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CineBiografía

Bacall, Lauren (1924-2014).

Lauren Bacall.

Actriz de cine estadounidense, nacida en Brooklyn (Nueva York) el 16 de septiembre de 1924 y fallecida en Beverly Hills, Estados Unidos el 12 de agosto de 2014, cuyo verdadero nombre era Betty Joan Perske, si bien era conocida por su pseudónimo cinematográfico de Lauren Bacall.

Hija de padre polaco y madre alemana, emigrantes judíos que se divorciaron cuando apenas tiene cinco años -fecha en la que madre e hija decidieron cambiar su apellido por Bacall-. Estudió en colegios privados y cursó periodismo en la Julia Richman High School y teatro en la New York School of Theatre. Tras graduarse decidió volcarse en la interpretación matriculándose en la American Academy of Dramatic Arts, centro en el que apenas estuvo un año. Trabajó como modelo, acomodadora, vendedora callejera y dio sus primeros pasos teatrales en obras de bajo presupuesto (‘Johnny 2 por 4’; ‘Franklin Street’).

Precisamente su trabajo como modelo le llevo a aparecer, con tan sólo 19 años, en las portadas de revistas como Harper’s Bazaar, siendo en una ocasión descubierta por la esposa de Howard Hawks, quien le hizo un contrato personal inmediatamente y la preparó para ser la gata de grandes ojos que vampirizó a Bogart, y a los espectadores de medio mundo, en Tener y no tener (1945), un magnífico cruce de comedia irónica y aventura romántica que por momentos da la sensación de tratarse de una réplica de Casablanca. Todo el cine de Hawks está en el filme: comedia casi teatral, diálogos vivaces y juego de actores, y, sobre todo, presentar mujeres capaces de plantar cara a los héroes.

Las legendarias escenas de amor entre una debutante Bacall y Bogart (que como es bien sabido tuvieron continuación fuera de la pantalla hasta la muerte del actor, en 1957) condicionaron el filme entero, pero sus interpretaciones fueron en todo caso convincentes y todo lo “duras” que podía esperarse. Andy Williams dobló las canciones de la Bacall, que no necesitó de ninguna clase de doblaje para enseñarle a Bogart cómo silbar si necesitaba ayuda.

Las escenas entre la Bacall y Bogart en Tener y no tener habían hecho saltar chispas, por lo que el desafío se volvió a repetir un año después. Para El sueño eterno (1946), Howard Hawks apostó sobre seguro. Bogart era el detective Philip Marlowe y Lauren Bacall una de esas señoritas de la buena sociedad americana que suelen ser o actuar como drogadictas o ninfómanas. Aquí fue una atractiva viuda que traerá de cabeza al detective creado por Raymond Chandler (los dos adjetivos quedaron para la hermana menor de la Bacall, Martha Vickers).

Prodigiosa adaptación de la primera novela de Chandler, terriblemente confusa (el propio Chandler no supo nunca quién había matado a quien), pero de un entretenimiento total gracias a las poderosas interpretaciones y a los inteligentes diálogos que la convierten en un clásico, por encima de las críticas que piden explicaciones racionales al título y linealidad argumental a una de las mayores delicias del género, memorablemente dirigido por el maestro Hawks.

El dúo formado por Bacall y Bogart hizo historia en el cine negro. Volvieron a ser unidos en dos filmes más: La senda tenebrosa (1947), de Delmer Daves, y Cayo Largo (1948), de John Huston. En la primera, la Bacall incorporaba a la mujer que profesa los cuidados a un Bogart renqueante (tiene que comer con pajita) después de una operación de cirugía estética, con el fin de ocultarse de la policía. Película de extremada eficacia, que se sigue con especial interés gracias a la pareja protagonista y a una malísima Agnes Moorhead, y porque Daves cumple con todas las premisas del género.

