Duarte Frutos, Nicanor (1956-VVVV).


Político paraguayo nacido en Coronel Oviedo (Caaguazú) el 11 de octubre de 1956, que asumió la primera magistratura del país tras su victoria en las elecciones de 2003. Sustituyó en la presidencia a Luis González Macchi, que ocupaba el cargo de forma interina desde la destitución en la primavera de 1999 de Raúl Cubas. Fue reemplazado a su vez por Fernando Lugo, que asumió la presidencia el 15 de agosto de 2008.

Criado en una familia de amplia tradición colorada, el joven Nicanor apenas había cumplido los 14 años cuando se afilió al partido ANR-PC [Asociación Nacional Republicana-Partido Colorado]. Por entonces, cursaba estudios secundarios en su localidad natal hasta que, en 1974, ingresó en el Ejército para cumplir el servicio militar. Después continuó su formación en la universidad para licenciarse, primero en Derecho y, más tarde, en Filosofía. En aquellos años, compaginó los estudios con su primera vocación profesional en el campo de la comunicación: trabajó como reportero deportivo, locutor y articulista de actualidad en algunos medios informativos del país.

Al finalizar la década de los ochenta, Nicanor Duarte disponía de un atractivo perfil profesional como docente de Ética y Sociología en la Universidad Nacional y como abogado de prestigio, amén de como periodista experto en asuntos políticos y culturales. En 1992 completó su palmarés formativo con un máster en Ciencias Políticas. Además de su intensa dedicación al ámbito laboral, Duarte intensificó en estos años su participación en los vericuetos del Partido Colorado. Entre las diferentes corrientes representadas en la formación, eligió adscribirse al oficialismo del presidente Andrés Rodríguez Pedotti y de su sucesor Juan Carlos Wasmosy quien, tras tomar posesión del cargo en el verano de 1993, eligió a Duarte para ocupar la cartera de Educación y Cultura.

El flamante ministro ganó simpatías y bagaje político durante su gestión y, a punto de concluir el mandato de Wasmosy, parecía disponer de apoyos suficientes para presentar su precandidatura a las primarias del partido y ocupar la cabeza de lista de los colorados en las presidenciales. Sus cálculos fallaron y Wasmosy mostró preferencias por otro de sus ministros; una circunstancia que Duarte resolvió abandonando la oficialista ADR [Acción Democrática Republicana] para ingresar en el Movimiento de Reconciliación Colorada [MRC], la facción más conservadora del partido liderada por el ex canciller Luis María Argaña. Por entonces, se libraban en el seno del Partido Colorado enfrentamientos de hondo calado, no sólo entre los oficialistas y los conservadores, sino además, entre ellos y los partidarios del general rebelde Lino César Oviedo, colocado al frente de la Unión Nacional de Colorados Éticos [UNACE].

Oviedo resultó vencedor de las primarias pero fue apartado de la carrera presidencial por su historial de sedición. Finalmente, el aparato del partido tuvo que buscar una solución de consenso y presentar una fórmula mixta en la que estuvieran representadas las distintas sensibilidades de la formación: así, el empresario Raúl Cubas, aliado de Oviedo, ocupó la candidatura presidencial, y Argaña, le acompañó para optar a la vicepresidencia. El tándem funcionó y los colorados reeditaron el triunfo en las presidenciales de mayo de 1988.

Lejos de amainar el temporal interno en el partido, apenas unos días después de la investidura, las luchas de poder acabaron con un magnicidio y la destitución del presidente. Los incidentes se precipitaron cuando Cubas indultó al general Oviedo y los diputados del MRC, la facción del vicepresidente, promovieron en el Parlamento la inconstitucionalidad del decreto. El 23 de marzo de 1999, cuando la Cámara había iniciado ya el proceso para destituir al presidente, pistoleros, presuntamente oviedistas, asesinaron al vicepresidente Argaña. Algunos días después, la revuelta popular obligó a Cubas a abandonar el cargo y tomar el camino del exilio hacia Brasil, país en el que también buscó refugio su mentor, Lino Oviedo.

El presidente del Senado, Luis González Macchi, tomó entonces posesión de la jefatura del Estado de forma interina y constituyó un Gobierno de unidad nacional con el compromiso de garantizar el funcionamiento de las instituciones democráticas. Nicanor Duarte, que había tomado el testigo de Argaña al frente del MRC, volvió a sentarse en el Ministerio de Educación. Las mayores dificultades para el Gabinete de transición llegaron en 2000, con el intento de golpe de Estado de los oviedistas y la victoria que llevó al opositor Julio César Franco, líder del Partido Liberal Radical Auténtico [PLRA] a ocupar la vicepresidencia de la República.

Duarte entendió que había llegado la hora de postular el mejor de sus perfiles políticos y desmarcarse del tradicionalismo colorado. Construyó un modelo renovador, aperturista y eficaz, capaz de conquistar a una parte importante del electorado, que comenzaba a renegar de la vieja guardia del partido. Logró el respaldo de la ADR [Acción Democrática Republicana] del ex presidente Wasmosy y del sector menos ortodoxo del MRC y además contó con el apoyo de los grupos de oposición que aplaudieron su candidatura con el objetivo de evitar que los oviedistas volvieran a manejar los hilos del Partido Colorado. Desde esta plataforma de lanzamiento, Duarte inició su campaña electoral en enero de 2001, después de presentar su cese como ministro de Educación paraguayo. Se impuso con autoridad en las primarias del partido, celebradas en mayo, y se colocó con el cartel de favorito en las encuestas de intención de voto para las presidenciales de 2003.

Tal y como auguraban los sondeos, el 27 de abril el líder colorado se impuso con holgura al independiente Pedro Fadul y al liberal Julio César Franco en la lucha por la jefatura del Estado. El undécimo presidente consecutivo de la ANR-PC asumió el cargo el 15 de agosto de 2003 con la promesa de enfrentar los escándalos de corrupción, que habían salpicado a su predecesor, y de trabajar para salvar el país de su endeudamiento histórico.