Jordi Savall (1941–VVVV): Un Maestro de la Música Antigua y la Viola da Gamba
Jordi Savall (1941–VVVV): Un Maestro de la Música Antigua y la Viola da Gamba
Introducción y primeros años
Jordi Savall, nacido en Igualada (Barcelona) el 1 de agosto de 1941, es una de las figuras más destacadas de la música antigua a nivel mundial. Su vida y obra se han forjado sobre una profunda dedicación al estudio e interpretación de la música medieval, renacentista y barroca, en particular con instrumentos de la época como la viola da gamba. Desde su infancia, Savall mostró una notable predisposición para la música, lo que lo llevó a iniciar sus estudios musicales a una edad temprana, marcando el comienzo de una carrera que revolucionaría la interpretación de la música antigua.
Crecer en una familia de ámbito catalán le permitió, desde joven, tener acceso a un entorno cultural propicio para desarrollar su vocación. Sin embargo, fue su temprano interés por el violonchelo lo que lo introdujo en el mundo de la música académica. A los seis años comenzó a estudiar música y, más tarde, ingresó al Conservatorio de Barcelona, donde se formó como violonchelista. Su dedicación y talento fueron rápidamente reconocidos, pero lo que realmente definiría su futuro como músico fue su posterior interés por la música antigua y el cambio en su enfoque interpretativo.
Formación y especialización
Una vez completada su formación inicial en el Conservatorio de Barcelona, Savall sintió la necesidad de profundizar más en las tradiciones musicales del pasado. Fue en ese momento cuando decidió especializarse en música antigua, un campo que en ese entonces no era tan popular ni ampliamente explorado en el ámbito académico. Decidió viajar a Bruselas, donde se sumergió en el estudio de la viola da gamba bajo la tutela del renombrado maestro Wieland Kuijken, un referente en la interpretación de instrumentos antiguos. Esta etapa fue crucial en su desarrollo artístico, ya que Kuijken le transmitió una profunda comprensión sobre la importancia de la fidelidad a la música original.
Sin embargo, su formación no se limitó a Bruselas. En 1967, Savall se trasladó a la Schola Cantorum Basiliensis, en Suiza, una de las instituciones más importantes en el campo de la música antigua. Allí continuó su aprendizaje bajo la dirección de August Wenziger, otro gran maestro en el campo de la música histórica. Fue en Basilea donde Savall perfeccionó sus habilidades como solista y docente, obteniendo en 1970 el diploma de solista y profesor en música antigua.
Inicios de su carrera profesional
Tras completar su formación, Savall dio sus primeros pasos como intérprete profesional. A pesar de la competencia en el mundo de la música clásica, su enfoque pionero hacia la interpretación de música antigua, especialmente con la viola da gamba, le permitió destacarse rápidamente. A medida que fue perfeccionando su técnica y conocimientos, su reputación como intérprete comenzó a extenderse, no solo en Europa, sino también en el resto del mundo.
A mediados de la década de 1970, Savall comenzó a ser reconocido por su habilidad para combinar la musicalidad con un enfoque minucioso hacia la interpretación fiel de las partituras originales. Esto le permitió posicionarse como un referente en el mundo de la música antigua, especialmente en lo relacionado con el repertorio medieval, renacentista y barroco.
Fundación de Hespèrion XX
El mayor punto de inflexión en la carrera de Jordi Savall ocurrió en 1974, cuando fundó junto a su esposa, la soprano Montserrat Figueras, y otros músicos de renombre, el grupo vocal e instrumental Hespèrion XX, que posteriormente se conocería como Hespèrion XXI. Este grupo no solo se convirtió en una de las agrupaciones más innovadoras en la música antigua, sino que también permitió a Savall posicionarse como uno de los líderes de la interpretación de la música del Renacimiento y Barroco.
Hespèrion XX fue diseñado para reunir a músicos de diversas nacionalidades y formaciones, con un énfasis en instrumentos antiguos como la viola da gamba, la flauta de pico y el laúd. El grupo fue una de las primeras formaciones en dar un enfoque tan riguroso y preciso en la interpretación de la música medieval y renacentista, al mismo tiempo que ofrecía una sonoridad fresca y emocionalmente profunda.
A través de este conjunto, Savall logró recuperar piezas olvidadas y darles nueva vida, particularmente en el repertorio español anterior al siglo XVIII. Esta combinación de musicalidad y rigurosidad histórica se convirtió en una de las características distintivas de la carrera de Savall y le permitió ganar reconocimiento internacional como uno de los más destacados intérpretes de música antigua de su generación.
Reflexión sobre su enfoque musical
La obra de Jordi Savall se distingue por su compromiso con la investigación y la recuperación del repertorio antiguo, utilizando instrumentos originales de la época, lo que le ha permitido ofrecer interpretaciones fieles al espíritu y sonoridad de las composiciones originales. Además de su destreza como intérprete, Savall ha sido un incansable defensor de la educación musical y la preservación del patrimonio musical. Con cada uno de sus proyectos, desde Hespèrion XX hasta La Capella Reial de Catalunya, ha buscado dar visibilidad y revitalizar compositores y obras que habían caído en el olvido.
Al mismo tiempo, Savall ha logrado una estrecha colaboración con otros músicos y compositores que le han permitido explorar la profundidad emocional y estética de la música antigua. Este enfoque lo ha colocado como una figura clave en la vanguardia de la música histórica, donde ha sido reconocido tanto por la crítica como por el público general.
