Faguet, Émile (1847-1916).
Ensayista y crítico literario francés, nacido en La-Roche-sur-Yon en 1847 y fallecido en París en 1916. Dotado de una aguda capacidad para el ejercicio de la crítica literaria, a pesar del enfoque tradicionalista -y, desde el punto de vista moral, ciertamente reaccionario- de sus escritos, se convirtió en uno de los mayores especialistas universales en literatura del siglo XVIII.
Interesado desde su juventud por el estudio del hecho literario, se licenció en Letras y ejerció la docencia universitaria en la Sorbona desde 1897 hasta 1916, en calidad de profesor de literatura francesa. También desde muy temprana edad mostró su predilección por el análisis de los textos franceses del Siglo de las Luces, campo en el que irrumpió con una visión independiente y original que, en cierto modo, vino a ofrecer un contrapunto de rebeldía contra el anquilosamiento reiterativo y estéril de la crítica vigente. De ahí que sus valiosas aportaciones al estudio de las Letras galas pronto convirtieran a Émile Faguet en uno de los críticos más respetados del ámbito universitario francés, sobre todo a raíz de la publicación de algunos trabajos tan reveladores como los titulados La tragédie au XVIe siècle (La tragedia en el siglo XVI, 1883), Corneille (1886), La Fontaine (1887) y Flaubert (1899). Además, su extraordinaria Histoire de la littérature française (Historia de la literatura francesa, 1900), publicada en dos volúmenes, pronto se convirtió en uno de los manuales de consulta obligada para los estudiantes franceses; y su monumental estudio sobre Rousseau (1912), desplegado a lo largo de cinco tomos, le anunció como uno de los mayores especialistas en la obra del autor ginebrino.
No obstante, algunos enemigos de las ideas de Faguet señalaron enseguida una pesada carga ideológica, fuertemente reaccionaria, que lastraba todos sus estudios, especialmente los dedicados a analizar las obras de los autores franceses contemporáneos. Este acérrimo conservadurismo del escritor galo se hizo aún más patente en sus ensayos ajenos al estricto ámbito literario, en los que ofreció su propia crítica moral acerca de aspectos tan complejos como el pacifismo, el feminismo y el anticlericalismo, sin olvidar otras consideraciones políticas relativas al liberalismo, el socialismo y cuantas corrientes progresistas florecían en la época.
