Gemayel, Amin (1942-VVVV).


Político libanés nacido en Bikfaya en 1942. Fue el primer hijo de Pierre Gemayel, destacado dirigente de la independencia del país mediterráneo (conseguida en 1943), y cabeza de uno de los principales clanes cristiano-maronitas del Estado. Amin Gemayel estudió Ciencias Políticas en la universidad cristiana del Líbano, Saint Joseph (Beirut), donde alcanzó la licenciatura en 1966. No obstante, su primer trabajo fue ocupar una modesta pasantía en el bufete jurídico de un amigo de la familia. En 1968 se afilió a la Katâeb (‘Falange’), partido demócrata-cristiano presidido por su padre, y en 1971 ya era diputado de la Asamblea Nacional.

Los principales problemas del Líbano durante la década de los setenta se centraban en la tortuosa convivencia entre la minoría maronita y la mayoría drusa; el respaldo de Israel a los dirigentes cristianos se basaba en el uso que la OLP hacía de Beirut, verdadera plaza franca y libre del movimiento presidido por Yaser Arafat, ante la anuencia de los drusos, colaboradores con el terrorismo palestino. A pesar de la mediación internacional, en 1975 estalló una verdadera guerra civil entre drusos y maronitas en la que la Asamblea Nacional, dirigida por estos últimos, no paró de solicitar la ayuda internacional ante un conflicto que amenazaba con desangrar al pequeño país de los cedros. El líder más destacado de las milicias maronitas fue el hermano menor de Amin, Beschir Gemayel, lo que le valió, en 1982, ser elegido por la Asamblea Nacional como presidente del país. Investido a primeros de septiembre de ese año, Beschir fue asesinado por terroristas drusos algunas semanas más tarde.

De no ser por el talante de Amin Gemayel, el conflicto del Líbano se hubiese recrudecido hasta límites insospechados; Gemayel supo sobreponerse al dolor de la muerte de su hermano en beneficio de su país. A pesar de no ser tan popular como Beschir entre los maronitas, los drusos le veían como un mal menor, pues no era una figura tan odiada como el militar hostigante que fue su hermano. Por ello, en diciembre de 1982 Amin Gemayel fue elegido por la Asamblea Nacional para ser el nuevo presidente del país. El primer paso de su devenir al frente del Estado fue iniciar las conversaciones con Israel para que fuesen retiradas del Líbano las tropas hebreas desplazadas a principios de 1982 con el pretexto de castigar a la OLP, pero que en realidad habían sometido a casi todo el territorio bajo mando directo de Tel-Aviv. Las negociaciones fueron durísimas, e Israel sólo cedió a cambio de que Amin Gemayel consiguiera el envío de cascos azules de la ONU como ejército supervisor, tanto de la retirada hebrea como de la futura pacificación del Líbano.

Aunque los avances de Gemayel fueron palpables, la inestabilidad del país, todavía sumido en una guerra civil, impidieron la realización de sus planes de estabilización interna. A toda la crisis interna hubo que sumarle, además, una doble invasión del país llevada a cabo en 1988 por Israel (para lo que esgrimió la sempiterna excusa de la OLP), y de Siria (para salvaguardar sus intereses contrarios a Israel). Todas las partes implicadas, salvo la OLP, acudieron bajo la protección de la ONU a las conferencias de Ta’if (Arabia Saudí), donde se logró un acuerdo en 1989 que, sobre todo, puso las bases para el cese de las invasiones y para la paz definitiva en la guerra civil libanesa (1990). Fue la última aparición política de Amin Gemayel, presidente de las conversaciones de Ta’if, aunque había visto como el año anterior era destituido de la presidencia del país, al no llegar a la mayoría de votos necesaria para extender su mandato. El nuevo hombre fuerte del estado, el maronita Michel Aoun, basaba su dirección del país en el apoyo total que recibía por parte del ejército. Tras su retirada de la vida política libanesa, Amin Gemayel se instaló en Beirut, aunque alternó esta residencia con amplias estancias en París, donde ha sido editor de dos diarios libaneses en lengua francesa y donde dirige un bufete de abogados dedicado especialmente a problemas jurídicos entre libaneses y europeos, sobre todo por temas comerciales.