Alfonso Armada y Comyn (1920-2013): El General de División que Participó en el 23-F

Alfonso Armada y Comyn (1920-2013): El General de División que Participó en el 23-F

Alfonso Armada y Comyn (1920-2013) fue un destacado militar español cuya carrera se vio marcada por una importante implicación en el golpe de estado del 23 de febrero de 1981. A lo largo de su vida, Armada pasó de ser un oficial leal al régimen franquista a convertirse en una figura central de uno de los episodios más oscuros de la historia reciente de España: el intento de golpe de estado de 1981. A través de este artículo, se explorarán los orígenes, logros, contribuciones y la relevancia histórica de Alfonso Armada, así como el legado de su participación en los eventos que marcaron una época en la política y la historia de España.

Orígenes y Contexto Histórico

Alfonso Armada nació el 12 de febrero de 1920 en Murcia, España, en una familia de cierta relevancia social y militar. Desde joven, mostró un interés particular por la carrera militar, lo que le llevó a ingresar al Ejército en febrero de 1937, en plena Guerra Civil Española, a la edad de 17 años. En ese entonces, el conflicto bélico entre los republicanos y los sublevados franquistas estaba en su fase más álgida. Armada se alistó como alférez provisional, lo que le permitió iniciar su carrera en el Ejército de Tierra bajo el régimen de Francisco Franco.

Tras la guerra, Armada continuó su formación y desarrollo dentro del Ejército, lo que le permitió ascender a varios puestos importantes. Fue destinado a la Secretaría del Ministerio del Ejército, lo que le dio una posición destacada dentro de la estructura militar española de la posguerra. En esta etapa, comenzó a tejer una red de contactos que le permitiría jugar un papel crucial en los acontecimientos de los años siguientes.

Logros y Contribuciones

Uno de los logros más importantes de Alfonso Armada fue su rol como profesor de don Juan Carlos de Borbón, durante su preparación en la Academia General Militar. Esta relación lo conectó estrechamente con la futura monarquía española, ya que, cuando Juan Carlos ascendió al trono en 1975, Armada continuó siendo una figura relevante en la corte. De hecho, fue designado como jefe de la Secretaría del príncipe Juan Carlos en 1965, un cargo que le permitió estar cerca del monarca y desempeñar un papel clave en los primeros años del reinado de Juan Carlos I.

Su carrera continuó con una serie de ascensos dentro del Ejército. En 1977, fue designado profesor principal de la Escuela Superior del Ejército, una de las instituciones más prestigiosas dentro de la formación militar española. Posteriormente, se convirtió en gobernador militar de Lérida, donde su influencia en los círculos militares y políticos creció aún más. Sin embargo, el hecho que marcó su carrera de manera indeleble fue su vinculación con los eventos de febrero de 1981.

El 23-F: El Intento de Golpe de Estado

El 23 de febrero de 1981, España fue testigo de un intento de golpe de estado que casi deshace los avances democráticos logrados tras la muerte de Franco. Alfonso Armada desempeñó un papel crucial en el golpe, ya que, en el momento de los hechos, era el segundo jefe del Estado Mayor del Ejército. En los planes de los golpistas, Armada era la persona que debía asumir la presidencia del Gobierno en caso de que el golpe tuviera éxito. Esto lo convirtió en una figura central dentro de los esfuerzos por desestabilizar la democracia española.

El golpe de estado comenzó cuando un grupo de guardias civiles irrumpió en el Congreso de los Diputados durante la votación de la investidura de Leopoldo Calvo-Sotelo como presidente del Gobierno. En el mismo momento, otros oficiales del Ejército se levantaron contra el orden constitucional, entre ellos, Armada. Sin embargo, el golpe fracasó debido a la firme oposición de diversas instituciones, como la monarquía de Juan Carlos I, quien mostró un liderazgo decisivo en defensa de la democracia.

El 28 de febrero de 1981, Alfonso Armada fue destituido de su cargo y arrestado, lo que dio comienzo a una serie de procesos judiciales en su contra. En marzo de 1981, Armada fue procesado por rebelión militar, lo que marcó el inicio de su caída. Aunque en un principio fue condenado a seis años de prisión por el Consejo Supremo de Justicia Militar, la sentencia fue más tarde endurecida en 1983, cuando el Tribunal Supremo le impuso una pena de 30 años y la pérdida de empleo.

Los Procesos Judiciales y la Condena

Tras su condena, Alfonso Armada pasó varios años en prisión. La sentencia fue objeto de controversia, y se realizaron varias apelaciones. En 1987, el Consejo Supremo de Justicia Militar redujo su condena a 26 años, ocho meses y un día. A pesar de su delicada salud, Armada no fue liberado de inmediato. Fue solo en 1988, después de varias gestiones legales, cuando el Gobierno acordó indultarlo por razones de salud y por su acatamiento de la Constitución. Armada fue liberado de la cárcel de Alcalá-Meco, donde había estado recluido.

A partir de su liberación, Armada se retiró de la vida pública. Repartió su tiempo entre su residencia en Madrid y una finca que poseía en Santa Cruz de Ribadulla, en Galicia, donde cuidaba personalmente un vivero. Además, cumplió con disposiciones de su testamento familiar, trasladando los restos de sus padres a la catedral de Santiago de Compostela. A pesar de su intento de mantenerse alejado de la política, su nombre continuó siendo asociado con el golpe de estado fallido de 1981.

Relevancia Actual

Alfonso Armada sigue siendo una figura controvertida en la historia reciente de España. Aunque su implicación en el golpe de estado de 1981 lo convirtió en uno de los símbolos de la oposición a la transición democrática, su figura también está marcada por su lealtad al régimen franquista y su posterior rol en la monarquía de Juan Carlos I. Su vida fue testigo de una de las transiciones políticas más significativas de Europa, pasando de la dictadura a la democracia.

Hoy en día, el legado de Alfonso Armada es recordado como un recordatorio de los peligros que amenazaban la estabilidad política de España durante la transición, y su nombre sigue siendo un símbolo de las tensiones que existían entre los viejos valores del franquismo y los nuevos ideales democráticos que estaban tomando forma en el país. Su vida, marcada por la controversia, sigue siendo objeto de estudio para los historiadores que analizan ese periodo crucial de la historia española.

En resumen, Alfonso Armada y Comyn es una de las figuras más relevantes en la historia contemporánea de España. Su participación en el golpe de estado del 23-F le asegura un lugar destacado en los anales de la historia del país, siendo recordado tanto por su implicación en un momento oscuro como por su relación con la monarquía y los cambios políticos que marcaron la transición de España hacia la democracia.

Cómo citar este artículo:
MCN Biografías, 2025. "Alfonso Armada y Comyn (1920-2013): El General de División que Participó en el 23-F". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/armada-y-comyn-alfonso [consulta: 29 de septiembre de 2025].