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Paulo III, Papa (1468-1549).

Papa sucesor de Clemente VII en el año 1534, nacido en Camino en 1468, y muerto en Roma en 1549, cuyo verdadero nombre era Alessandro de Farnesse (en español, Alejandro Farnesio). Ocupó el trono de 1534 a 1549 en un pontificado verdaderamente fecundo para la Iglesia. A él se debe la vigorosa reacción en favor de la auténtica reforma; con objeto de restablecer el dogma -lo que constituía su mayor ambición-, nombró varias comisiones de prelados y cardenales, y designó comisiones especiales para la reorganización de la Cámara, la Cancillería, la Penitenciaría y el Tribunal de la Rota. También expidió varias bulas; trabajó sin descanso para establecer la concordia de los príncipes cristianos y unirlos contra el turco; y, aprobó y confirmó varias órdenes religiosas surgidas por aquel tiempo como la de de los Jesuitas (1540). Fue un hombre tremendamente autoritario en sus planes pontificales, como se refleja en el hecho de que bajo su reinado se convocara el Concilio de Trento (1543), para lo que tuvo que superar un sinnúmero de dificultades: el rehusamiento de los protestantes, la negativa del duque de Mantua a que el Concilio se reuniera en dicha ciudad y la guerra que estalló entre el rey de Francia y el emperador. Finamente, el Concilio acabó por reunirse en Trento, pero tuvo que trasladarse a Bolonia a causa de una enfermedad contagiosa que se declaró en Trento.

El Papa cumplió la labor pastoral que se había propuesto, y propagó la religión católica por todo el mundo, especialmente por África, Asia y América, prestando su apoyo a los misioneros y defendiendo a los indios. Fue un hábil diplomático y un gran Pontífice, cuya única falta fue prestar excesivo apoyo a los miembros de la casa Farnese de la que procedía, lo que le produjo amargos desengaños, pues si bien él era querido y respetado, no ocurría lo mismo con sus parientes, que eran aborrecidos. Falleció en 1549 y le sucedió Julio III. En consideración a los merecimientos del difunto, el Colegio cardenalicio acordó destinar 10.000 ducados para la construcción de un sepulcro en la Basílica de San Pedro, obra que se encomendó al escultor Giacomo della Porta, y que no se terminó hasta el año 1576. Entre los numerosos artistas que han representado a Farnese, ninguno ha sido tan veraz como Tiziano, que acierta a representar perfectamente la fuerza y el extraordinario carácter de este Papa.

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  • Enciclonet