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HistoriaPolíticaBiografía

Fernando de Austria, Emperador del Sacro Imperio (1503-1564).

Emperador del Sacro Imperio, rey de Bohemia y Hungría, nacido en Alcalá de Henares el 10 de marzo de 1503 y muerto en Viena el 25 julio de 1564.

Síntesis biográfica

Hijo de Felipe I el Hermoso y de Juana I la Loca, pasó los primeros años de su vida en Castilla, donde fue educado por su abuelo materno Fernando el Católico. Tras la llegada de su hermano, Carlos, a España en 1517, fue enviado por éste a Flandes, donde permaneció hasta que fue nombrado presidente del Consejo de Regencia de Alemania, en 1521, año en el que contrajo matrimonio con Ana de Hungría. Representante de su hermano en los territorios del Imperio desde 1521 hasta 1556, en el año 1531 fue nombrado rey de romanos. Tras la batalla de Mohacs, fue elegido para ocupar el trono de Bohemia y Hungría. En 1556 tras la abdicación de su hermano, recibió en herencia los territorios del Imperio, excepto el ducado de Borgoña y los Países Bajos.

Sus primeros años y su salida de España

Segundo hijo varón de Juana la Loca y Felipe el Hermoso, nació durante uno de los numerosos viajes que sus padres realizaron a Castilla. Tras el regreso de sus padres al ducado de Borgoña, Fernando quedó bajo la tutela de sus abuelos maternos. En año 1504 se produjo la muerte de Isabel la Católica y Juana y Felipe regresaron para ocupar el trono de Castilla, aunque la prematura muerte de su padre y la supuesta locura de su madre, propiciaron que su abuelo, Fernando el Católico, asumiera la regencia del mencionado reino. Estos acontecimientos afectaron al futuro de Fernando, que fue educado en Castilla, donde el joven infante apenas tuvo contacto con su hermano mayor, Carlos, el cual fue educado en Borgoña.

Fernando acompañó a su abuelo durante los últimos años de su vida y éste hizo saber a sus súbditos que era su nieto predilecto. De este modo en el año 1512, tras redactar su testamento en Burgos, Fernando el Católico le nombró heredero al trono de Aragón, pero finalmente tuvo que renunciar a este propósito, ya que esto podría originar el estallido de una guerra civil entre ambos hermanos, la cual sólo reportaría beneficios a la alta nobleza, en detrimento del poder de la monarquía. Así Fernando tras la muerte de su abuelo, en 1516, recibió en herencia el gobierno de la ciudad de Tarento, en el reino de Nápoles; y una pensión anual de cincuenta mil ducados. El infante que en aquel momento contaba con trece años de edad, vio como a su alrededor se formaba una facción de nobles, que apoyaban su candidatura a las coronas de Castilla y Aragón, en detrimento de Carlos. A la vista de estos acontecimientos, el cardenal Cisneros, que había sido nombrado regente, decidió intervenir y alejar al infante de unas influencias que podían ser perniciosas para él y sobre todo para la estabilidad del reino. Así tras recibir las instrucciones de Carlos, despidió al ayo del infante, Pero Núñez de Guzmán, a su maestro, fray Álvaro de Osorio, a su camarero, Gonzalo de Guzmán; y a su tesorero, Sancho Paredes; entre otros, y pasó a ocuparse de la instrucción de Fernando, así por consejo del hermano de éste, nombró a Alonso Téllez ayo del infante, el cual tenía instrucciones de acompañarle en todo momento.

Tras la llegada de Carlos a España en el año 1517, Fernando rindió homenaje al heredero al trono, en su primer encuentro en Mojadas, el 11 de noviembre; y recibió de manos de su hermano la orden del Toisón de Oro, en el monasterio de Abrojo. El futuro Carlos V, por consejo de Maximiliano I, había decidido alejar a su hermano de España, para evitar posibles estallidos de violencia. Así en el año 1518, Fernando abandonó su residencia, situada en Aranda de Duero, y se dirigió a Santander, donde el 23 de mayo de ese mismo año, partió hacia Flandes. Tras su llegada, residió durante tres años con su tía Margarita, duquesa de Saboya. La salida de España del infante, provocó las protestas de destacados nobles, que estimaban necesaria su presencia en la península, ya que hasta que Carlos no tuviera herederos, éste era su legitimo sucesor. Hay que destacar que muchos de los partidarios de Fernando formaron parte del movimiento comunero y éste mantuvo frecuentes contactos con algunos de los exiliados posteriormente.

Su participación en la política europea

Tras la muerte de Maximiliano I, la vida de Fernando cambió por completo. En 1519, Margarita de Saboya propuso a Carlos presentar al infante a la elección imperial, aunque esta idea fue descartada por el nuevo jefe de la Casa de Austria. Dos años después, en 1521, Fernando contrajo matrimonio con Ana de Hungría y tras la Dieta de Worms, fue nombrado presidente del Consejo de Regencia, el cual tenía como misión dirigir los asuntos alemanes en ausencia de Carlos V, además su hermano le cedió el gobierno del ducado de Wurttemberg, lo cual le equiparó con el resto de príncipes alemanes.

