Dono I, Papa y Santo (s. VII). El Papa que restauró y unificó la Iglesia Romana

Dono I, conocido también por diversos nombres como Donino, Cono, Domnione y Cunione, es una figura clave de la historia papal del siglo VII. Su pontificado, aunque breve, marcó un momento crucial para la Iglesia Romana, no solo por sus restauraciones y reformas, sino también por su intervención en el cisma de Eugenio y su implicación en la consolidación del poder papal durante tiempos de transición. En este artículo, exploraremos sus orígenes, los logros y contribuciones de su papado, así como su legado y la controversia en torno a su canonización como santo.

Orígenes y contexto histórico

Dono I nació en una época de grandes turbulencias para la Iglesia, en un contexto de tensiones internas y externas que afectaban tanto a la política como a la religión en Europa. Su padre, Mauricio, fue una figura importante que, aunque no es ampliamente conocida en la historia, desempeñó un papel en el entorno familiar que permitió que Dono I ascendiera a posiciones de poder dentro de la Iglesia.

Durante este periodo, el papado atravesaba un momento de consolidación de su poder frente a los reinos bárbaros y el Imperio Bizantino. El Imperio Romano de Occidente había caído en el siglo V, y Europa estaba sumida en un proceso de reconstrucción política y religiosa. En este escenario, la Iglesia Romana se erigía no solo como una autoridad religiosa, sino también como un actor clave en la política del continente. Dono I asumió el papado en un momento crítico, cuando la Iglesia estaba lidiando con varias divisiones internas.

Logros y contribuciones

Dono I fue elegido papa en agosto y consagrado en noviembre de 676, siendo el líder de la Iglesia durante un periodo que, aunque corto, dejó huella. Su pontificado fue particularmente relevante debido a varias reformas y acciones significativas que emprendió para restaurar la unidad y el prestigio de la Iglesia Romana. Entre sus principales logros se incluyen:

Terminación del cisma de Eugenio

Uno de los eventos más destacados durante el papado de Dono I fue la resolución del cisma iniciado durante el papado de Eugenio. Este cisma había causado una división en la Iglesia, especialmente en relación con la comunión y la lealtad a la sede romana. Durante su papado, Dono I logró restablecer la unidad, sometiendo a la Iglesia de Rávena y al obispo Reparato, lo que permitió sanear las tensiones internas y devolver la estabilidad al papado. Esta victoria sobre el cisma representó no solo un logro diplomático, sino también un fortalecimiento del papado como autoridad central dentro de la cristiandad.

Restauración de la Iglesia de San Pablo

Otro de los logros de Dono I fue su intervención en la restauración de la iglesia de San Pablo, una de las basílicas más importantes de Roma. Durante su papado, se realizaron importantes trabajos de renovación que incluían la restauración y embellecimiento de la iglesia. Además, fue responsable de adornar el atrio conocido como el «Paraíso» de la iglesia de San Pedro, un lugar emblemático para la comunidad cristiana. Este gesto de embellecimiento no solo tuvo un propósito estético, sino también religioso, ya que los mármoles preciosos empleados en las restauraciones reflejaban la riqueza y la gloria de la Iglesia.

Ordenaciones sacerdotales

Un aspecto fundamental de su pontificado fue su acción pastoral, reflejada en las numerosas ordenaciones que realizó. Durante su papado, Dono I ordenó a seis obispos, diez presbíteros y cinco diáconos, fortaleciendo así la estructura eclesiástica de la época. Estas ordenaciones fueron esenciales para asegurar la estabilidad del clero y la expansión de la influencia papal en diferentes regiones de Italia y más allá.

Momentos clave del pontificado de Dono I

A lo largo de su corto pero significativo pontificado, Dono I vivió varios momentos que definieron su legado. Algunos de los más importantes incluyen:

  1. Consagración como Papa (676): En noviembre de 676, Dono I fue consagrado como papa. Este evento marcó el inicio de un papado que sería crucial para la restauración de la unidad en la Iglesia.

  2. Resolución del cisma de Eugenio: Durante su papado, logró terminar el cisma que había comenzado en tiempos de Eugenio, consolidando la posición del papado sobre otras iglesias disidentes.

  3. Restauración de la iglesia de San Pablo: Este fue uno de los logros arquitectónicos más relevantes de su pontificado, reforzando la importancia de Roma como centro religioso.

  4. Muerte (678): Dono I falleció el 11 de abril de 678, un hecho que dejó un vacío de poder en un periodo ya de por sí inestable para la Iglesia.

Relevancia actual de Dono I

El legado de Dono I, aunque breve, es relevante para comprender la historia del papado en el siglo VII. Su resolución del cisma de Eugenio y su intervención en la restauración de las iglesias más importantes de Roma le otorgan un lugar en la historia eclesiástica como un papa que contribuyó a la estabilidad de la Iglesia Romana en un momento clave. Sin embargo, no todos los historiadores coinciden en reconocerlo como santo, lo que añade una capa de complejidad a su figura.

En la actualidad, la Iglesia no ha canonizado oficialmente a Dono I, aunque su figura sigue siendo objeto de estudio y reflexión para aquellos interesados en la historia del papado. A pesar de las controversias, su papel como restaurador y unificador es indiscutible, y su influencia perdura en las estructuras eclesiásticas que ayudó a consolidar.

Un papa en el olvido o una figura divina

El debate sobre la santidad de Dono I refleja las complejidades del proceso de canonización en la Iglesia. Si bien algunas fuentes históricas no le otorgan el título de santo, su dedicación a la Iglesia, sus reformas y su intervención en momentos críticos le otorgan una importancia que sigue viva en los estudios sobre el papado del siglo VII.

Conclusión

El papado de Dono I, aunque breve, fue un periodo de restauración y consolidación para la Iglesia Romana en un momento de gran incertidumbre. A través de sus esfuerzos para resolver el cisma de Eugenio, sus reformas arquitectónicas y sus acciones pastorales, dejó una huella perdurable en la historia de la Iglesia. Aunque no todos lo reconocen como santo, su figura sigue siendo un símbolo de unidad y restauración en los primeros siglos del papado.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Dono I, Papa y Santo (s. VII). El Papa que restauró y unificó la Iglesia Romana". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/dono-i-papa-y-santo [consulta: 28 de septiembre de 2025].