Pedro Messía de la Cerda (1700-1783): Virrey de Nueva Granada y militar destacado

Pedro Messía de la Cerda fue una figura clave de la administración colonial española durante el siglo XVIII, un periodo de transformaciones políticas y sociales en América Latina. Nacido el 16 de febrero de 1700 en Córdoba, España, Messía de la Cerda se destacó tanto en el ámbito militar como en la gestión política de vastos territorios del Imperio Español, especialmente en el virreinato de Nueva Granada, donde desempeñó un papel fundamental en su desarrollo y en la resolución de crisis.

A lo largo de su vida, fue testigo y actor de importantes eventos que marcaron la historia de las colonias españolas. Su carrera se caracterizó por su habilidad en la administración, sus reformas y su lucha contra diversos conflictos, tanto internos como externos. A través de su obra, se puede comprender la compleja realidad de los territorios coloniales y las decisiones que modelaron el destino de estas regiones.

Orígenes y contexto histórico

Pedro Messía de la Cerda nació en Córdoba, una de las ciudades más importantes del sur de España, que en ese momento formaba parte del reino de Andalucía. Su familia, de la nobleza media, proporcionó la base para que pudiera acceder a una carrera militar y administrativa. A los 17 años, ingresó en la Real Compañía de Guardias Marinas, una institución clave en la formación de oficiales navales. Esta decisión marcó el inicio de su carrera, que lo llevaría a destinos lejanos y lo convertiría en uno de los más destacados oficiales de la Armada Española de su tiempo.

En 1720, a tan solo 20 años, Messía de la Cerda comenzó su carrera en el Nuevo Mundo con un viaje a las Indias. Fue parte de una expedición que se dirigía hacia Pensacola, un asentamiento estratégico en el Golfo de México. Este viaje marcó el inicio de su participación en una serie de misiones militares en América, donde fue testigo de la complejidad de la vida colonial, de las luchas internas y de las amenazas externas.

Logros y contribuciones

A lo largo de su carrera, Messía de la Cerda mostró ser un hombre de acción, y sus logros no solo fueron militares, sino también administrativos. Entre sus primeros pasos como militar, se destaca su participación en la lucha contra el contrabando en las costas de Cartagena y Portobelo. Estos puertos eran clave en el comercio transatlántico, y su intervención fue crucial para asegurar el control español sobre las rutas comerciales.

Messía de la Cerda también estuvo involucrado en las campañas militares que llevaron a la conquista de Cerdeña y a la reconquista de Sicilia, dos territorios cruciales en el Mediterráneo, lo que reforzó su posición dentro del Ejército Español. Sin embargo, sus años de mayor relevancia llegaron cuando fue designado para asumir el virreinato de Nueva Granada en 1761.

En Nueva Granada

El virreinato de Nueva Granada, que abarcaba gran parte de lo que hoy son Colombia, Ecuador, Panamá y Venezuela, estaba sumido en una crisis económica y política cuando Messía de la Cerda asumió el cargo. Las cajas reales se encontraban vacías, y el país enfrentaba una serie de desafíos internos y externos. Ante esta situación, Messía de la Cerda implementó varias reformas que buscaban estabilizar la región.

Uno de sus logros más importantes fue el impulso a la educación. En su mandato, se creó el primer colegio femenino del Nuevo Mundo, una muestra de su visión progresista para la época. Además, estableció cátedras de matemáticas en los principales centros de enseñanza, fomentando el desarrollo de la ciencia y la educación en el virreinato. Su administración también se destacó por mejorar la infraestructura de comunicación y transporte, especialmente a través de la construcción de caminos que conectaban ciudades como Santa Fe, Tunja, Pamplona y Caracas.

Momentos clave

A lo largo de su mandato, Pedro Messía de la Cerda vivió momentos decisivos tanto en lo político como en lo social. Entre los más destacados se encuentran:

  1. Expulsión de los Jesuitas (1767): Uno de los momentos más difíciles de su mandato fue la aplicación de la orden real que expulsaba a todos los miembros de la Compañía de Jesús de los territorios del virreinato. Esta medida fue parte de una serie de decisiones tomadas por el monarca Carlos III en un contexto de tensiones con la Iglesia. Aunque la decisión fue polémica, Messía de la Cerda cumplió la orden, lo que llevó a la creación de la primera biblioteca pública en Nueva Granada con los libros confiscados de los colegios jesuitas.

  2. Sublevación en Quito: Otro evento significativo de su mandato fue la sublevación popular en Quito, donde miles de personas se alzaron contra el sistema colonial, exigiendo la expulsión de los españoles. La violencia que acompañó a este levantamiento obligó a las autoridades coloniales a buscar refugio en las iglesias mientras la ciudad caía en manos de los sublevados. Este evento reflejó las tensiones sociales y económicas que caracterizaban las colonias españolas.

  3. Reformas económicas y fiscales: Durante su administración, Messía de la Cerda implementó políticas que ayudaron a mejorar las finanzas del virreinato. Se destacan la creación del Estanco del aguardiente de caña, la renta sobre el tabaco y el establecimiento de fábricas de pólvora y salitre. Sin embargo, algunas de estas medidas, como el Estanco del aguardiente, fueron muy impopulares y provocaron protestas, lo que llevó a una eventual revocación de la medida.

Relevancia actual

La figura de Pedro Messía de la Cerda sigue siendo importante hoy en día, ya que representa una etapa de transición en la administración colonial española. Su enfoque en la educación, las reformas económicas y la infraestructura sentaron las bases para el desarrollo futuro de la región. Su legado, aunque marcado por las tensiones sociales y la resistencia popular, también es un testimonio de los esfuerzos por modernizar y consolidar el control colonial en una época de grandes desafíos.

Además, su mandato se enmarca dentro de una serie de reformas más amplias impulsadas por la Casa de Borbón en el siglo XVIII, conocidas como las reformas borbónicas. Estas reformas, que se extendieron a lo largo del Imperio Español, buscaban una mayor centralización y eficiencia administrativa, pero también generaron descontento en las colonias debido a las cargas fiscales y a la creciente intervención del poder central en los asuntos locales.

La despedida de Pedro Messía de la Cerda

En 1772, tras más de una década de gobierno en Nueva Granada, Pedro Messía de la Cerda entregó el bastón de mando por voluntad propia. La situación en la audiencia de Quito, uno de los focos más conflictivos de su virreinato, marcó el fin de su administración. Regresó a España, donde pasó los últimos años de su vida. Murió en Madrid en 1783, dejando tras de sí un legado complejo y lleno de contradicciones.

A pesar de las dificultades que enfrentó durante su mandato, Messía de la Cerda fue un hombre que trató de abordar los problemas de su tiempo con soluciones prácticas y reformas estructurales. Su figura sigue siendo objeto de estudio para entender mejor las dinámicas de poder, las tensiones coloniales y la evolución de las sociedades coloniales en América.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Pedro Messía de la Cerda (1700-1783): Virrey de Nueva Granada y militar destacado". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/messia-de-la-cerda-pedro [consulta: 19 de octubre de 2025].