Ybarra y de la Revilla, Fernando María de (1875-1936).


Empresario español nacido en Santander el 30 de junio de 1875 y fallecido en Bilbao el 25 de septiembre de 1936 a los 61 años de edad. Cursó estudios de Derecho y Filosofía y Letras en la Universidad de Deusto, coincidiendo con miembros de otras destacadas familias de la época. Hombre de profundas convicciones religiosas, Fernando María colaboró a lo largo de su vida en distintas instituciones religiosas como los Hospitales Mineros o la Fundación Miranda.

En 1898 fue nombrado consejero en Altos Hornos, pasando sólo cuatro años después a ocupar un puesto en el Consejo de Administración de Altos Hornos de Vizcaya, cargo que compaginó con el de contador en la Liga Vizcaína de Productores, en la que había ingresado en 1899.

Además del sector minero y siderúrgico, en los que participó activamente, siendo consejero entre otras de las Hulleras de Turón o la Sociedad Española de Construcción Naval, Fernando María se interesó en otros negocios; por ello adquirió el 19 de julio de 1901 350 acciones de la recién creada Sociedad Anónima Hidroeléctrica Ibérica, lo que le permitió, junto al resto de acciones familiares, poseer el 3% del accionariado de dicha sociedad y posteriormente formar parte de su consejo gestor.

Fernando María participó además en otros sectores de importancia como el bancario, siendo miembro del consejo de administración del Banco de Vizcaya, lo que le permitió el capital suficiente para el crecimiento de sus negocios empresariales. En 1904 fue nombrado vicepresidente de la Hidroeléctrica Ibérica y tres años más tarde presidente, a causa del fallecimiento de su anterior presidente Benito de Arzola.

En 1907 inició su carrera política al encabezar una candidatura católica y dinástica en las elecciones de diputados a cortes por “La Piña”, grupo de oligarcas bilbaínos, logrando su acta como diputado. Ese mismo año participó en otras empresas del sector eléctrico como la Sociedad Hidroeléctrica Española, de la que fue nombrado vocal y en 1911 vicepresidente primero, ocupando posteriormente la presidencia.

En 1909 Fernando María participó en la creación de un partido dinástico independiente de “La Piña”. El 3 de julio de ese año se constituye el Partido Conservador, en el que Fernando María es nombrado presidente. Durante estos años participó en la creación del seminario «Luz y Taquígrafos» y del diario El Pueblo Vasco; además se vio envuelto en una serie de disputas políticas, al ser acusado, en las elecciones para diputados a Cortes de 1910, de manipular los comicios, repitiéndose la misma situación cuatro años más tarde. En 1916 presentó su dimisión al no verse respaldado por su partido.

Debido a la amistad que le unía con el rey Alfonso XIII, en 1918 le fue concedido el título de Marqués de Arriluce de Ybarra. Ese mismo año fue uno de los socios fundadores de la Sociedad Ibérica de Construcciones Babcock & Wilcox y en 1921 de la Sociedad Ibérica de Construcciones Eléctricas. Sus inversiones alcanzaron el sector químico con una participación en la Sociedad Ibérica del Nitrógeno, empresa productora de amoniaco.

A causa del aumento del nacionalismo vasco en los comicios y para proteger sus intereses empresariales, Fernando María se presentó en 1919 para el cargo de diputado en Villarcayo (Burgos), repitiendo su victoria mediante grandes inversiones económicas en 1920, año en el que es nombrado además vicepresidente de las Cortes, y en 1923.

Tras el golpe de Primo de Rivera se retiró de la carrera política, centrándose en su actividad empresarial. En 1936, al comenzar la Guerra Civil Española, es detenido y trasladado al buque-prisión «Cabo Quilates». Como represalia a un bombardeo sobre la ciudad de Bilbao fue fusilado junto a otros 34 detenidos.

RUF