Gregorio Aglipay y Labayán (1870-1940): El líder revolucionario y fundador de la Iglesia Filipina Independiente

Gregorio Aglipay y Labayán, nacido el 7 de mayo de 1870 en Batao Municio, Ilocos del Norte, Filipinas, es recordado por su papel crucial en la lucha por la independencia de Filipinas y como fundador de la Iglesia Filipina Independiente (IFI), una iglesia nacionalista que rompió con la autoridad de la Iglesia Católica Romana. Su vida y su legado han marcado profundamente la historia del país, especialmente en lo que respecta a la identidad religiosa y la autodeterminación filipina durante y después del periodo colonial.
Orígenes y contexto histórico
Aglipay nació en una familia humilde en la región de Ilocos del Norte, un área famosa por su resistencia al colonialismo. Desde joven, mostró una gran determinación por mejorar su situación, lo que lo impulsó a trasladarse a Manila para continuar con sus estudios. Su dedicación académica lo llevó a ingresar al seminario de Ilocos, donde fue ordenado sacerdote en 1889. Durante su tiempo en el seminario, Aglipay desarrolló una perspectiva crítica sobre las estructuras eclesiásticas coloniales impuestas por España y la jerarquía de la Iglesia Católica Romana.
La ocupación estadounidense de Filipinas, que comenzó a finales del siglo XIX, fue otro punto crucial en su vida. Inicialmente, Aglipay apoyó a las fuerzas norteamericanas, creyendo que la presencia de los Estados Unidos contribuiría a la independencia de Filipinas. Sin embargo, pronto se dio cuenta de las verdaderas intenciones imperialistas de los Estados Unidos y, en consecuencia, cambió su postura. Este giro lo llevó a unirse al ejército revolucionario filipino, que luchaba por la independencia de su país. Este cambio de perspectiva se convirtió en el comienzo de su vínculo con el movimiento nacionalista filipino.
Logros y contribuciones
El logro más significativo de Gregorio Aglipay fue la creación de la Iglesia Filipina Independiente (IFI) en 1902. Después de haber sido excomulgado por la Iglesia Católica Romana debido a sus desacuerdos con la jerarquía eclesiástica y la acusación de cisma, Aglipay organizó un grupo de sacerdotes y seglares para fundar una iglesia que fuera una alternativa a la estructura religiosa colonial. La nueva iglesia reflejaba los valores y las aspiraciones de Filipinas, al mismo tiempo que rechazaba algunos de los dogmas fundamentales de la Iglesia Católica Romana, especialmente la autoridad del Papa.
La IFI se creó como una respuesta a la subordinación religiosa que Filipinas había sufrido durante siglos bajo el dominio español. Los ideales nacionalistas y racionalistas de la época influyeron profundamente en la fundación de esta iglesia, que mantenía los ritos y ceremonias católicas pero sin la intervención del Vaticano. El propósito de Aglipay era ofrecer a los filipinos una iglesia que representara sus propios intereses y que estuviera más alineada con su identidad y aspiraciones nacionales.
Bajo el liderazgo de Aglipay, la Iglesia Filipina Independiente creció rápidamente en popularidad, convirtiéndose en una de las principales iglesias en Filipinas. En 1918, la IFI alcanzó su punto máximo, con cerca de dos millones de miembros. Aunque en las décadas posteriores la IFI experimentó una disminución en su número de fieles, la iglesia continuó siendo una fuerza religiosa y política significativa en el país.
Momentos clave
- Formación y ordenación (1889): Aglipay completó su formación en el seminario de Ilocos y fue ordenado sacerdote en 1889. Este evento marcó el comienzo de su carrera eclesiástica, aunque posteriormente se distanciaría de la Iglesia Católica Romana.
- Apoyo inicial a las fuerzas estadounidenses (1898-1900): Durante la ocupación de Filipinas por parte de los Estados Unidos, Aglipay inicialmente respaldó a las tropas norteamericanas, creyendo que su presencia contribuiría a la independencia del país. No obstante, pronto descubrió las intenciones imperialistas de los Estados Unidos y cambió su apoyo, uniendo fuerzas con el ejército revolucionario filipino.
- Excomunión y ruptura con la Iglesia Católica (1902): En 1902, Aglipay fue excomulgado por la Iglesia Católica Romana después de haber organizado a sacerdotes filipinos para fundar una iglesia nacionalista, lo que significó una ruptura definitiva con la jerarquía eclesiástica romana.
- Fundación de la Iglesia Filipina Independiente (1902): Después de su excomunión, Aglipay fundó la Iglesia Filipina Independiente, que rápidamente ganó adeptos entre los filipinos que deseaban una iglesia que reflejara los intereses y valores nacionales, libres de la autoridad papal.
- Crecimiento y expansión de la IFI (1918): En su apogeo, la IFI alcanzó una membresía de casi dos millones de personas en 1918. Este crecimiento reflejaba el fervor nacionalista de la época y el deseo de independencia religiosa y política.
- Declive y revitalización (segunda mitad del siglo XX): A pesar del declive en su número de fieles en la segunda mitad del siglo XX, el movimiento Aglipayista experimentó una revitalización. Se estima que el «aglipayismo» llegó a representar una décima parte de la población filipina en sus últimos años.
Relevancia actual
Hoy en día, la Iglesia Filipina Independiente sigue siendo una de las principales religiones en Filipinas, aunque su número de miembros ha disminuido considerablemente respecto a su apogeo. A pesar de esta disminución, el legado de Gregorio Aglipay perdura, tanto en el ámbito religioso como en el político.
El «aglipayismo» es considerado un símbolo de resistencia contra la opresión colonial y una lucha por la autodeterminación de Filipinas. La IFI, al rechazar la autoridad del Papa y la intervención extranjera en los asuntos religiosos, ofreció a los filipinos una alternativa que reflejaba sus creencias y aspiraciones nacionales. Aglipay se consolidó como un líder revolucionario que ayudó a dar forma a la identidad moderna de Filipinas, no solo en el ámbito religioso sino también en el político.
Su impacto en la historia de Filipinas es incuestionable. A lo largo del siglo XX y hasta la actualidad, su figura continúa siendo una fuente de inspiración para los movimientos de resistencia y lucha por la autonomía, un símbolo de la búsqueda de independencia en todos los aspectos de la vida filipina. Su influencia sigue presente en la sociedad, tanto en el movimiento religioso como en el fervor por la autodeterminación del pueblo filipino.
Aunque los tiempos han cambiado, el legado de Aglipay como líder revolucionario y fundador de la Iglesia Filipina Independiente sigue vigente. Su vida y obra continúan siendo una fuente de orgullo y reflexión sobre el camino hacia la independencia de Filipinas.
MCN Biografías, 2025. "Gregorio Aglipay y Labayán (1870-1940): El líder revolucionario y fundador de la Iglesia Filipina Independiente". Disponible en: https://mcnbiografias.com/app-bio/do/aglipay-y-labayan-gregorio [consulta: 28 de septiembre de 2025].