Amado, Rosario (s. XX). La dramaturga española del teatro infantil que cautivó a los más pequeños
La figura de Rosario Amado se asocia estrechamente con el teatro infantil español del siglo XX. Aunque su vida personal y profesional permanece en gran medida en la oscuridad, su legado teatral se resume en tres destacadas obras que dejaron una marca en la literatura dramática destinada a los más pequeños. En este artículo, exploraremos su contexto histórico, sus logros y contribuciones al mundo del teatro infantil, así como la relevancia de sus trabajos en la actualidad.
Orígenes y contexto histórico
Rosario Amado vivió en el siglo XX, un periodo en el que el teatro español experimentó importantes transformaciones. Sin embargo, su biografía permanece relativamente desconocida, ya que no se han encontrado datos personales significativos sobre su vida más allá de su faceta como dramaturga. Lo que sí se sabe es que sus contribuciones al teatro infantil fueron marcadas por una clara influencia de las estructuras narrativas populares que se encuentran en los relatos maravillosos.
La autora parece haberse inspirado en el trabajo de Vladimir Propp, un influyente filólogo y folclorista ruso que, en su obra Morfología del cuento (1928), estableció un análisis estructural de los cuentos populares. Propp identificó ciertos elementos y patrones recurrentes en las narraciones, los cuales, según él, eran esenciales para la construcción de los relatos tradicionales. Esta influencia se refleja en las tres obras teatrales que se atribuyen con certeza a Rosario Amado, las cuales siguen las pautas descritas por Propp en su estudio.
En cuanto a su entorno, el siglo XX en España fue un periodo complejo, marcado por la Guerra Civil, la dictadura de Franco y el posterior desarrollo de la democracia. En este contexto, el teatro infantil jugaba un papel importante no solo en el entretenimiento, sino también en la transmisión de valores y la educación de las nuevas generaciones. Amado, al escribir para los más jóvenes, contribuyó al panorama cultural de su tiempo con obras que apelaban a la fantasía y la enseñanza moral.
Logros y contribuciones
A pesar de la escasa información biográfica sobre Rosario Amado, su obra ha logrado perdurar en el tiempo gracias a las tres piezas teatrales que ha dejado como legado. Estas obras se caracterizan por estar diseñadas para un público infantil muy joven, y todas siguen las estructuras narrativas de los relatos maravillosos, como ya se mencionó. Los títulos de sus tres obras más conocidas son El regalo de Reyes de Come-poco, Las trenzas de Doralinda y Más vale maña que fuerza.
El regalo de Reyes de Come-poco
Esta obra es un ejemplo claro del teatro infantil que tiene la finalidad de enseñar lecciones de vida a los pequeños. En El regalo de Reyes de Come-poco, Amado presenta una historia en la que los personajes interactúan con elementos mágicos y fantasticales que les enseñan sobre valores como la generosidad, la amistad y la importancia de la perseverancia. A través de una trama sencilla y comprensible para los niños, la dramaturga logra transmitir un mensaje profundo de una manera accesible.
Las trenzas de Doralinda
En Las trenzas de Doralinda, la dramaturga nos presenta a una protagonista que debe superar diversos obstáculos con su ingenio y valentía. Esta obra, al igual que las demás de Amado, se estructura bajo los principios narrativos que Vladimir Propp describe en su Morfología del cuento. Los personajes de la obra se enfrentan a situaciones llenas de fantasía y magia, que les permiten aprender y crecer emocionalmente a lo largo de la historia.
Más vale maña que fuerza
La tercera obra atribuida a Rosario Amado, Más vale maña que fuerza, hace hincapié en la importancia de la astucia y la inteligencia frente a la fuerza bruta. Este tipo de enseñanzas es común en las narraciones dirigidas a la infancia, donde se busca reforzar los valores de la razón y la reflexión sobre la violencia o el uso de la fuerza física. Al igual que las otras dos obras de la autora, esta pieza también sigue los principios que Vladimir Propp describe en su obra, lo que refuerza su relevancia dentro del teatro infantil de su época.
Estas tres obras representan un aporte significativo al repertorio del teatro infantil en España. Aunque no se tiene constancia de en qué momento y lugar fueron estrenadas, su influencia ha perdurado, como se refleja en la edición de 1960 titulada Teatro infantil, publicada por la Delegación Nacional de la Sección Femenina. Esta obra colectiva incluye las piezas de Rosario Amado, lo que indica que su trabajo fue apreciado y valorado en su tiempo, incluso si la autora no alcanzó la notoriedad que merecía.
Momentos clave en la vida de Rosario Amado
A pesar de que no se tiene mucha información sobre la vida personal de Rosario Amado, sí se pueden destacar algunos momentos clave en la trayectoria de sus obras. Entre estos, el más relevante es, sin duda, la publicación de Teatro infantil en 1960, un recopilatorio que permitió que las obras de la dramaturga fueran leídas por una audiencia más amplia. A través de esta publicación, las piezas de Amado tuvieron una nueva vida y lograron mantenerse vigentes a lo largo de las décadas, siendo utilizadas en diversas ocasiones como material de enseñanza en el ámbito escolar y teatral.
Relevancia actual
El legado de Rosario Amado, aunque limitado en cuanto a cantidad de obras, sigue siendo una pieza importante dentro de la historia del teatro infantil español. Hoy en día, sus piezas se siguen considerando ejemplos de narrativa fantástica y educativa, que no solo buscan entretener a los niños, sino también transmitirles lecciones de vida sobre valores universales como la solidaridad, el ingenio y la sabiduría.
El estudio de su obra también ofrece una oportunidad para comprender cómo el teatro infantil del siglo XX en España estuvo influenciado por teorías literarias y folclóricas, como las de Vladimir Propp, quien propuso un enfoque analítico para los relatos populares que ha influenciado a generaciones de dramaturgos, no solo en España, sino también a nivel internacional.
Las obras de Rosario Amado, si bien no se representan tan frecuentemente como las de otros dramaturgos más conocidos, siguen siendo una referencia importante para aquellos interesados en el teatro infantil de calidad. Son un recordatorio de cómo los cuentos y las fábulas pueden ser una herramienta poderosa para educar y formar el carácter de los más jóvenes.
Bibliografía
HORMIGÓN, Juan Antonio (dir.) Autoras en la Historia del Teatro Español (1500-1994). (Madrid: Publicaciones de la Asociación de Directores de Escena de España, 1996). 2 Vols.