujo el uso del aluminio en el automóvil y en 1903 construyó una válvula de gas rotativa. Su actividad en la industria automovilística no le impidió desarrollar y patentar nuevas aleaciones: descubrió una de cromo y níquel en 1897, que fue mejorada de impurezas al año siguiente; cobalto, cromo y molibdeno en 1900; y en 1911 la que dio como resultado el descubrimiento del acero inoxidable. En 1910 donó el automóvil pionero al Museo Nacional de los Estados Unidos.

MAH