Franco Dávila, Pedro (1711-1786).
Sabio naturalista ecuatoriano, nacido el 21 de marzo de 1711 en Guayaquil y fallecido en Madrid el 6 de enero de 1786, fundador y director del Museo de Ciencias Naturales de Madrid.
Hijo de español y guayaquileña, a la edad de 24 años emprendió viaje hacia España en un barco cargado de cacao, pero un naufragio lo arrojó a las playas de Iscuandé (Chocó, Colombia). Allí permaneció durante ocho meses y fue instruido por el cura párroco de la localidad en el conocimiento de las ciencias naturales; también allí contrajo matrimonio con Merenciana de Reina, pero, llamado por su padre, regresó a Guayaquil y nunca más volvió a ver a su esposa. En 1737 repitió el viaje, con un cargamento nuevamente de cacao, acompañado esta vez de su padre. Con el dinero recaudado en el negocio, Franco Dávila pasó a Holanda donde compró géneros y bisutería que pensaba vender en Guayaquil a su regreso. Al volver a España se enteró de la muerte de su padre, por lo cual vendió lo que tenía en aquel país y se dispuso a regresar a su patria. Cerca de Jamaica, cayó prisionero de los piratas ingleses, quienes lo dejaron libre a cambio de otros prisioneros. Volvió de nuevo a Holanda, donde tenía todo su depósito, de modo que, rico y joven, se dedicó al estudio del francés, inglés y latín, y a visitar colecciones de ciencias naturales. Desde París, envió a Carl Linneo, un catálogo que Franco había elaborado con sus pertenencias «con su propio mérito», en el cual el científico sueco se inspiró para su famoso método de clasificación de especies. Ya por entonces Franco era famoso, y su colección considerada como una de las más ricas del mundo. En 1760 la ofreció en venta a Carlos III por 50.000 pesos, pero no se la aceptaron. No se dio por vencido; publicó entonces en París su Catálogue Sisthematique et raisonné des curiosités de la Nature et de l’Art qui compossent le Gabinet de M. Davila, en tres tomos. Favorablemente impresionado por esta obra, el rey pidió informes al padre Flórez, que aconsejo su adquisición. El rey compró la colección y nombró a Franco Dávila director de la misma, con un sueldo de mil doblones anuales.
La colección se traslado a Madrid entre 1771 y 1772, y el 4 de noviembre de 1776 se inauguro el Real Gabinete de Historia Natural, primer museo abierto en Madrid, e instalado en el palacio de Francisco Goyeneche, junto a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando; allí vivió también Franco Dávila. El museo se enriqueció con donativos y con envíos de otros objetos procedentes de América, solicitados por el monarca. La importancia de la colección y el interés de Carlos III por las ciencias naturales condujo a la construcción de un nuevo edificio para museo y centro de enseñanza, en el inmueble del actual Museo del Prado, que se dedicó luego a las obras pictóricas. Franco Dávila fue nombrado académico de muchas instituciones europeas y españolas y murió en Madrid el año 1786.
A Franco Dávila se debe también la Instrucción hecha de orden del Rey N. S. para los Virreyes, Gobernadores, Corregidores, Alcaldes Mayores e Intendentes de provincia en todos los dominios de S. M., puedan hacer, escoger, preparar y enviar a Madrid todas las producciones curiosas de la naturaleza (1776).
Bibliografía
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GONZÁLEZ SUÁREZ, F. Historia General del Ecuador. Quito, Casa de la Cultura Ecuatoriana, 1969, 3 t.
MLS