En el segundo, el magistral filme de Huston, Lauren Bacall es una viuda que, junto a su padre en silla de ruedas, un sensacional Lionel Barrymore, regenta un hotel de Florida, en Cayo Largo, donde llegan: Bogart, un veterano de la Segunda Guerra Mundial; Edward G. Robinson, un gangster en horas bajas; su alcohólica amante, Claire Trevor, y sus secuaces. El mejor Huston (junto con el de El Tesoro de Sierra Madre y El halcón maltés) crea la tensión opresiva que constituye la razón de ser de esta obra extrañamente inhóspita (guionizada por el propio director y por Richard Brooks) y dolorida (la amargura de la posguerra es uno de los muchos contextos del filme), más dramática que policial, más teatral que cinematográfica. Un auténtico manifiesto de la tristeza y el desencanto.

La personalidad de Lauren Bacall estaba perfectamente apuntalada por su fuerza expresiva y dramática, pero la Warner no quiso darse cuenta del potencial que tenía entre sus manos y se dedicó a desaprovecharla en películas muy por debajo de sus posibilidades. Fue una chica mala, muy mala en El trompetista (1950), de Michael Curtiz, y una típica y convencional chica rechazada injustamente por Gary Cooper en El rey del tabaco (1950), también de Michael Curtiz.

Un tanto despechada por materiales tan mediocres, permaneció unos años retirada del cine (dedicada, dicen, a los cuidados de su famoso marido) y cuando en 1953 volvió era ya una mujer madura, sofisticada, con una belleza menos salvaje, menos insinuante, pero más natural y cálida. Y cuando reapareció, lo hizo en comedias sofisticadas, como Cómo casarse con un millonario (1953) y El mundo es de las mujeres (1954), ambas de Jean Negulesco, donde se comporta como una mujer adulta, madura, elegante y segura de sí misma. En la primera, sobre todo, un éxito colosal de la Fox, era una de las tres buscadoras de fortuna a través del matrimonio (las otras dos eran Betty Grable y la única Marilyn Monroe).

Al año siguiente, en 1955, cambió de la comedia al melodrama en dos producciones típicas de aquellos años, época del gran melodrama hollywoodiense, en color y pantalla larga, género en el cual los códigos estéticos no están demasiado alejados de los de la comedia musical. Uno de los grandes maestros de ésta última, Vincent Minnelli, fue también el director de La tela de araña, una interesante composición pictórica, adaptación de una novela de William Gibson, con una Bacall guapísima en plan amante de Richard Widmark.

Otro gran maestro del melodrama, Douglas Sirk, la eligió para ser la secretaria, con fuerte personalidad, que es retirada por Robert Stack para tomarla como esposa y poner en alerta roja a su mejor amigo, un alto y apuesto Rock Hudson, en un clásico del género, Escrito sobre el viento (1956). Los honores se los llevó Dorothy Malone, que ganó un Oscar por su papel de hermana celosa y ninfómana de Stack, pero los halagos profesionales fueron para la Bacall, que, un año más tarde, aceptó sustituir a Grace Kelly cuando Vincent Minnelli se dispuso a rodar una pequeña joya de la comedia sofisticada con claras reminiscencias de los vehículos de la pareja Tracy-Hepburn, Mi desconfiada esposa (1957), donde era una diseñadora de modas que se casa con un cronista deportivo, Gregory Peck. Ambos se mueven con maravillosa precisión en unos decorados que definen sus respectivas personalidades sin necesidad de palabras, separados, a veces, tan sólo por una puerta.

Tras el pequeño varapalo que supuso La India en llamas (1959), de J. Lee Thompson, dejó los platós californianos por las tablas de Broadway, en Nueva York, para interpretar Adiós, Charlie y Flor de Cactus, llevada ésta última al cine con Ingrid Bergman (algo con lo que no estuvo demasiado de acuerdo). No se prodigó demasiado por las pantallas en la década de los sesenta. Sólo destacó su intervención en Harper, investigador privado (1966), de Jack Smight, donde fue una de las muchas estrellas que intentaban revitalizar el cine negro de los años cuarenta. Lo consiguieron sólo a medias.

