Ricardo I, Rey de Inglaterra o Ricardo «Corazón de León» (1157-1199).


Rey de Inglaterra, hijo de Enrique II Plantagenet y de Leonor de Aquitania. Nacido en Oxford el 8 de septiembre de 1157 y muerto en Charlus en 1199. A muy corta edad se le prometió con Alicia, hija de Luis VII de Francia, lo que le convertía en duque de Aquitania, y como tal en vasallo del rey de Francia, hecho que traería importantes consecuencias futuras.

En 1173, se sublevó por vez primera contra su padre, pero fue vencido. Se concentró desde ese momento en el gobierno de sus posesiones francesas. Pero la gran capacidad que en ellas demostró, provocaron los recelos de su padre, y ante la amenaza de una posible desheredación, buscó la amistad del rey francés, Felipe Augusto.

Tras la muerte de su padre en 1189, Ricardo heredó el trono al ser el mayor de sus hijos que permanecía con vida. Inmediatamente cambió su política con respecto a Francia, que se volvió más hostil. Contrajo matrimonio con Berenguela, hija de Sancho VI de Navarra, en 1191, rompiendo su compromiso con Alicia, lo que supuso una afrenta al honor del rey francés, que aguardó una mejor situación para vengarse.

En virtud de un voto que hizo antes de subir al trono, organizó en 1188 la tercera cruzada junto con el emperador Federico I Barbarroja y Felipe II Augusto de Francia. En 1190 llegó a Mesina, donde se unió al resto de las tropas, y trabó amistad con Tancredo, rey de Sicilia, a cuya hija prometió la mano de su sobrino Arturo de Bretaña. Se tomó San Juan de Acre (1191) y el rey inglés conquistó Chipre a los bizantinos. Al año siguiente hizo un pacto con Saladino I por el que los peregrinos podrían acudir libremente a Jerusalén y se respetaría el culto cristiano. No logró conquistar esta ciudad, pero sí consiguió la supervivencia de Antioquía, Trípoli y un reino de Jerusalén bastante disminuido, por lo que la anexión de Chipre le ofrecía grandes posibilidades de futuro. Alcanzó grandes éxitos, pero su crueldad y altanería le granjearon serios enemigos. Las relaciones con Felipe Augusto, que también se encontraba en Tierra Santa, se hicieron tan tirantes que el rey de Francia regresó en cuanto pudo, e inmediatamente se puso en contacto con Juan sin Tierra, hermano y rival de Ricardo para ofrecerle su ayuda en la conquista del trono inglés. Al enterarse de la intrigas, Ricardo firmó un acuerdo con Saladino y abandonó Palestina en 1192. Pero al atravesar Austria, el duque Leopoldo, que estaba resentido desde que en la Cruzada Ricardo había hecho arrastrar su estandarte por el fango, le hizo prisionero y lo entregó al emperador Enrique VI que lo retuvo por más de un año, hasta que pagó un fuerte rescate y reconoció su vasallaje hacia el emperador.

Mientras, su hermano Juan sin Tierra aprovechó su ausencia para hacerse con el trono de Inglaterra de acuerdo con Felipe Augusto de Francia, que ya había comenzado la conquista de Normandía. Ricardo, llegó a su patria en 1194 y recuperó pronto sus territorios, obligando al rey francés a pedir la paz en 1196. Ricardo consiguió unir los condados de Bretaña, Flandes y Toulouse contra Felipe Augusto e hizo elegir rey de Alemania a su sobrino Otón de Brunswick.Ricardo tenía en mente un inmenso plan para convertirse en el árbitro de la cristiandad, colocando a los diversos reinos, bien bajo su control directo, bien bajo el de personas afines a él, pero el estado ruinoso de la hacienda inglesa le obligó a desistir. Llegaron entonces a sus oídos noticias de un tesoro fabuloso que se encontraba en el señorío de Chaluz y, mientras sitiaba la fortaleza, recibió una herida de flecha de la cual moriría el 6 de abril de 1199. Le sucedió en el trono su hermano Juan Sin Tierra.

JACJ