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HistoriaReligiónBiografía

Pedro Canisio, San (1521-1597).

Religioso holandés, primer teólogo germano afiliado a la Compañía de Jesús, nacido en Nimega (Países Bajos) en 1521 y fallecido en Friburgo (Suiza) el 21 de diciembre de 1597. Criado en una familia de la burguesía neerlandesa, el joven Pieter de Hondt, pues tal era su nombre, comenzó a estudiar filosofía y teología en la universidad de Colonia, ciudad en la que inició sus primeros contactos con el ideal jesuita de la mano de Pedro Fabro, uno de los más estrechos colaboradores de Ignacio de Loyola en el Sacro Imperio.

En 1546 se ordenó sacerdote, y fue, como ya se ha comentado, el primer súbdito imperial en colaborar con la Compañía de Jesús. Al año siguiente, y merced a la recomendación del propio Ignacio, fue nombrado por sus colegas del clero en Colonia portavoz de sus pretensiones ante el obispo de Lieja y ante el propio emperador germano, con lo que Pieter de Hondt intervino activamente en la lucha contra la extensión del luteranismo en los Países Bajos. Al año siguiente (1547) formó parte del séquito del cardenal Otón de Augsburgo en el Concilio de Trento, donde tuvo una destacada actuación en los debates teológicos con respecto a la reforma de la Iglesia. En 1548 abandonó el concilio para ser aceptado como miembro en la Compañía de Jesús, y también para acompañar al propio San Ignacio a Roma, con lo que comenzó su estancia en tierras italianas.

Además de trabajar al lado de su mentor, Hondt obtuvo el doctorado en Teología por la Universidad de Bolonia (1549); después de completar su formación académica, volvió al Sacro Imperio para aplicar, en la práctica, la teoría jesuita contra la Reforma luterana: la propagación del catolicismo mediante la fundación de escuelas eclesiásticas en las que tuvieran cabida tanto laicos como eclesiásticos. Pieter de Hondt, en última instancia, fue el fundador de muchos de los centros de educación de la Compañía de Jesús en el Imperio, especialmente en los Países Bajos. En 1551 fue profesor de Teología en la universidad de Ingolstadt (Baviera, Alemania), poco antes de marchar hacia la capital imperial, Viena, y fundar el colegio jesuita de la ciudad. Entre 1552 y 1555 Hondt vivió en esta ciudad, donde, además de impartir clases de filosofía y teología en el colegio, obtuvo el cargo de predicador de la corte.

En 1556 regresó a Ingolstadt, pero sólo por unos meses, ya que su carrera dentro de la Compañía no había pasado desapercibida para sus superiores quienes, en el mismo año, le nombraron provincial de la orden en el norte de Alemania, destino que tenía en Praga su residencia principal. En 1557, como provincial de la orden, participó en la conferencia de Worms donde, una vez más, su elocuencia en la exposición resultó vital para que se llegase a un acuerdo entre las áreas de influencia de ambos cultos. Totalmente encumbrado entre los teólogos imperiales, Hondt fue uno de los principales baluartes del catolicismo en la Dieta de Augsburgo (1559), y, asimismo, otra vez en el concilio de Trento, adonde regresó en 1562 para intentar paliar la ausencia de efectivos jesuitas ante la resolución final del conflicto.

Después de una incesante carrera en la cúspide de la orden, los últimos años de Hondt estuvieron marcados por la redacción doctrinal de obras religiosas. Cuando era todavía un joven estudiante ya realizó algunas ediciones de textos doctrinales publicadas en el seno de la universidad de Colonia, como los Sermones de Johannes Tauler (1543), las Obras completas de San Cirilo (1546) o los Sermones del papa León I (1547). No obstante, su obra más conocida y difundida es el Parvus Catechismus Catholicorum (Amberes, 1561), uno de los catecismos católicos más utilizados en toda Europa merced a su claridad de exposición y a su lenguaje sencillo, libro con el que la extensión de la fe, y también el modo de religiosidad defendida por los jesuitas, estuvo prácticamente monopolizada en los Países Bajos a la lectura de la obra de Hondt. Otra obras suyas dignas de destacar son los Comentarii contra verbi Dei corruptelas (Delingen, 1571), De Maria virgine incomparabili (Ingolstadt, 1571) y Summa doctrinae christianae per quaestiones tradita (Amberes, 1561), todas ellas sobre cuestiones polémicas dentro de su entorno geográfico y temporal, y donde su elocuencia es el elemento más destacado.

En el año 1580 Hondt abandonó toda actividad religiosa, que hasta ese momento, y como se ha podido comprobar, había sido incansable, y se retiró a la pequeña población suiza de Friburgo, donde se dedicó a la meditación espiritual hasta su muerte, acontecida en 1597. Fue beatificado en 1864 por el papa Pío IX, y canonizado en 1925 por el papa Pío XI. Su festividad se celebra el 21 de diciembre.

Bibliografía

  • WOODROW, A. Los jesuitas: historia de un dramático conflicto. (Barcelona; Planeta, 1985).

Autor

  • Óscar Perea Rodríguez