Fernando fue el representante de Carlos en el Imperio desde 1521 hasta 1556 y estuvo en comunicación permanente con él, gracias a la destacada intervención de su embajador en la Corte de España, Martín Salinas. Durante estos años ejerció una importante labor en las Dietas imperiales como jefe del Partido Católico, y a pesar de que en un principio se mostró contrario a llevar a cabo una política de tolerancia religiosa, como demuestra su participación en la batalla de Mühlberg (1547); años más tarde, inició las negociaciones que desembocarían en la paz de Augsburgo (1555), en la cual se reconocía la libertad religiosa de los príncipes alemanes, lo que equivalía en la práctica a reconocer la división política de Alemania. Hay que destacar también sus esfuerzos en la organización de las defensas de las fronteras del Imperio frente a los turcos. Así intentó que su hermano tomara medidas en contra de Solimán el Magnifico, desde 1523, aunque la guerra que mantenía Carlos V con Francisco I, hizo que esta proposición quedara en suspenso, hasta la organización de la Santa Liga en 1538, ya que desde la batalla de Mohacs (28 de agosto de 1526), los territorios patrimoniales de la Casa de Austria estuvieron en grave peligro y Fernando tuvo que hacer frente a sucesivos sitios de la ciudad de Viena. Por último hay que destacar, que desde su puesto apoyó a su hermano, reclutando hombres en Alemania, para que éstos lucharan en las guerras llevadas a cabo contra Francia y financiando, en ocasiones, las soldadas de los mercenarios, debido a la precaria situación económica en la que se encontraba el emperador.

Debido a la coyuntura europea, la situación de Fernando en Alemania cambió con el paso de los años, así en el año 1525 recibió de su hermano la promesa de que una vez que fuera coronado emperador por el papa, haría todo lo posible por que se le concediera el título de rey de romanos, lo que en la práctica suponía su reconocimiento como heredero a los territorios del Imperio. En 1526 tras la muerte de Luis II de Hungría, en la mencionada batalla de Mohacs, fue elegido rey de Hungría y Bohemia, lo cual produciría cierto distanciamiento con Carlos V tras la negativa que recibió de éste al solicitar su ayuda para la defensa de sus nuevos territorios. En estos años de inestabilidad, el nuevo rey, tuvo que hacer frente a los ataques de Juan Zapolya, candidato al trono húngaro; a la constante amenaza que suponían los ejércitos turcos y a una sublevación de sus súbditos bohemios en 1547. En 1531 recibió el título de rey de romanos, lo cual mejoró su posición, tras lo cual hizo partícipe a su hermano de sus ambiciones en torno al Milanesado, que fue motivo de conflicto entre ambos hermanos durante años. A pesar de que la colaboración entre Fernando y Carlos V fue constante, el distanciamiento entre ambos fue haciéndose cada vez mayor y se sucedieron los malentendidos y las disputas. En 1555 la situación entre ambos se hizo muy tensa, ya que tras la muerte de Juana la Loca en Tordesillas, Carlos decidió retirarse. El conflicto estalló debido a que Fernando se negó a aceptar que Felipe II recibiera como herencia el ducado de Borgoña y los Países Bajos, ya que consideraba que estos formaban parte del Imperio, aunque finalmente gracias a la intervención de María de Hungría, aceptó la división que proponía su hermano. Pero la ruptura entre ambas ramas de la familia, fue patente desde ese momento, de este modo Fernando no acudió a la abdicación formal de Carlos V en Bruselas, a pesar de las súplicas de éste.

El 14 de marzo de 1558 la dieta de Frankfurt eligió emperador a Fernando de Austria, sin contar con el respaldo del papa Paulo IV, el cual se negó a recibir al embajador enviado por éste, Martín de Guzmán, ya que consideraba que Carlos antes de abdicar debía haber solicitado su consentimiento, por lo que oficialmente Fernando no podía ser reconocido como emperador. Para el papa que en la elección imperial hubiesen participado tres príncipes protestantes, suponía que tanto Fernando como su hijo, el futuro Maximiliano II, eran unos herejes. Así Fernando tuvo que esperar a que llegara Pío IV al poder, para ser reconocido por la Iglesia de Roma.

Fernando de Austria murió el 25 de julio de 1564, a la edad de sesenta y un años, siendo su heredero su hijo Maximiliano II. Durante los últimos años de su vida intentó en vano reforzar su poder y mantener la concordia con su sobrino Felipe II.

Bibliografía

  • JOVER ZAMORA, J.M. (dir). La España de Carlos V, en Historia de España de Menéndez Pidal. Vol XX. Madrid, Espasa Calpe, 1994.

  • SUTTER FICHTNER, P. Ferdinad of Austria: the politics of dynasticism in de age of the reformation. Nueva York, Columbia University Press, 1982.

CGS

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  • 0205 CGS.