Francisco Jorge Hernández (1816-1885): Médico y político ilustre de Puerto Rico
Francisco Jorge Hernández (1816-1885): Médico y político ilustre de Puerto Rico
Francisco Jorge Hernández, nacido en abril de 1816 en Toa Baja y fallecido en San Juan el 21 de agosto de 1885, es considerado uno de los más notables médicos y políticos puertorriqueños del siglo XIX. Su figura destaca no solo por los logros en el ámbito de la medicina, sino también por su contribución al bienestar social y su activa participación en la política de la isla.
Orígenes y contexto histórico
Proveniente de una familia acomodada de campesinos, Francisco Jorge Hernández tuvo la oportunidad de formarse académicamente gracias a una beca en el renombrado Colegio Seminario de San Juan. Allí comenzó a demostrar un interés profundo por las ciencias, impulsado por su aguda inteligencia y sensibilidad hacia los problemas sociales de su entorno. La frágil salud que lo acompañó desde joven lo llevó a interesarse por la medicina, motivación que marcó su destino.
Durante esta época, Puerto Rico se encontraba bajo dominio español y carecía de instituciones de enseñanza superior, lo que obligó a muchos jóvenes a trasladarse a otras regiones para completar su formación académica. Así, Hernández se matriculó en la Universidad de La Habana, donde obtuvo el grado de bachiller en medicina. Posteriormente, continuó sus estudios en la Universidad Central de Madrid, una de las instituciones más prestigiosas de la época, y donde consolidó sus conocimientos y habilidades en el campo médico.
Logros y contribuciones
De regreso a Puerto Rico en 1846, Francisco Jorge Hernández fue investido como doctor, iniciando así una carrera que lo convertiría en un referente dentro de la medicina puertorriqueña. Su reputación como médico sobresaliente lo llevó a ser nombrado médico personal de los gobernadores de la isla, un cargo de gran prestigio y responsabilidad. Sin embargo, su verdadero compromiso se manifestaba en la atención desinteresada a los sectores más necesitados de la sociedad.
Hernández brindó sus servicios médicos en asilos, prisiones y hospitales, siempre dispuesto a ofrecer ayuda donde más se requería. Su labor durante la devastadora epidemia de cólera que azotó la isla en 1855 fue ejemplar, mostrando un incansable espíritu de servicio y entrega.
Además, su preocupación por los enfermos mentales lo llevó a formar parte de una comisión que estableció un Sanatorio para estas personas, quienes hasta ese momento se encontraban completamente desamparadas. Su visión humanitaria también lo impulsó a proyectar la creación de Casas Escuelas, iniciativas educativas destinadas a mejorar las condiciones de vida de la población.
Entre sus múltiples aportes, destaca la fundación, junto con el doctor Romero y Togores, de una Escuela de Agricultura, un proyecto que buscaba potenciar el desarrollo económico y social de Puerto Rico mediante la formación de profesionales capacitados en el sector agrícola.
Momentos clave
A lo largo de su vida, Francisco Jorge Hernández asumió diversos cargos públicos y profesionales que reflejan su compromiso con el progreso de la sociedad puertorriqueña. A continuación, se destacan algunos de los más relevantes:
-
Comisario del Asilo de Beneficencia, donde velaba por el bienestar de los más desfavorecidos.
-
Vocal de la Junta de Instrucción Pública, participando activamente en la mejora del sistema educativo de la isla.
-
Presidente de la Junta para el establecimiento de la Escuela Profesional, impulsando la creación de nuevas instituciones educativas.
-
Presidente de la Real Subdelegación de Medicina y Cirugía, consolidando su liderazgo en el ámbito médico.
Su compromiso político también tuvo gran relevancia en su vida. En 1870, tras la revolución española de 1868 que introdujo un régimen de libertades, Hernández fue elegido diputado provincial, defendiendo los ideales del Partido Liberal. Sin embargo, la restauración borbónica en 1874 lo llevó a renunciar a su cargo, mostrando coherencia con sus principios liberales moderados.
Relevancia actual
Francisco Jorge Hernández dejó una huella profunda en la historia de Puerto Rico, no solo por sus contribuciones como médico, sino también por su compromiso con la justicia social y el desarrollo educativo de la isla. Su labor en momentos críticos, como la epidemia de cólera, lo convirtió en un símbolo de entrega y dedicación, mientras que sus iniciativas educativas y sanitarias marcaron el inicio de cambios significativos para la población.
El reconocimiento a sus méritos fue tangible en su época: fue galardonado con la Cruz de Carlos III y, poco antes de su fallecimiento, recibió la Gran Cruz de Isabel La Católica, máximas distinciones que honran su incansable labor.
La figura de Hernández continúa siendo un referente de ética profesional y compromiso social, valores que siguen inspirando a generaciones de médicos y profesionales en Puerto Rico. Su historia nos recuerda la importancia de la vocación de servicio y la búsqueda constante del bienestar común como pilares fundamentales para el progreso de cualquier sociedad.
El legado de Francisco Jorge Hernández trasciende el tiempo, consolidándolo como uno de los personajes más destacados del siglo XIX en Puerto Rico y un ejemplo de dedicación, integridad y altruismo.
MCN Biografías, 2025. "Francisco Jorge Hernández (1816-1885): Médico y político ilustre de Puerto Rico". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/hernandez-francisco-jorge [consulta: 29 de septiembre de 2025].