La expansión y consolidación de su carrera
Después de establecerse como una figura prominente en el mundo de la música antigua, la carrera de Jordi Savall continuó su expansión a lo largo de las décadas de 1980 y 1990, consolidándose como una de las figuras más influyentes en la interpretación histórica de la música. En 1987, fundó otro grupo clave en su carrera, La Capella Reial de Catalunya, un conjunto vocal e instrumental que se convertiría en uno de los pilares de su repertorio y su legado. Este grupo se distinguió por la variedad de solistas que integraba, abarcando diversos géneros de la música antigua, desde el renacimiento hasta el barroco.
La creación de Le Concert des Nations en 1989 representó otro paso fundamental para Savall, pues le permitió ampliar su visión interpretativa al incorporar una orquesta barroca. Este conjunto se especializó en la música del siglo XVIII, convirtiéndose en una de las agrupaciones más prestigiosas para interpretar el repertorio de esa época, incluyendo compositores como Bach, Haendel y Vivaldi. La orquesta realizó giras internacionales y grabó numerosos discos, muchos de los cuales fueron aclamados por su fidelidad a las partituras originales y por la riqueza sonora que aportaban a la música barroca.
El compromiso de Savall con la investigación histórica ha sido una constante a lo largo de su carrera. Siempre se ha preocupado por el rescate de obras que habían caído en el olvido, como es el caso de las óperas Il burbero di buon cuore y Una cosa rara del compositor valenciano Vicent Martín i Soler, que fueron recuperadas por el maestro y su orquesta. Este enfoque no solo ha puesto en valor el patrimonio musical español, sino que también ha permitido a Savall hacerse un nombre como uno de los principales divulgadores de la música barroca y de épocas anteriores.
Reconocimientos y premios
La excelencia artística y el esfuerzo de Savall por revivir la música antigua le han valido una serie de reconocimientos internacionales. Sin duda, uno de los momentos más significativos de su carrera fue su participación en la película Tous les matins du monde (1991), dirigida por Alain Corneau. En esta obra, Savall interpretó la banda sonora, compuesta principalmente por piezas de Marin Marais, Sainte-Colombe y otros compositores de la época barroca. La película, que exploraba la vida de Marais, le otorgó un reconocimiento global y amplió aún más su influencia en el mundo de la música.
Savall ha recibido numerosos premios a lo largo de su carrera, entre los que destacan el Diapason d’Or y el César francés a la mejor banda sonora. En 2003, su incansable labor como intérprete y director fue recompensada con el Premio de Honor de la Crítica de la Discografía Alemana, un galardón que subraya su contribución al mundo de la música clásica y, en particular, a la música antigua. Su habilidad para combinar la interpretación de calidad con la preservación de las tradiciones musicales ha sido un aspecto esencial que ha llevado a Savall a ser considerado una de las figuras más respetadas y queridas en la música clásica contemporánea.
Discografía y proyectos destacados
La discografía de Jordi Savall es vasta y variada, abarcando una impresionante cantidad de discos que van desde obras del Renacimiento hasta el Barroco. Su producción no solo ha tenido un gran impacto en la música clásica, sino que también ha sido fundamental para el redescubrimiento de obras olvidadas. Con su agrupación Hespèrion XX y su orquesta Le Concert des Nations, ha grabado más de un centenar de discos, muchos de los cuales se han convertido en referencias dentro de la interpretación histórica de la música antigua.
Entre sus discos más destacados se encuentran obras como El Barroco Español, que abarca una recopilación de música española de los siglos XVI y XVII, y La Música en el Tiempo de Cristóbal Colón, que ofrece una interpretación de la música de la época de los Reyes Católicos. Estos trabajos destacan por su fidelidad histórica, y su capacidad para devolver a la vida la música olvidada de épocas pasadas.
Otro aspecto significativo de su discografía es la importancia que Savall le ha dado a la música sefardí y a la recuperación de la tradición judía en la península ibérica. Díaspora Sefardí: Romances y Música Instrumental es una muestra de su dedicación a este repertorio y su trabajo para preservar las raíces musicales de las comunidades judías en la región.
La participación de Savall en el rescate de compositores españoles olvidados, como el mencionado Vicent Martín i Soler, y su amplia colaboración con otros músicos renombrados, han sido un sello distintivo de su carrera. Esta labor de investigación y divulgación no solo ha rescatado piezas olvidadas, sino que ha permitido que muchos compositores renacentistas y barrocos reciban el reconocimiento que merecen.
Reflexión sobre su legado
Jordi Savall ha sido un pionero en la interpretación de la música antigua, contribuyendo de manera significativa a la renovación y el resurgimiento de un repertorio que, en muchos casos, había quedado en el olvido durante siglos. Su enfoque riguroso, su dedicación a la investigación histórica y su destreza técnica le han permitido ser una figura esencial en la música clásica contemporánea. Pero su legado va más allá de su destreza como intérprete; su labor de preservación y difusión del patrimonio musical de la humanidad ha dejado una huella imborrable en la historia de la música.
La relevancia de Savall no solo se encuentra en sus interpretaciones, sino también en su visión educativa y cultural. A través de sus enseñanzas y su trabajo con jóvenes músicos, ha asegurado la transmisión de sus conocimientos a futuras generaciones, lo que garantiza que su enfoque y su pasión por la música antigua sigan vivos en la actualidad.
En definitiva, el impacto de Jordi Savall en el mundo de la música antigua es incuestionable. A lo largo de su carrera, ha logrado transmitir no solo el conocimiento musical de las épocas pasadas, sino también la emoción y el sentido de la tradición que las obras de aquellos tiempos contienen. Su legado, a través de su discografía, sus grupos musicales y su influencia global, asegura que la música antigua siga siendo una parte vital de la cultura musical contemporánea.
MCN Biografías, 2025. "Jordi Savall (1941–VVVV): Un Maestro de la Música Antigua y la Viola da Gamba". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/savall-jordi [consulta: 18 de octubre de 2025].