Frigerio, Ismael (1955-VVVV).
Pintor chileno, nacido en Santiago en 1955, figura destacada del grupo de artistas de Chile que desde la década de 1980 desarrollaron su carrera fuera del país andino, ha contribuido a enriquecer el panorama artístico americano con una obra que plasma intensamente su particular visión del nuevo continente.
Formado en la Facultad de Arte de la Universidad de Santiago, donde fue alumno entre otros de Gonzalo Díaz, Ismael Frigerio obtuvo en 1981 la Mención de Honor en el II Concurso de Pintura organizado por el Ministerio de Asuntos Exteriores chileno, y ese mismo año le fue concedida una beca Amigos del Arte gracias a la cual pudo continuar estudios en Nueva York. Desde 1982 residió en esta ciudad, donde coincidió con compatriotas como Samy Benmayor, Jorge Tacla y Carlos Maturana, Bororo, y comenzó su labor creadora al amparo de las nuevas tendencias pictóricas que se daban cita en la gran metrópoli norteamericana. En 1993 fue financiado por el Fondo de Arte de Chile (FONDART) para el montaje en Santiago de Ceremonia de la Memoria, que le dio a conocer a nivel internacional y con la que representó a su país en la Bienal de Johannesburgo de 1995.
La obra de Ismael Frigerio está impregnada de un hondo sentimiento hacia lo americano, entendido esto como una mirada analítica hacia los elementos que a lo largo del tiempo han configurado el presente del continente: sus orígenes, la herencia cultural, sus leyendas y mitos, y especialmente el choque entre las civilizaciones que lo pueblan y las consecuencias que de ello se derivan; en este sentido, fue uno de los primeros artistas que ofreció una visión amplia y libre de prejuicios sobre el fenómeno de la colonización con motivo de la conmemoración del V Centenario del Descubrimiento. Asimismo, y también en relación con su americanismo, reflexiona sobre el tiempo, el ciclo de la vida que acaba en la muerte, presente y pasado que se entremezclan desde una mirada no exenta de nostalgia.
En sus creaciones hay una presencia constante de elementos naturales como el agua, la tierra, los bosques o los astros celestes, que en cierto modo «sacraliza» como hicieron sus antepasados americanos, y juega con la ambivalencia de otros: así sucede con la serpiente, símbolo de fecundidad para las antiguas culturas precolombinas, o del pecado, en la tradición cristiana occidental. En los años noventa trabajó frecuentemente en colaboración con Felipe Zabala e incorporó los medios audiovisuales como soporte para su obra, como en el caso de Anatomía Monumental, que presentó en el Museo Nacional de Bellas Artes de Santiago en 1999.
Desde finales de los años noventa Frigerio compagina la faceta artística con la docente en varios centros de enseñanza de Chile. Algunas de sus obras pueden verse expuestas en el Museo de Arte Contemporáneo de Puerto Rico, el Museo Municipal de Nueva York y el Museo Nacional de Bellas Artes de Santiago.