Paganini, Niccolò (1782-1840).
Compositor y violinista, nacido en Génova (Italia), célebre por la habilidad prodigiosa de su ejecución. Niño prodigio, dio conciertos de violín desde 1794. Estudió con Servetto (maestro de capilla de la Catedral de Génova), Costa (primer violín en varias iglesias genovesas), Rolla, y Paër (compositor de ópera en Parma y Bolonia) y fue maestro de capilla de la princesa Elisa Baciocchi, hermana de Napoleón. Ya independiente, realizó giras por varias ciudades europeas. En 1828, fue nombrado en Viena virtuoso del emperador, pero después de un tiempo decidió regresar a Italia y proyectó crear una escuela de violín. Murió durante un viaje a Francia. Estaba considerado como la encarnación del artista romántico, con una imagen misteriosa y una técnica deslumbrante. Poseía una mano izquierda muy ágil y apta para grandes extensiones. Su inspiración y facilidad técnica le permitían cadencias en numerosos pasajes sobre las notas escritas y añadir originales adornos, a la manera de los cantantes. Quiso además rodearse de una aureola de misterio, por ejemplo, provocando situaciones desesperadas en pleno concierto, como por ejemplo, la rotura de una o de varias cuerdas e incluso del arco, que reemplazaba por una caña de junco, y de las que salía airoso. A su lado palidecieron otros grandes violinistas italianos, como Sivori, Rovelli, T. y M. Milanollo, Tua y Polo.
Niccolò Paganini. Movimiento perpetuo.
Sus conciertos presentan también un carácter solista similar a a la de las arias operísticas, tanto por su melodismo como por la forma de aparecer el violín solista, después de pomposas introducciones orquestales. Compuso, entre otras obras, 24 Caprichos Op (realizados hasta 1810 y publicados en 1820), seis Sonatas per violino e chitarra (1820) y varios conciertos.
Niccolò Paganini. Concierto para violín y orquesta nº2 en si menor Op. 7, "La campanella".