Pío V, Papa y Santo (1504-1572).
Llamado Antonio Michele Ghislieri. Nació en Bosco, diócesis de Tortona, en el Milanesado, en 1504 y murió en Roma, el 1 de mayo de 1572. Sus padres eran pobres labradores, Pablo Ghislieri y Dominica Augeria, aunque temerosos de Dios. A los catorce años ingresó en la Orden de Predicadores y recibió el nombre de Pío. Luego cursó estudios de teología y filosofía en Bolonia, y en 1528 se ordenó sacerdote en Génova y pasó al convento de Pavía, donde enseñó filosofía y teología durante varios años; fue elegido prior de los conventos de su orden, dos veces del de Vigevano, y en los de Sonzino y Alba. Fue nombrado general de la suprema inquisición de la fe en Lombardía, y más tarde, en 1551, comisario general de la misma. En 1556 fue consagrado obispo de Nepi y Sutri, y elevado al cardenalato al año siguiente. Elegido papa el año 1566 para suceder a Pio IV, mantuvo su nombre y su hábito dominicano. Desde este momento continuó con gran decisión la reforma comenzada por el Concilio de Trento; promovió la propagación de la fe y la puesta al día de la liturgia; la publicación del Catecismo Romano y la formación teológica de los clérigos en los seminarios. Una de sus primeras tareas fue organizar la corte pontificia poniéndola en armonía con su sencillez, y fue modelo de virtud y abnegación; vestía una túnica monacal de lana bajo los hábitos pontificales y se valía de un jergón de paja por único lecho. También es obra suya el logro de organizar la Liga Santa, formada por los Estados Pontificios de España y Venecia, que venció a los turcos en la batalla de Lepanto. Trabajó incansablemente por proteger la fe y dignificar el culto. Pío V murió santamente el 1 de mayo de 1572, tras seis años, tres meses y veintitrés días de pontificado. Le sucedió Gregorio XIII. Fue canonizado por Clemente XI en 1712. Su fiesta se celebra el 5 de mayo.