Pero tuvo que volver a Broadway para conseguir lo que el cine le había negado: los premios. Logró ganar el Tony por su interpretación en la obra musical Applause, basada en un título memorable de Joseph Leo Mankiewicz, Eva al desnudo (1950). La Bacall consiguió lo que parecía imposible: componer una Margo Channing (la Margo Channing que fue creada para Bette Davis) personal y sin ansias de imitar o de llegar a la altura de la interpretación de la Davis, un gran desafío.

Los últimos veinticinco años de Lauren Bacall en el cine se resumen con alguna película de cierta importancia. Fue una de los integrantes de la elegante adaptación, repleta de estrellas, de la novela de Agatha Christie Asesinato en el Orient Express (1974). Estuvo a la altura de John Wayne en ese maravilloso y nostálgico western titulado El último pistolero (1976), de Don Siegel.

Se metió en ese gallinero internacional de grandes estrellas de ayer y de hoy que fue el Prêt-à-Porter (1994) de Robert Altman. Y aunque su papel fue totalmente irrelevante, tuvo el honor de haber participado en la mejor adaptación (junto a Cadena perpetua) de una novela de Stephen King, Misery (1990), de Rob Reiner, donde caracterizó a la breve agente de ventas del pobre James Caan.

Sus últimas apariciones en la gran pantalla incluyen El celo (1999), de Mado Ramei; Dogville (2003), de Lars von Trier; y Birth (2004), de Jonathan Glazer.

Actriz de voz grave, ronca, y fascinante belleza, Lauren Bacall supo explotar a las mil maravillas su porte ligeramente andrógino, su sugerente sexualidad y esa manera de caminar un tanto felina que la hacían tan irresistible. No existe duda alguna de que la Bacall fue la única mujer, con la excepción quizás de Mary Astor, que estuvo a la altura de la personalidad escénica de Humphrey Bogart.

En noviembre de 2009, la Academia de las Ciencias y las Artes de Hollywood realizó una cena de gala en su honor, en la que también se homenajeó al director de cine Roger Corman y al director de fotografía Gordon Willis, otorgándoles un Óscar de honor a cada uno por sus fructíferas carreras en el cine.

Filmografía

1944: Tener y no tener.
1945: Confidential Agent.
1946: El sueño eterno; Two Guys from Milwaukee (cameo).
1947: La senda tenebrosa.
1948: Cayo Largo.
1950: Young man with a horn; El rey del tabaco.
1953: Cómo casarse con un millonario.
1954: El mundo es de las mujeres.
1955: The cobweb; Callejón sangriento.
1956: Escrito sobre el viento.
1957: Mi desconfiada esposa.
1958: Sombra enamorada.
1959: La India en llamas.
1964: Shock Treatment; La pícara soltera.
1966: Harper, investigador privado.
1974: Asesinato en el Orient Express.
1976: El último pistolero.
1980: Health.
1981: The Fan.
1987: Cita con la muerte.
1988: Mr. North; The tree of hands.
1989: Innocent Victim.
1990: Misery; The actor.
1991: Todo lo que quiero para Navidad; Une étoile pour deux.
1993: A foreing field.
1994: Prêt-à-Porter.
1996: El amor tiene dos caras.
1999: El celo.
1999: La historia de Doris Duke; Diamonds.
2003: Dogville.
2004: Birth.

Trabajos para la Televisión:
1954: Light’s Diamond Jubilee (episodio: "The girls in their summer dresses").
1955: Producers Showcase (episodio: "The petrified forest").
1956: Blithe Spirit.
1964: Mr. Broadway (episodio: "Something to sing about"); Dr. Kildare (episodio: "The oracle").
1965: Bob Hope Chrysler Theatre (episodio: "Double Jeropardy").
1973: Applause!
1975: Happy Endings (episodio: "A Commercial Break").
1976: Big Event.
1978: Unos perfectos caballeros.
1988: John Huston.
1989: Enredo a las ocho (TV por cable); Un trozo de la isla Sunshine.
1991: A Star For Two.
1993: Dos amores y un señor.

Juan Carlos Paredes

Autor

  • Emilio García